Todos los miembros de la Grulla Carmesí estaban luchando intensamente. Llevaban un tiempo peleando, exhaustos y habiendo utilizado grandes cantidades de Qi, con un gran número de enemigos aún por enfrentar.
Encima de todo esto, estaba Reno, a quien se le había encomendado la tarea de cuidar de Raze. Lo había llevado atado a su espalda un tiempo. No había participado mucho en la lucha, pero todo era mentalmente agotador para él.
Había estado esquivando golpe tras golpe que venían en su dirección, y cuando el Mago Oscuro fue golpeado, un pánico se asentaba en él. Era más que una tarea que le había encomendado su líder, pero él sentía que tenía una responsabilidad.
Y luego, comenzaron a sucederse hechos locos, gente muriendo a izquierda y derecha y él mismo siendo empujado. Había mucho que había estado rondando en su mente, hasta este punto, donde los ojos de Raze ahora estaban abiertos.