—La inmensa silueta de Drakaris se cernía sobre un decidido Raziel mientras decía, "Muy bien. Para superar mi prueba y obtener mi poder, tendrás que... matar a tu madre o a esa mujer llamada Selene. Una vez lo hagas, todo esto terminará. Pero la que mates ocupará tu lugar y lo soportará en tu nombre pero sola."
—Los ojos de Raziel, abiertos de incredulidad, reflejaban su conmoción.
—Se levantó tambaleándose, enfrentando la mirada de Drakaris con una mezcla de shock e indignación, "¿Qu-Qué diablos estás diciendo? ¿Cómo puedes pedirme que haga algo así cuando todo este tiempo he estado tratando de salvarlas! ¿Estás tratando de hacer esto aún peor para mí? ¿Te gusta verme pasar por esto?"
—La respuesta de Drakaris llegó, tranquila e imperturbable, "Me pediste una salida, y te estoy dando lo que querías."