Antes de que pudieran interrogar al líder más a fondo, este abruptamente quitó su propia vida, dejando a los Centinelas atónitos por el repentino giro de los acontecimientos.
¡El hombre parecía haber usado un veneno oculto para silenciarse a sí mismo! Los otros que fueron capturados se percataron de lo sucedido y rápidamente se quitaron la vida... Sucedió tan rápido que Teresa y Clare no pudieron detenerlos a tiempo.
La habitación cayó en silencio una vez más, pero el peligro inminente se cernía sobre ellos como una nube oscura.
—Qué grupo de lunáticos...
—Tenemos que informar a los demás acerca de esto rápidamente. Al menos deberíamos dejarle saber a Odessa...
Dijeron Teresa y Clare mientras intercambiaban una mirada cómplice.
Entendían que el tiempo era esencial, y necesitaban evitar la invocación de las tres Entidades Maléficas Misteriosas antes de que sembraran el caos dentro de la ciudad.