—Moraxor, aceptando la validez de la pregunta de Asher, procedió a asentir en acuerdo —ciertamente, uno no puede participar continuamente del Elixir de los Antiguos, el cual tampoco era infinito en cantidad. Un solo gota es el límite, cualquier cosa más allá de eso, y la abrumadora energía devastaría nuestros cuerpos mortales. Incluso absorber esa única gota requiere gran esfuerzo y precaución para asegurarte de que tu cuerpo no sea destruido —declaró Moraxor, su tono impregnado con un eco de reverencia por la potente sustancia.
Él aún podía recordar cómo su cuerpo temblaba cuando absorbió la gota del elixir durante sus años jóvenes.