1.
-Hotel central del pueblo Hanma. 30 de Noviembre del año 4589. 1:00 pm.
Saliendo de la ducha, el chico simplemente sonrió a su reflejo en el espejo. Una figura sumamente fornida, un cabello ondulado precioso y unos ojos llenos de resignación.
Me pregunto que debo hacer…
Desconcierto, la sensación de muerte era digna de un vertedero y curiosamente el joven aquí no había hecho absolutamente nada.
En fin.
Procedió a vestirse con lentitud y resignación. En un par de horas inicia la ceremonia del destello lunar, prácticamente todos van al claro más cercano al oeste del pueblo, una gran calle condecorada llena de múltiples tiendas de comida hacía suficiente compañía hasta el sitio.
Era el punto al que debía ir.
.
Esto es muy raro.
Livia miró por la ventana de su habitación y se encontraban muchas personas reunidas, como esperando algo, quizás un artista famoso.
Cabe recalcar que esta mujer odia fervientemente las multitudes y posiblemente ver a tantos congregados ahí le causaba suma repulsión.
Ella dejó sus pensamientos negativos al escuchar desde atrás como sonaba la puerta. Sin mucho drama se desplazó hasta ahí, dió un suspiro y abrió.
Livia, tenemos que movernos ya.
El joven estaba vestido con ropa extremadamente normal, su apariencia era incluso distinta debido a esto ya que siempre usaba aquella armadura azul.
Bien, aunque no me genera suficiente armonía que debamos ir con ropa relativamente normal.
Ella cuestionó las reglas no impuestas de moda que habían en este lugar perdido con mucha razón, sin embargo las personas en general no van a un sitio turístico a pelear por sus vidas.
Te entiendo pero no debemos llamar la atención, es mejor esto.
Lucio se rascó la cabeza e hizo un gesto despreocupado a la vez que emprendía su camino.
Haaahh… Otra cosa. ¿Por qué hay tanta gente abajo?
Salió de su habitación y cerró con seguro mientras detenía el andar de su compañero.
Oh, mejor ignoremos eso. Se trata de dos personas problemáticas para nuestros intereses.
Al oír esto ella sintió algo de desdén y como es normal procedió a sacar una daga de abajo del vestido rojo que está usando.
Dime o lo tomaré como un complot.
La sorpresa de Lucio al sentir el frío filo del arma fué totalmente real y este pareció entender las preocupaciones de su compañera.
La llamada Chloe Di'ur Nigrah y la criminal Cristina Montenegro.
Al mencionar ambos nombres, Livia dejó de sujetar a Lucio y estupefacta cerró los ojos por un momento.
¿Estás hablando de esa Di'ur Nigrah…? Y… ¿¡esa Montenegro!?
Una integrante de las 7 grandes familias y la heredera del apellido Leewdorght más legítima.
Livia estaba totalmente perdida, eran dos nombres los cuales no tienen nada que ver, ni hacer juntos. Inclusive deberían ser tomados como dos personas tan diferentes que el mero hecho de estar juntas es pecaminoso.
Si, mientras no nos metamos en sus caminos mejor. No tengo la más mínima idea de porqué llegaron pero lo hicieron en un "Aero-Nave" y los tripulantes también están con ellas. Por desgracia no tengo idea de sus nombres, son todos de la isla en el cielo.
Lucio era algo más que serio, era la mirada de una persona absorta en muchas cosas al mismo tiempo. Llamar a esta expresión odio era totalmente correcto y antes que tratar de beneficiarse por esta llegada imprevista, él parecía más temeroso que antes.
Si hay gente de ese continente aquí no dudes en que se trata de algo previo a llegar allí, posiblemente solo estén de paso. Todos saben que esa gente está en conflicto abierto con los del Sur.
Livia trató de encontrar explicaciones pero fué ineficiente, Lucio también pensó en eso antes.
Llegaron más o menos una hora después de nosotros al hotel y ahora están por ir al claro, van a ver la ceremonia. Hablando claro no tengo la más remota idea de lo que está ocurriendo. Por favor Livia, evitemos que nos noten.
Lucio enfatizó en su collar escondido haciendo que Livia guarde el suyo también. No está mal creer que son los únicos Explorers del más alto rango en este pueblo.
Aunque habiendo dos existencias de importancia mundial para los seres humanos reunidos… Nada es verdaderamente seguro.
2.
-Claro de ceremonias de Altaran. 30 de Noviembre del año 4589. 1:50 pm.
Mmm, parece que no está aquí.
La chica susurró para sí misma, el gato en su cabeza de forma intrépida no se cayó cuando ella movió la cabeza de un lado a otro con velocidad.
No quiero estar aquí, mejor seguiré buscando en el centro.
La facilidad que tuvo para escapar de entre tantas personas era dignamente destacable, el gato no parecía muy impresionado y se redujo a hacer la característica expresión universal de los gatos: cara de poker.
Entre tantas personas, Rose tuvo muy difícil lograr regresar al centro. Por fortuna habían puestos de comida más adelante, posiblemente ahí la congregación de personas estaría más distribuida.
De todos modos era curioso como la mayoría de personas prefería no ir al claro ya que estaba todo ocupado, de hecho solo habían sitios apartados para unos cuantos.
Ella se desplazó haciendo parkour y mientras el gato parecía ignorar las leyes de la física sobre su cabeza sin que ni un pelo de su cabeza se moviera.
Rose logró llegar al sitio donde más puestos de comida había y tuvo la suerte de que efectivamente; las personas se reunían en su mayoría alrededor de todos los puestos, como es obvio esto permitió a Rose calmarse, parecía que la persona que buscaba era verdaderamente importante para ella.
Ella pasó junto a un puesto de lo que parecían panecillos con marisco de relleno servidos en platos de papel y bañados de miel, el dulce aroma hizo que el gato sobre ella maullara cautivado.
Maaaaau… Maauuuuuuuu… Mmmaaaauuuuu…
Pasando de largo el siguiente puesto era de unos palitos fritos cubiertos en azúcar los cuales se daban en bolsas de papel y se bañaban en crema dulce o chocolate derretido.
Miiiuauauauaaaauuuuu… Maaaaaaa… Mmmmmuuuuuaaaauuuuuuu…
Llegados a este punto el gato siguió maullando con aún más intención de molestar a Rose.
Es-espera… sentí algo, ese hedor…
Entre medio de los alegatos e insultos en un idioma diferente al de un gato que podía hablar español perfectamente, Rose pudo sentir algo que para ella era suficiente, se puso en alerta y miró a todas partes.
No he fallado, sé que es como yo pienso… No fué imaginación mía.
Rose parecía algo enfadada consigo misma tras ver que no estaba presente esa persona, sin embargo no tardó en volver a sentir dicho hedor.
Era una peste como podredumbre, descomposición y humedad.
Miró entre la multitud, nadie más que ella parecía notar lo que ocurría. Este breve instante comprobó lo evidente: no había nada que notar, incluso la propia Rose llegó a creer en que fué una simple confusión estúpida.
Es Sasha, no tengo ninguna duda.
La chica junto a Rose se dirigió con sumo desde al decir este nombre, dado su personalidad retorcida cabría esperar algo más de "efusividad" sin embargo Haley fué sumamente fría.
Por un momento creí que sería él… No quiero que nos encontremos con esa mujer.
Un aire desconcertado demacró el entusiasmo de la chica que por un momento creyó ya haber conseguido su reunión tan esperada, por otra parte Haley buscó furtivamente, ella parecía interesada en otra cosa totalmente distinta.
Oye Rose, ese de ahí…
Señaló a un hombre alto de cabello largo y preciosamente rojo, la gran distancia entre ellas y él parecía nula ya que sus carcajadas resonaron sin límites.
Hakuhou Ryu. ¿Qué mierda es esta?
La chica maldijo escupiendo bilis y frunció el ceño. Era una situación muy rara, jamás imaginó que dos existencias de este calibre estuvieran juntas así como si nada.
El Santo de la Espada y la Bruja más buscada del continente.
Rose, ¿vas a buscarlo aún? Ambos sabemos que es mejor aguardar, las brujas no traen nada bueno y si ese monstruo está con ella… Puede ser peor.
El pequeño espíritu parecía preocupado por este descubrimiento y no dudó en dejar en claro como prefería evitar encontrarse con tales peligros.
No hace falta que digas tantas cosas que yo ya sé.
Rose se limitó a caminar en dirección totalmente contraria, el escalofrío que sintió la hizo sentir sumamente inquieta pero incluso así no miró atrás.