Finalmente, el grupo de aventureros liderado por Dario se alejó tras la negativa de Kaizen y, después de unos minutos, se acercó al mostrador para resolver sus otras dudas con el empleado del Gremio de Aventureros.
Cuando Kaizen se acercó al mostrador de la Asociación de Aventureros, fue recibido por un atendente sonriente, vistiendo el uniforme característico del lugar. El hombre parecía estar acostumbrado a tratar con aventureros en busca de información y estaba dispuesto a ayudar.
—¡Hola, aventurero! ¿En qué puedo ayudarte? —preguntó el atendente.
Kaizen reconoció el saludo con un asentimiento y dijo:
—Hola, mi nombre es Klaus. Necesito un mapa de la región y, si es posible, de toda la nación. ¿Tienen alguno?
—Por supuesto, tenemos mapas de la Región de Pokkir e incluso del Reino de Mibothen. Siempre es bueno estar bien informado antes de emprender un viaje, ¿no es así? Permíteme conseguirte uno —el hombre respondió, de manera simpática.