El profundo análisis del Chamán del Bosque de los Olvidados fue inolvidable para todos los miembros del grupo de Kaizen. Era un PNJ, pero parecía conocerlos profundamente, como si pudiera literalmente leer sus almas, no sus avatares, sino sus almas reales y lo que realmente temían y deseaban. Así que esta fue una experiencia que hizo pensar a todos.
Después de terminar de hablar, el pequeño mediano inclinó su cabeza y con las manos aún detrás de él comenzó a caminar hacia la puerta de la cabaña de nuevo.
—Oye, viejo, gracias por el consejo, pero vinimos aquí por otra cosa —dijo Kaizen, al ver que el Chamán se alejaba—. Queremos las Marcas para llegar a la Ciudad de Lágrimas.
—Lo sé —dijo el mediano—. Pídeles a tus amigos que miren vuestros antebrazos. Y continuó caminando hacia la puerta.