—¡Jajajaja! —Sasha se rió en voz alta—. A la edad de Miguel, se le considera un joven entre la familia real licántropa. Esto no se considera una pérdida para ti. Además, Miguel vivirá más que un licántropo ordinario como príncipe. Todavía está...
Sasha parecía haber pensado en algo y dejó de hablar. Escogió sus palabras con cuidado—. Nuestro actual rey licántropo ha estado en el poder durante dos siglos. Tiene más de quinientos años y todavía está lleno de energía. Hace dos años, casi le dio a Miguel un hermano menor. No tienes que preocuparte por el futuro en absoluto. Miguel es muy enérgico —Sasha me guiñó un ojo como si insinuara algo.
—Creo que moriré antes que él —murmuré.
—Si sois compañeros y os marcáis, entonces no —respondió.
—¿Por qué no? —pregunté.
—No debería ser yo quien te lo diga. Puedes preguntarle a Miguel —dijo Sasha.
—Vale —dije antes de recordar algo más—. Dijiste que tienes más o menos la edad de Miguel, así que, ¿por qué vas a la universidad conmigo?