Por supuesto, cómo podría el Maestro Damien alguna vez elegir o mirar a alguien o algo de poco valor —Tu padre es un hombre tranquilo. Es difícil de— Penny se detuvo mientras trataba de encontrar la palabra adecuada.
—¿Pensar que estaban casados? Son polos opuestos —él completó y estuvo de acuerdo con lo que ella dijo.
—¿Y qué hay de tu madre? ¿Era sobreprotectora? —Damien tomó su turno para saber más sobre la mujer que estaba tratando de matarla.
Penny miró al frente, el árbol de aspecto puntiagudo que se ramificaba en diferentes direcciones simétricamente —Parecía ser normal en ese entonces —dijo con una sonrisa incómoda—, no le importaba que saliera, trayendo los níqueles a casa que la casa necesitaba para funcionar. Estaba bien —ella no sabía cómo había fallado en ver la fachada todos esos años que vivió con su madre.