Amelia frunció el ceño y se le hizo aún más difícil entender. —¿Entonces por qué la Segunda Tía se embarazó del Hermano Harper? ¿Al Tío Segundo le gusta la Segunda Tía?
Dylan sacudió la cabeza. —No lo creo.
—... —Ella miró fijamente a Dylan. Dylan sintió un escalofrío recorrer su espina dorsal y preguntó:
—¿Qué pasa?
Amelia preguntó seriamente, —El Tío Segundo no quiere a la Segunda Tía, pero el Tío Segundo y la Segunda Tía tuvieron al Hermano Harper y a la Hermana Emma. ¿Es el Tío Segundo el canalla del que todos hablan?
Dylan abrió la boca pero no dijo nada.
Dylan lo palmeó comprensivamente y lo consoló. —Está bien, Tío Segundo. Mia entiende.
—??? ¿Qué entendió? No... —Dylan estaba a punto de hablar cuando llegó Eric y gritó:
—Mia, la buena niña del Tío Quinto, ¡deja que el Tío Quinto te abrace! Ni siquiera se quitó el casco de la cabeza. Estaba sudando profusamente y extendió los brazos para abrazar a Amelia.
Dylan apartó su mano. —¿No estás sucio?