—Entiendo por qué estás pidiendo mi ayuda en este asunto —dijo Robin—. Pero, ¿no sería mejor si dejas que los Clasificados del Reino se ocupen de esto personalmente?
Lux sacudió su cabeza. —Estoy bastante seguro de que Lluvia Crepuscular ya ha plantado sus espías en casi todas las ciudades del Reino, incluyendo el Palacio Real. Si algún miembro prominente de las Élites del Reino empieza a moverse, sin duda se darán cuenta.
Robin no pudo refutar las palabras de Lux, porque en verdad era así. Incluso su padre reconocía que incluso aquellos en quienes confiaba podrían haber sido sobornados ya por Lluvia Crepuscular para ayudarles a usurpar su gobierno.
—Entendido —Robin asintió—. Dado que estás haciendo esto por el bien del Reino, te ayudaré. Estoy seguro de que Nevreal dejará de lado sus rencores personales para librarnos de estos peligros ocultos.