—¿Sin embargo? —preguntó Lucilla.
—Sin embargo, podría tener un problema para venir aquí en el futuro ya que comenzaré a viajar muy pronto y
—Ah… eso es de lo que quería hablar contigo —Lucilla sonrió mientras la interrumpía. Luego le entregó lo que parecía ser un anillo.
—¿Qué es eso? —Rosalind fingió no saber para evitar sospechas, pero no pudo evitar sonreír interiormente. El momento era el justo, pensó para sí.
—Esto es algo que nuestros artesanos acaban de desarrollar recientemente. Es un anillo de teletransportación que te llevará a una de las habitaciones subterráneas. Lamentablemente, no puede llevarte a otro lugar que no sea la habitación, pero una vez que desarrollamos algo así, te daré uno —Lucilla le entregó un anillo con una gema azul.
Rosalind inmediatamente se lo puso en el dedo anular izquierdo.
—¡Ah! —Rosalind dio un respingo cuando el anillo de repente desapareció. —¿Qué?