Mi último recuerdo era el combate contra el espectro. Mi cuerpo estaba demasiado exhausto, cada respiración una lucha, cada movimiento una agonía que parecía no tener fin. Pero no me rendí. Con mis últimas fuerzas, lancé mi habilidad más poderosa y, finalmente, logré sellar al espectro .
Después de sellar al espectro, miré hacia el cielo con mi espada clavada en el suelo, apoyándome en ella. Sentí un alivio profundo y una sensación de triunfo que me invadió.
Mi respiración se logró calmar y mi cuerpo se relajó, liberándose del peso de la batalla. Pero en un instante, todo cambió. Un dolor intenso me golpeó la espalda y la oscuridad me envolvió. No pude hacer nada, solo caer.
Mi mente emergió del recuerdo, pero el dolor persistía. ¿Qué sucedió después de caer? Al recobrar la conciencia, me encontré rodeado de oscuridad. Sentí una creciente inquietud dentro de mí. Mi corazón latía con ansiedad, anticipando un destino desconocido. ¿Es este el fin, o solo el comienzo de algo peor?
Me sumí en pensamientos inútiles, aburrido y desesperado. "¿Por qué esto siempre me pasa a mí?", grité. En ese instante, recordé a Sofía. "¡Sofía!", llamé.
La oscuridad se disipó lentamente y una voz conocida respondió: "Mi señor, ¿qué necesita?".
"Sofía, ¿dónde estamos?", pregunté, desesperado.
"Usted está muerto, mi señor", respondió Sofía con una calma exasperante.
"¿Muerto? ¿Qué quieres decir?", repliqué, confundido.
"Exactamente eso, mi señor. Usted murió. Pero no se preocupe, su alma ya fue reconstruida", explicó Sofía.
"¡Sofía, no es momento para juegos! ¿Cómo voy a regresar?", insistí.
"Mi señor, no entiende. Su alma ya está lista para regresar a su cuerpo… pero hay un pequeño problema", dijo Sofía con una pausa dramática.
"¿Qué problema?", pregunté, impaciente.
"Resulta que su cuerpo está actualmente ocupado por un grupo de fantasmas jugando una partida de cartas", respondió Sofía con una voz completamente seria.
"¿¡Qué?! ¡Sofía, no me estés tomando el pelo!", grité.
La voz de Sofía se desvaneció, dejándome con más preguntas que respuestas. Y entonces, sentí que algo me jalaba hacia la oscuridad.
Antes de que pudiera insultar a Sofía por no responderme con información precisa, me desperté bruscamente. Mi corazón aún latía con furia.
Al abrir los ojos, vi a una joven sentada junto a mí. Su rostro era sereno, pero se sorprendió al verme despertar.
"Ahhhhhhhh", grité, sobresaltado. "¿Quién eres?"
La joven se levantó de un salto, con los ojos desorbitados. "¿Qué… qué eres tú?", preguntó.
"¿Qué quieres decir?", respondí.
La joven retrocedió, como si tuviera miedo. "Tú… tú no puedes ser real", dijo.
No tuve tiempo de responder. La joven me tiró una bofetada que me mandó volando hacia atrás. Me estrellé contra la pared con un sonido fuerte.
El impacto me dejó aturdido. Escuché a la joven gritar: "¡No te escaparás, demonio!".
Cuando logré recuperar la vista, vi a la joven cargando hacia mí con un candelabro en llamas. Su rostro estaba distorsionado por la furia y el miedo.
"¡Espera!", intenté gritar.
"¡Vas a morir ahora, demonio!", gritó la joven, cargando hacia mí con un ataque devastador. Pensé que ya había muerto. Me reí emocionalmente, pensando en la ironía de la situación.
"Análisis de habilidad exitosa, posibilidades de salir vivo 0%...", escuché la voz de Sofía en mi cabeza.
"Sofíaaaa, ¿qué debo hacer?", grité desesperado.
No hubo respuesta.
"Sofía, no es momento para ignorarme", insistí.
La voz de Sofía regresó, analizando la situación:
"Habilidad puño del dragón, copiado con éxito. Iniciando círculo de invocación para contrarrestar intenciones asesinas."
"Espectro…", dijo Sofía finalmente.
"¡Espectro!", grité.
"Cállese de una vez, es exasperante", respondió Sofía con su voz irritada .
"Repite lo que voy a decir: Te libero del sello que te implanté, te libero de la prisión donde te confiné. Ahora eres libre, sal espectro y sírveme."
Me sentí triste por esas palabras y grité repetí lo que dijo sin saber que pasaría:
"¡TE LIBERO DEL SELLO QUE TE IMPLANTÉ! ¡TE LIBERO DE LA PRISIÓN DONDE TE CONFINÉ! ¡AHORA ERES LIBRE, SAL ESPECTRO Y SIRVEME!"
En ese instante, un círculo de invocación apareció en el suelo y una energía oscura se liberó. El espectro emergió de la prisión dimensional, con su guadaña en mano.
La joven se detuvo, sorprendida, y su ataque se detuvo en el aire.
El espectro se interpuso entre nosotros, sin saber que sucedía .
"¿Quién eres?", preguntó la joven.
"La muerte misma ", respondió el espectro con una sonrisa.
La joven se rió como una desquiciada.
"Eres un demonio divertido", dijo.
El espectro se rió.
"Y tú eres una joven muy valiente… o muy tonta", respondió.
Mientras se miraban fijamente, el Espectro, sin darse cuenta de que había sido liberado, y yo, sin saber a quién había liberado.
"Grité: Sofíaaaa, ¿a quién me haces invocar? Sabes que con la justa lo sellé."
El Espectro me miró fijamente, mientras su risa resonaba por el aire.
"Pensaba que eras más fuerte", dijo con una sonrisa, "pero bueno, una mujer te tiene contra las cuerdas. Me niego a ayudarte."
En ese momento, escuché la risa de Sofía en mi mente.
"Jajajajaja, espero que la pases bien, mi señor", dijo con una risa burlona y sarcástica. "Te dije que no fueras tan débil. Ahora disfruta de tu nuevo amigo… o enemigo, no sé."
La risa de Sofía se convirtió en una carcajada, y pude sentir su diversión.
"¡Sofía, no es gracioso!", grité.
La risa de Sofía se detuvo, y su voz se volvió seria.
"Lo siento, mi señor. Pero debes aprender a manejar tus habilidades. No puedes siempre depender de mi ."
En ese momento, comencé a dudar sobre la personalidad y sentimientos de Sofía.
"¿Sofía, qué puedo hacer para que el Espectro me defienda?", le pregunté.
Sofía respondió con una voz monótona: "Mi señor, la respuesta está a tu alrededor. Pero te daré una breve explicación. En este mundo, la ley del más fuerte prevalece. Los monstruos y entidades como el Espectro carecen de nombres porque es peligroso para un humano nombrarlos. Sin un nombre, no pueden desarrollar habilidades definitivas. Algunos se someten a amos mediocres para obtener beneficios."
"¿Y tú, Sofía? ¿Te beneficiaste cuando te di tu nombre?", pregunté.
Sofía se quedó en silencio. Sentí una electricidad recorrer mi cuerpo. Luego, respondió: "Inmunidad a la parálisis adquirida". Después, me ignoró.
Con esa información, me dirigí al Espectro: "Si me ayudas, te daré un nombre".
El Espectro y la joven se quedaron impactados, helados por mi proposición.
En ese momento, la joven respondió: "¿Acaso estás loco de la cabeza?" Mientras que el Espectro apoyaba sus palabras.
Entonces, una tercera voz interrumpió con una risa que resonaba como un trueno en un día claro: "HAHAHAHAHAHAHA, ¡qué divertido!".
La joven parecía reconocer la voz, y su rostro se llenó de terror. Una figura emergió de las sombras, un hombre de piel bronceada, con una estatura imponente de casi 1.85 metros. Su cuerpo era una obra maestra de la perfección humana, con músculos definidos y proporcionados, como si fuera esculpido por un dios.
Sus ojos, dos pozos de azul profundo, brillaban con una intensidad que parecía ver más allá de la superficie. Su cabello, negro como la noche, caía sobre sus hombros como una cascada de seda. Su sonrisa, un rayo de sol en un día nublado, iluminaba todo a su alrededor.
La joven se arrodilló, y su voz tembló mientras hacía reverencia: "Mi señor…" El Espectro se escondió detrás de mí, como un niño asustado.
La advertencia de peligro resonó en mi mente: "Nivel de peligro: Nivel Dios. Advertencia, intenciones asesinas detectadas.
En ese entonces mi i cuerpo comenzó a moverse solo, esquivando por poco un golpe que provenía de él.
Sofía respondió: "Mi señor, déjeme esto a mí. Aún carece de nivel para enfrentarse a ese ser."
"¡Enséñame lo que tienes, compañera!", grité.
Sofía respondió en mi mente: "Percepción Rápida activada, Kai de curación activado, resistencias aumentadas."
El ser poderoso se rió con una carcajada: "HAHAHAHAHA, eres bueno, muchacho. Primera vez que un mortal esquiva un golpe mío."
Su velocidad era inhumana. Apareció detrás de mí en un instante, listo para lanzarme un golpe devastador. Mi cuerpo reaccionó automáticamente, esquivando el ataque por poco.
Sofía parecía irritada: "Ni con Percepción Rápida puedo ver sus movimientos. Si no fuera por el Kai de curación, ya tu cuerpo estaría muerto."
El combate continuó, mi cuerpo esquivando golpes tras golpes. Mi corazón latía con fuerza, mi respiración era agitada.
Finalmente, contraataqué. Mi aura se intensificó, creando varios círculos mágicos a mi alrededor. Invocando Lluvia del caos, disparé bolas de energía oscura como una metralleta.
Pero el ser poderoso esquivaba cada ataque con suma facilidad. Aparecieron más de 100 círculos mágicos, disparando con máxima potencia. Aun así, no logré acertarle un solo golpe.
El ser se rió de nuevo: "Tiene una buena potencia de ataque chico, pero tu debilidad es que te quedas sin mana."
Mientras seguía disparando sin parar, Sofía comenzó a irritarse cada vez más porque no podía acertarle un golpe. El ser respondió: "Comencemos con el contraataque, quiero ver tu potencial".
De repente, 100 puertas aparecieron a su alrededor, respondiendo a su llamada: "Gates of Eternal Shadows". De esas puertas salieron bolas de energía más potentes que mi ataque. Estaba perdiendo en potencia de ataque.
Sofía sonrió: "Lo que esperaba, idiota. Gates of Eternal Shadows. Copiado con éxito". Los círculos mágicos desaparecieron y mi cuerpo se sentía exhausto. Parecía que me quedaría sin mana.
El ser detuvo el ataque y se rió. "¿Estás bien ?".
Grité: "¡Idiota! En un combate no preguntes si el enemigo está bien". Sofía respondió: "Gates of Eternal Shadows". 200 puertas se pusieron a mi alrededor, saliendo 200 entidades de energía oscura.
A diferencia de ti, sé sacarle el potencial a este ataque que te robé.
El ser se rió: "Vaya, vaya. ¿Descaro? ¿Robarme una habilidad?".
Los entidades de energía oscura lo agarraron del cuerpo mientras agregué Lluvia del Caos. 200 círculos mágicos aparecieron a mi alrededor, atacando a toda potencia.
Una voz resonó: "Advertencia: quedan menos del 10% de mana. Usar en exceso podría causar graves consecuencias".
Grité: "¡Oye, Sofía! Detente, me quedaré sin mana". Sofía se rió como una loca mientras atacaba sin descanso.
El ser se rió: "Ahh, ahh".
En ese momento, una figura apareció detrás de mí y de un golpe, mi cuerpo salió volando, destruyendo una montaña. El ataque era tan fuerte que me mandó a volar más de 1000 metros.
Mientras tanto ese ser se rió. Diciéndole al espectro y a la joven que verifiquen si sigo vivo en ese entonces.
Mientras tanto, ese ser se rió y le ordenó al Espectro y a la joven que verificaran si aún estaba vivo.
Mi cuerpo emergió de los escombros que me habían caído encima por el impacto, cubierto por una aura oscura.
"¡Sofía, ya es suficiente!", grité.
Mi cuerpo se movió automáticamente, impulsado por Sofía. Un dragón oscuro surgió de mi puño, golpeando al ser con fuerza. El impacto lo hizo retroceder un centímetro.
Caí exhausto y sin energía, con mi cuerpo adolorido. El dragón se rió.
"Eres divertido, chico", dijo el ser, "pero aún así, debo revelarte que no eres rival para mí".
Recobré el control de mi cuerpo y sentí el dolor.
"No vale hacer trampas", le dije, "y sal de una vez".
El ser se rió.
"¿De qué hablas?", preguntó.
"¿Crees que no me daría cuenta de que ese cuerpo es solo un clon insignificante? ¿O me equivoco? ¿Acabo de pasar tú prueba?". Respondí
Su cuerpo comenzó a desvanecerse, y una figura emergió de la oscuridad, riendo.
"Eres muy divertido, chico", dijo. "Creo que ya encontré lo que buscaba".
La joven le preguntó: "Mi señor, ¿qué es lo que buscaba en realidad?".
El ser sonrió.
"Por fin encontré a mi mejor amigo", dijo. "No creí que un simple humano fuera lo suficientemente estúpido como para seguirme el paso a un dios dragón como yo, y menos aún darle un combate hasta estar a punto de morir".
Me quedé en el suelo, golpeado y confundido.
"¿Un dios dragón?", pregunté. "¿Qué quieres decir?"
El ser se acercó a mí, sonriendo.
Mientras utilizaba Hell sobre mí, sentí cómo mi cuerpo se curaba rápidamente. Mi mana se recuperó y me sentí más fuerte que antes.
"¿Cómo que buscabas un mejor amigo?", le pregunté.
El dragón se rió y respondió: "No creí que encontraría a alguien que pudiera seguirme el paso y aún así, mantener su sentido del humor".
Me extendió la mano para ayudarme a levantarme y me preguntó: "Y tú, ¿cómo te llamas?".
Me puse de pie y sonreí: "Me llamo Sora, pero no tengo apellido. Gracias por la habilidad de curación, amigo".
El dragón se rió con ganas. "¡Qué descaro! ¡Me robas 2 habilidades en 1 día!"
Su risa era contagiosa y me encontré riendo junto a él.
"Aun así, no importa", dijo. "Te parece si te doy mi protección divina?"
Me sentí conmovido por su ofrecimiento.
"Y tú, ¿cómo te llamas?", le pregunté.
El dragón sonrió. "Mi nombre es Ryoga, uno de los 6 dioses dragón. Y tú, Sora, eres mi mejor amigo".
En ese entonces, Ryoga repetía: "Seremos mejores amigos, te daré mi protección divina a la misma vez tallaremos en nuestras almas un apellido mutuo que te parece si me mencionas uno".
Antes de crear un apellido para ambos, le pregunté a Ryoga: "Si eres un dios, ¿en qué te especializas?".
El comenzó a sonreír como un loco. "Soy Ryoga, un dios dragón de la destrucción, prácticamente uno de los 6 seres más poderosos existentes. No existe nadie más fuerte que yo".
Mientras se reía como un loco, alabándose a sí mismo, le dije: "Un apellido que combine con nuestros nombres, ya está. ¿Te parece Kōjin?".
Ryoga se rió. "Kōjin, ¿qué significa ese apellido?", me preguntó.
"Significa dios de la devastación o dios de la calamidad", respondí. "En la mitología japonesa, Kōjin es el dios que trae la destrucción y el caos, pero también la renovación y el cambio. Se asocia con la energía y el poder de la naturaleza".
Ryoga sonrió. "Me gusta", dijo mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro. "Desde ahora serás Sora Kōjin".
En ese momento, algo en mi alma se talló, como si algo en mí hubiera cambiado. Pero no le di importancia.
"Y tú serás Ryoga Kōjin, mi mejor amigo desde ahora y como un hermano mayor", respondí.
Sofía respondió en mi mente con una voz clara y serena: "Protección divina adquirida".
No comprendía el alcance de esas palabras, pero Ryoga me iluminó.
"Ya sé que tienes un pasado en otro mundo", dijo Ryoga a través de la telepatía. "No importa. Lo que importa es que desde ahora, compartiremos un destino común. Juntos enfrentaremos lo que venga".
Su voz en mi mente era firme y segura, transmitiendo una sensación de confianza y unidad.
El espectro interrumpió, de rodillas y con una expresión iluminada, gritando: "¡Oh, Sora-sama! Usted es tan magnífico. Por favor, acépteme como un fiel subordinado. Estaré dispuesto a no defraudarlo".
No entendía lo que decía, pero Ryoga intervino: "Valla, Sora, creo que ya tienes un fan. Debido a tu combate conmigo, parece que le interesas. ¿Por qué no pruebas dándole un nombre?".
"¿Un nombre?", pregunté.
Me dirigí al espectro y le dije: "Te llamarás Zero".
En ese momento, sentí como si mi energía fuera drenada. Mientras una luz iluminaba el lugar, una advertencia resonó: "El Espectro está evolucionando a una entidad desconocida".
Ryoga se dio cuenta de algo y se rió: "Creo que eres genial, Sora-san. Valla, pensé que evolucionaría a un monstruo, seguro se vuelve un joven apuesto". Mientras hablaba, lloraba por dentro.
La luz desapareció, y Zero se reveló. Era un ser de una belleza sublime, con facciones divinas y ojos que brillaban como estrellas en la noche. Su cabello negro como el ébano caía en cascada sobre sus hombros, y su traje negro parecía estar tejido con la propia noche. Su presencia era como un susurro de la divinidad, un recordatorio de que la perfección existía.
"Un joven apuesto, de hecho", dije, sonriendo.
Zero se puso de pie, su mirada fija en mí. "Sora-sama", dijo, su voz como música celestial. "Estoy listo para servirte".
Ryoga intervino en el mejor momento.
"Pensaba que sería un fan, pero este Zero es demasiado intenso", dijo con una sonrisa.
Zero estaba de rodillas, con los ojos brillantes y una expresión de absoluta devoción. "Sora-sama, mi dios, mi salvador", decía una y otra vez, sin parar. "Su grandeza es infinita, su poder es incomparable".
Cada vez que decía mi nombre, su voz se elevaba y su rostro se iluminaba. "Sora-sama, usted es la perfección encarnada", continuaba.
Ryoga se rió y me preguntó: "¿Cómo te sientes con este nivel de adoración?"
"Bueno, me siento bien, supongo".
Ryoga parecía confundido. "Te sientes bien debido a que nombraste a este espectro y le creaste un cuerpo", dijo.
"Pensé que morirías al nombrarlo, pero parece que ha tenido el efecto contrario".
Sofía respondió: "Mi señor, su capacidad de EP ha aumentado un 50% después de nombrar a Zero y darle un cuerpo. Su cantidad de EP ha crecido significativamente".
"Gracias, Sofía", respondí.
Mi mirada no se apartaba de Zero, que seguía hablando sin parar. "Sora-sama, mi dios, mi todo".
Ryoga se rió y sacudió la cabeza. "Creo que tienes un problema, Sora".
Me volví hacia Ryoga y le hice una pregunta: "¿Cuál es el nombre de la joven?".
Mientras tanto, Ryoga respondió: "No sé, solo me dieron a ella para servirme. No la nombre debido a que no quiero tener problemas con subordinados. A la misma vez, solo es una simple muñeca, creo. Antes había dos, pero ahora está ella. Solo aparecen para robarme comida y me alaban. Aún así, no las conozco".
"Mientras me alaben, es bienvenida", dijo.
En ese momento, la joven se retiró del lugar. "Entiendo, Ryoga-san", respondí.
"¿Te parece si me enseñas otra habilidad más?", pregunté. "Quiero robártela".
Ryoga se rió. "Descaro, mi mejor amigo me quiere robar todas mis habilidades.
"Tengo una pregunta", dijo. "¿Qué son esos dibujos de papel que tienes en tus recuerdos? ¿Y esos vídeos que ves? Se ven interesantes".
"Eh, se llaman mangas", respondí. "Y los vídeos, anime y películas. Desafortunadamente, no puedo transcribirlos. Menos tienes una televisión para verlos".
Sofía respondió: "Habilidad transferencia de información adquirida. Ejecutado con éxito".
De repente, aparecieron una fila de mangas y novelas. Ryoga se sentó a leer y empezó a gritar como loco con solo tocar un manga.
"Parece que este día no será aburrido", pensé.
En ese momento, Zero se me acercó y me dijo: "Mi señor Sora-sama, ¿por qué no crea un imperio? Este lugar es demasiado grande y tiene unos buenos puntos estratégicos para crear un reino poderoso con su beneficencia. Seguro lo logra, Sora-sama".
"Crear un reino", dije. "Buena idea, Zero. Eres el mejor" . Zero empezó con su locura de nuevo, alabándome sin parar. Creo que tendré un dolor de jaqueca.