Isola, Merina y Ceti, aún recuperándose de su anterior confrontación con los Draconianos, se volvieron aún más cautelosos con los nuevos recién llegados.
El ambiente se volvía más volátil con cada segundo que pasaba.
Y excepto por Merina, Isola y Ceti no sabían si deberían sorprenderse al ver a estos Cazadores, especialmente a esa mujer de cabello azul que tenía una venganza personal contra Asher.
Sin embargo, los puños de Isola se apretaron, y su rostro se ensombreció al ver al hombre que participó en la masacre sin piedad de 5 de su gente.
En su interior, había deseado encontrarse con él, pero no en una situación como esta.
¿Era esta una prueba de los Demonios?
La atmósfera cargada de niebla estaba densa de tensión mientras Raquel daba un paso adelante, su lanza apuntando invariablemente a Asher.