—César. Soy un hombre casado —asentí—. Lo sé, pero ¿por qué me está diciendo esto? "Es una buena bebedora, no te preocupes por eso—me miró seriamente—Pero ahora que está borracha, es tuya—fruncí el ceño confundido pero Ben solo me dio unas palmadas en los hombros y luego me empujó hacia la habitación—Buena suerte—y se fue corriendo.
¿Qué...?
¿Por qué yo?
—Abri la puerta y eché un vistazo dentro, la habitación parecía vacía, podía ver dos botellas de whisky en el suelo —abrí un poco más la puerta y medio entré en la habitación cuando alguien agarró mi mano desde el punto ciego detrás de la puerta y me arrastró hacia adentro.
—Escuché el clic de la cerradura de la puerta detrás de mí y me di la vuelta para ver a Nora, de pie allí en su ropa interior negra, con la tercera botella de alcohol en la mano.
—TÚ~ —se acercó a mí y yo retrocedí—, ¿por qué te alejas?