Lilly
—Gracias —susurré para ellos.
Y mientras la última mujer pasaba por mi lado, sentía una emoción que nunca había sentido antes al recibir el apoyo de todas esas mujeres hacia mí.
Me atraganté con las emociones, las lágrimas brotaron de mis ojos.
Nic estaba allí, con una sonrisa espectral sobre sus labios. Caminé hacia él, tomando su mano en la mía una vez más mientras limpiaba las lágrimas con la otra.
—Gracias, Nic —susurré mientras apoyaba mi cabeza en su brazo.
Él públicamente hizo que Zain le dijera la verdad por mi bien porque sabe lo crueles que pueden ser los lobos.
Especialmente las mujeres, él se aseguró de que yo no pareciera culpable...
Él me ayudó...
Como siempre lo hace.
—No es nada. Vamos a disfrutar de esta fiesta ahora... Bueno, intentaremos de todos modos. Solo tengo una pregunta más... —dijo, y levanté la vista hacia sus ojos esmeralda.
—¿Dónde está Dan y cómo está manejando esto? —preguntó, y yo fruncí el ceño.