Cuando Mianmian llegó, vio justo a la fantasma femenina metiendo muchos pétalos de rosa en la boca de su sobrino nieto.
Sacó la Cuerda para Enganchar Almas y la lanzó hacia la fantasma femenina.
La fantasma femenina estaba frunciendo los labios para besar el cuello de Su Chenyi, a punto de probarlo, cuando de repente encontró que su cuello no bajaba por más que lo intentara.
La fantasma femenina miró alrededor sorprendida, luchando por bajar la cabeza, forcejeando con Mianmian.
—¡Mianmian nunca había encontrado a alguien con tanta fuerza!
Pequeño Bollo tuvo que usar un poco más de fuerza para alejar a la fantasma femenina de Su Chenyi.
—¿Qué está pasando? —La fantasma femenina giró la cabeza para mirar detrás de ella pero no descubrió nada.
Mianmian ejerció más fuerza y empujó a la fantasma femenina al suelo, donde la Cuerda para Enganchar Almas la ató firmemente.
