La risa de Lila resonó —Jaja, qué tierno de tu parte preocuparte, y con razón. Pero déjame asegurarte, este es el pedazo de tecnología más seguro que existe. El producto final que ves ahora es el culmen de décadas de investigación, cariño. No procedimos a los ensayos en humanos hasta que estuvimos seguros de que no habría efectos dañinos o irreversibles —explicó Lila con un entusiasmo contagioso.
Lucy intervino con una cálida sonrisa —Señora Sterling, la doctora Lila tiene razón. Llevo aquí unas semanas, y después del día inicial de instalación, nunca me he sentido mejor. Estos tubos son solo para calibración o algo por el estilo.
Raquel asintió, sintiéndose ligeramente tranquilizada por la sonrisa de Lucy, pero aún le quedaba una pregunta —Pero ¿cómo repondrán el maná si planean dar un largo paseo afuera? Marte no tiene maná en su atmósfera como la Tierra —preguntó, mirando de Lucy a Lila en busca de respuestas.