Sasha no tenía intención de engañar a Dominique. Amaba profundamente a su esposo. Sin embargo, se sintió atraída por Timothy Wilson, un soltero encantador, sucumbiendo a sus propios deseos y vulnerabilidades como mujer necesitada.
Fue solo una vez, ¡pero fue un sexo increíble! Se acostó con él porque Timothy Wilson era un hombre que no quería compromisos. Sin ataduras, ¡solo sexo puro!
—Timothy, detente. Estás borracho —Sasha luchaba contra sus brazos.
Pero Timothy presionó más su cuerpo contra el de ella, haciéndola sentir su erección. —Oh sí... Estoy intoxicado por tu belleza, señora Smith. —Sus labios mordisquearon su lóbulo de la oreja mientras su mano se aventuraba a su pecho, apretándolo y manoseándolo.
Como respuesta, Sasha mordió su labio, reprimiendo un gemido. Antes de que pudiera detenerlo, los dedos de Timothy se deslizaron bajo su ropa interior, acariciando su sexo. Ya estaba mojada solo con su toque, sus dedos se deslizaban juguetonamente arriba y abajo por su raja.