Og'tharoz no conocía a Fryft, pero dado su esfuerzo para ayudar a Lily Sangrienta a atravesar la puerta, ella era alguien digno de protección. Sin embargo, protegerla mientras luchaba contra alguien tan fuerte como Belial era una tarea extremadamente difícil, porque el demonio que comanda el primer círculo del infierno es un mago y no tener mucha movilidad frente a un mago tan poderoso es casi una sentencia de muerte.
Aun así, Og'tharoz nunca pensó en soltar a Fryft. —Si prometí protegerla, eso es lo que haré —pensó.
Para Belial, la agilidad con la que Og'tharoz esquivaba sus hechizos era irritante. Era tan rápido que parecía como si estuviera bailando entre las olas de energía que Belial lanzaba contra él. Frustrado por la resistencia de Og'tharoz, Belial intensificó su ofensiva. Sabía que las llamas eran inútiles contra Og'tharoz por alguna razón, pero hacer que las absorbiera era parte de su estrategia.