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—Haah... haah... —Mientras avanzaba por la cuarta sala del Abismo Raro, Valyr se tomó un momento para recuperar el aliento, sintiendo una pizca de agotamiento por las peleas que había librado en las tres salas anteriores en las que estuvo—. Definitivamente es más agotador en comparación con mis dos recorridos anteriores, pero vaya que es mucho mejor que mi primer intento en el Abismo Raro en aquel entonces.
Observando el camino frente a él para tener una idea de cuántos Magos Esqueleto tendría que combatir antes de poder proseguir a la quinta sala, Valyr rebuscó en sus recuerdos para recordar la disposición del Abismo Raro, que no difería mucho de las dos primeras mazmorras en el hecho de que las tres eran generadas de manera procedimental.
No obstante, con la salida de las Cuevas Comunes encontrándose después de 10 habitaciones, y la salida de las Profundidades Incomunes en la 12, uno solo podía salir del Abismo Raro después de haber pasado por 15 habitaciones.