—¡No! —exclamó dramáticamente Gideon mientras los siete supervivientes eran escoltados fuera de la habitación.
Casper, también, se quedó rezagado al lado, disgustado por cómo iba a ser separado de los otros miembros.
No obstante, el grupo de siete supervivientes se despidió con la mano, riéndose al observar las caras abatidas de los demás.
—¡Diviértanse jugando a los otros juegos, chicos! —exclamó Akira con una carcajada.
Los demás siguieron la broma, insinuando que como ellos habían escapado, los otros seis tenían que resolver otro rompecabezas más hasta que escaparan de la habitación.
Sin embargo, cuando se cerraron las puertas detrás de ellos, los supervivientes se dieron cuenta rápidamente de que ellos eran los que tenían la peor parte.
La puerta se cerró de golpe detrás de ellos, sellando su destino una vez más dentro de los límites de otra habitación.
Contrariamente a la última sala, se encontraron en una cámara tenue iluminada.