—Max fue abruptamente arrancado de un sueño profundo cuando los Cañones Trueno empezaron a disparar, mostrando todo el chasis —rápidamente revisó la memoria de Nico y encontró que un gran Contingente Klem, incluyendo los primeros Behemots que habían visto, habían emergido de las montañas y estaban enfrentándose a la furia del grupo del Mando.
—Aunque Nico no estaba en los controles, Max podía decir que el Mecha estaba disparando al setenta y cinco por ciento del ritmo máximo. Ella estaba deliberadamente reteniéndose, ya fuera por el bien de su audiencia orbital o por la gestión del calor.
—Según las fuentes de los sensores, los demás estaban haciendo lo mismo, así que parecía que la tasa de disparo estaba coordinada, al menos.
—A diferencia de todos los demás, que se atarían para mantener una mano firme en los controles, Nico estaba de pie, cantando y bailando al ritmo de los disparos.
—Está lloviendo Klem, aleluya está lloviendo Klem...—cantaba y se reía mientras bailaba.