Ethan caminó por las bulliciosas calles de Z-City, con el dispositivo en la mano, observando el mapa que le había proporcionado la Asociación de Héroes. Cada paso que daba lo acercaba más a un desafío que aún no entendía completamente. El dispositivo, una pequeña pantalla que flotaba frente a él, mostraba un marcador rojo parpadeante en su interior, señalando el lugar donde debía enfrentarse a su primer monstruo de rango D.
El aire era fresco, pero el bullicio de la ciudad apenas lo tocaba. Había algo en el ambiente que lo mantenía alerta, como si todo a su alrededor pudiera explotar en cualquier momento. Esta ciudad, aunque moderna, estaba llena de contrastes. En un lado, la vida seguía su curso normal; en otro, la destrucción estaba a la vuelta de la esquina. Pero para Ethan, lo más desconcertante de todo era la sensación de no saber qué pasaría después de este primer desafío.
El dispositivo vibró ligeramente, sacándolo de sus pensamientos. La pantalla indicaba que había llegado al punto de destino: una zona industrial a las afueras de la ciudad. Los edificios estaban en ruinas, y el ambiente tenía algo inquietante. A lo lejos, podía ver una gran estructura de metal oxidado, claramente abandonada. Un nido perfecto para cualquier monstruo de bajo nivel que la Asociación de Héroes quisiera que enfrentara.
A pesar de todo, una extraña calma se apoderó de Ethan. Había algo sobre este mundo que lo desafiaba a seguir adelante, algo dentro de él le decía que debía enfrentarse a este reto sin dudar. No estaba seguro de qué esperaba encontrar exactamente, pero la sensación de que el destino lo estaba guiando lo impulsó a seguir.
Al llegar a la entrada de la fábrica abandonada, observó el entorno con cautela. Los restos de maquinaria y el polvo acumulado indicaban que el lugar había sido un centro de actividad alguna vez. Ahora, todo estaba cubierto por el olvido. Una ligera brisa movía las hojas secas en el suelo, creando una atmósfera aún más sombría. De repente, la pantalla del dispositivo parpadeó y una nueva alerta apareció.
"Monstruo detectado. Nivel de amenaza: Bajo (Rango D). Proceda con cautela."
Ethan apretó los dientes y ajustó los guantes de refuerzo que había obtenido después de su primer combate. Aunque la advertencia indicaba que el monstruo era de bajo nivel, no podía darse el lujo de subestimarlo. No conocía la magnitud de las habilidades de los monstruos de este mundo, ni sabía qué tipo de sorpresas le deparaban.
A medida que avanzaba, el sonido de algo arrastrándose resonó desde dentro del edificio. Ethan no dudó. Sacó una de sus armas, una daga ligera que se había materializado junto con su equipo, y se preparó. Al mismo tiempo, activó la habilidad [Instinto de Supervivencia], permitiendo que su agudeza sensorial aumentara. Fue un ajuste inmediato. Los detalles a su alrededor se hicieron más claros, como si el mundo mismo se hubiera ralentizado.
En ese momento, el monstruo hizo su aparición.
Era una criatura de unos dos metros de altura, con una mezcla grotesca de carne y metal. Su cuerpo estaba cubierto por una especie de armadura oxidadamente brillante que emitía un resplandor sutil a medida que se movía. Sus ojos, dos puntos rojos brillantes, lo miraban con una intensidad que lo hacía sentir incómodo. No era una bestia rápida, pero su fuerza era evidente en su postura.
El monstruo levantó una de sus garras metálicas y rugió. El sonido resonó en todo el área, una vibración que casi podía sentirse en el suelo. Ethan dio un paso atrás, concentrándose en cada detalle del monstruo. Sabía que si quería ganar, debía ser más inteligente que él.
Al principio, el monstruo no se movió. Ethan, aprovechando su agudeza sensorial, se percató de los ligeros cambios en la postura del monstruo. Sabía que la criatura iba a atacar en cualquier momento, y no podía darse el lujo de esperar demasiado. No tenía ni idea de qué tan resistente podría ser, pero estaba dispuesto a descubrirlo. Decidió hacer el primer movimiento.
Con un rápido movimiento, Ethan se lanzó hacia el monstruo, moviéndose con rapidez. No podía dejar que su tamaño y fuerza intimidaran su avance. A medida que se acercaba, vio cómo el monstruo levantaba su garra metálica para golpear. Pero en el último segundo, activó su habilidad de [Instinto de Supervivencia] y esquivó el golpe con una agilidad impresionante, deslizándose hacia el costado del monstruo. Su cuerpo, de alguna manera, ya sabía lo que debía hacer.
El monstruo, furioso, giró rápidamente para enfrentar a Ethan, pero ya estaba demasiado tarde. Ethan utilizó su daga para atacar las articulaciones de la bestia, dirigiendo el filo hacia las áreas más vulnerables de su cuerpo. El metal rechinó, pero la criatura retrocedió al sentir el daño. Sin embargo, no fue suficiente para derrotarla. El monstruo levantó una nueva garra y trató de arremeter con ella, esta vez mucho más rápido.
Ethan no podía permitirse un segundo golpe. Si el monstruo lo alcanzaba, sabía que podría estar en serios problemas. Pero la habilidad [Instinto de Supervivencia] continuaba trabajando a su favor. Lo vio. Un momento perfecto. En un movimiento fluido, saltó sobre el monstruo, clavando la daga en un punto débil justo donde su armadura metálica se unía a su cuerpo. El impacto fue brutal.
El monstruo gritó de dolor, un sonido horrible que retumbó en los oídos de Ethan, pero no cedió. De alguna manera, la criatura aún se mantenía en pie, luchando por liberarse. Pero Ethan sabía que había ganado. El daño estaba hecho, y el monstruo no tardó en caer al suelo, derrotado.
"Misión completada: Derrota al monstruo."
"Recompensas: 1500 puntos de experiencia, 1 habilidad especial."
"Habilidad obtenida: [Fuerza Bruta]. Aumenta la capacidad de daño físico y mejora la resistencia al impacto."
Ethan respiró con pesadez mientras observaba al monstruo caer. Esa había sido su primera verdadera batalla, y la victoria le había dado una sensación de logro. Pero, al mismo tiempo, no podía ignorar el hecho de que estaba lidiando con seres que, aunque de bajo nivel, seguían siendo increíblemente peligrosos. El poder que poseían no se debía subestimar, y él mismo todavía no era lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a todo lo que este mundo le deparaba.
El sistema, una vez más, apareció en su mente, y con ello, una nueva misión.
"Nueva misión secundaria: Regístrate para la siguiente prueba de rango C. Completa el desafío para continuar ascendiendo."
Ethan miró el mensaje y se quedó pensativo. Rango C. Sabía que los desafíos solo serían más difíciles. Pero en lugar de dudar, algo dentro de él se encendió. Si quería sobrevivir, tendría que seguir avanzando. El sistema le daba las herramientas necesarias, pero al final, dependía de él usarlas con inteligencia y valentía.
Con una sonrisa decidida, guardó el dispositivo y se preparó para lo que vendría.