Por la mañana, el grupo de Kaizen finalmente alcanzó la imponente capital de Tretidian.
Las majestuosas y colosales estatuas colocadas en la gran montaña que era literalmente el Centro Comercial, se alzaban sobre gran parte de la ciudad, sostenidas por antiguas columnas y dando a todos una sensación de imponencia. A pesar de que era temprano, la ciudad ya estaba zumbando de vida por todas partes, y el número de jugadores parecía incluso mayor que cuando Kaizen estuvo por última vez en la ciudad.
Era normal que muchos jugadores usarán la mañana para cazar monstruos o ir a la Asociación de Aventureros para recoger sus misiones, después de todo, la mayoría de los jugadores eran diferentes de Kaizen, no tenían la "suerte" de estar siempre involucrados en problemas.
Al entrar por las puertas, el bullicio de la ciudad envolvió al grupo de Kaizen. Las calles estaban llenas de comerciantes apresurados, transeúntes curiosos y jugadores con armaduras relucientes.