Chereads / Evangelion: NERV Moscow / Chapter 14 - Preludio a la batalla

Chapter 14 - Preludio a la batalla

NOTA: Los derechos de las series Neon Genesis Evangelion y Black Lagoon NO me pertenecen. Esta historia fue escrita sin fines de lucro, solo como medio de esparcimiento. No me demanden.

__________________________________________________________________

— ¿No podremos ir a la excursión de la escuela a Okinawa? ¿Por qué? — preguntó una sorprendida Asuka a una seria Misato, que estaba esperando a que los Pilotos EVA terminaran las pruebas de sincronización del día para darles la mala noticia.

Durante el pasado mes, los chicos habían pasado por extenuantes sesiones de entrenamiento, que culminaron con una impresionante demostración de capacidad, superando en forma espectacular a las Fuerzas Especiales de NERV. Aún ahora, dos semanas después de ese ejercicio, lo que habían realizado los Pilotos EVA seguía siendo objeto de comentario por parte del personal de NERV, sobre todo al conocer los detalles mismos del ejercicio, como el salto en paracaídas sobre el mar en medio de la noche, o bucear por el interior de un túnel inundado del tren subterráneo sumergido bajo el mar.

Ahora, finalizado todo eso, los chicos habían retomado la escuela y relajado la intensidad de los entrenamientos, por lo que estaban regresando en parte a una vida más normal, si es que se le puede llamar "normal" a la vida que llevan. Aun así, Misato consideraba que sería una buena idea que los chicos tomaran un descanso. En verdad lo merecían después de todo lo que habían hecho. Por eso es que la mujer lamentaba tanto la noticia que estaba dándoles, pero era algo necesario.

— Lo siento chicos, pero tienen que esperar aquí en Tokio–3 en caso de un ataque — fue la respuesta de la mujer de cabellera oscura.

— ¿Quién decidió esto? — cuestionó una enfadada pelirroja.

— La Capitán Balalaika; y debo decir, que estoy completamente de acuerdo con su decisión. Siempre existe la posibilidad de que un Ángel ataque mientras ustedes están de excursión — señaló Misato, enfrentando a la ceñuda pelirroja.

— ¿Así que fue cosa de esa perra? — regañó Asuka, que aún no podía pasar a la rusa, logrando que Shinji le diera una fugaz pero estrecha mirada, que no pasó desapercibida para Misato.

— La Capitán solo hace lo que considera mejor para todos — comentó Shinji, un tanto cortante.

— ¿Estás de acuerdo con la decisión de esa mujer? — preguntó Asuka, entre enojada y sorprendida.

— Era obvio que no nos dejarían ir. Solo imagina lo que pasaría si un Ángel ataca y no estamos aquí para detenerlo — respondió el joven haciéndole ver a Asuka las razones para negarles el permiso.

— No lo puedo creer. Tú siempre estás de acuerdo con todo lo que dicen los demás. En especial esa rusa malas pulgas. ¿Acaso te lavaron el cerebro? — lo regañó Asuka mirándolo con ojos estrechos y las manos en las caderas.

— Oye, no la agarres conmigo, yo no tuve nada que ver en esto. Además, Misato también está de acuerdo en que no vayamos — se defendió Shinji, levantando las manos en son de paz, mientras Misato lo miraba seriamente por esta acción, constatando cuanto había cambiado el vástago despreciado de Gendo Ikari, ya que hace un par de meses el chico muy probablemente se hubiera retorcido de susto ante el regaño de la pelirroja, o hubiera buscado alguna otra alternativa para evadir el conflicto. Pero ahora, la enfrentó y se la sacó de encima sin ningún problema.

— ¡Sheisse! — regañó en alemán la pelirroja, ante la respuesta de Shinji — Y tú no te quedes ahí parada como una estatua. Di algo, niña modelo — le dijo a Rei, que estaba de pie junto a Shinji, observando atentamente sin decir una palabra.

— Es una orden. Debemos acatarla — fue la escueta respuesta de la chica peliazul.

— No sé para qué me molesto en preguntarte — repuso Asuka, rodando los ojos — Me enferma esta situación. Siempre somos nosotros los que debemos esperar. ¿No podemos averiguar dónde están para ir a atacarlos primero?

— Si pudiéramos, lo haríamos — respondió Misato con algo de pesar — Bueno, no hay mal que por bien no venga. Mientras sus compañeros de clase están fuera, ustedes dedicaran su tiempo a recuperar clases.

— ¿¿Qué?? — preguntaron espantados Shinji y Asuka. Rei por su parte solo pestañeó.

— Lo que escucharon — respondió Misato con una sonrisa — Como el último mes se han dedicado solo a entrenar, han descuidado demasiado sus estudios, por lo que aprovecharemos este tiempo para que se pongan al día. De hecho, acá tengo unos discos de datos con las materias que deben estudiar.

— Genial. ¿Cuál es el motivo de ir a la escuela, de todos modos? Lo que enseñan ahí no me va a servir para derrotar un Ángel — cuestionó la pelirroja a Misato, cruzándose de brazos.

— "En Roma, has como los romanos". Ahora todos vayan a cambiarse. Los estaré esperado aquí.

— Rayos... y pensar que pasé toda la tarde de ayer con el instructor Sakharov eligiendo un traje de baño, y todo para nada — regañó la pelirroja.

Luego de estas palabras, el trío de Pilotos EVA se encaminó a los camerinos para tomar un baño y cambiarse de ropa, mientras que Misato los observaba de brazos cruzados, sin poder quitarse de la mente esa mirada de reprobación de Shinji para Asuka cuando esta insultó a la Capitán Balalaika, y la forma en que luego la defendió. Este hecho la molestó e hirió por partes iguales, pero apartó eso de su mente. Esta era una buena oportunidad para acercarse a Shinji y la aprovecharía.

 

________________________________________________________________________________

 

— ¿Una excursión escolar? Se relajan demasiado en tiempos como estos — señaló Ristuko, sin quitar la vista de un Tablet con datos que estaba revisando minuciosamente.

— Para serte sincera, me hubiera encantando que fueran a esa excursión. Los chicos merecen un buen descanso luego de todo lo que hicieron el pasado mes — dijo Misato con algo de pesar.

— Sí, en verdad hicieron algo sorprendente. Aún hoy se escuchan comentarios en los corredores de NERV sobre la hazaña que realizaron. Ahora todo el personal mira a los Pilotos EVA con otros ojos, y con mucho más respeto que antes — comentó Ristuko.

— Aun así, no me gusta para nada lo que esa mujer hizo con los chicos — dijo Misato, con una mirada reprobatoria.

— ¿Te refieres a entrenarlos como soldados y mandarlos a realizar una operación militar de un nivel de Fuerzas Especiales, solo para demostrar el fruto de su trabajo? — preguntó Ritsuko, contemplando seriamente a su amiga — Con el debido respeto Misato; cuando estabas al frente de la Operaciones de NERV, también mandabas a los chicos a pelear.

— Pero mis métodos eran muy distintos a los de Balalaika. Yo no quería transformar a los Pilotos EVA en máquinas de matar — argumentó Misato, con el ceño fruncido.

— Es verdad, pero de todas formas los enviabas a pelear… y a morir, si las cosas no salían bien — respondió la científica — Y a todo esto. ¿Cómo van las cosas con Shinji? ¿Ya le confesaste tus sentimientos?

Misato dio un respingo al escuchar ese último comentario de la científica y la observó con el rostro totalmente rojo. Por su parte, Ritsuko la observaba con una sonrisa burlesca.

— ¡No se puede hablar nada serio contigo! — replicó una enfadada Misato, y dejó el cuarto dando grandes zancadas.

Atrás, Ritsuko amplió su sonrisa al comprobar que las suposiciones sacadas de la última conversación sobre Shinji que tuvo con la morena, no andaban para nada erradas. Shinji Ikari en verdad le movió el piso a Misato. "Las cosas se pondrán muy entretenidas por aquí. Ese triángulo amoroso será algo digno de ver" pensó la científica, divertida por la situación amorosa en la que se había envuelto su amiga. Una situación que debía ser considerada como extraña, de no ser porque últimamente todo en NERV se había vuelto extraño.

 

________________________________________________________________________________

 

— ¿Qué estás haciendo? — preguntó una curiosa Asuka a un concentrado Shinji, que estaba trabajando en su Laptop, sentado ante una mesa junto a la piscina de NERV.

— Estudio ciencias — respondió el aludido con algo de fastidio, sin despegar la vista del Laptop.

— Eres un niño tan obediente — comentó la pelirroja con burla.

— No me queda de otra. Ya escuchaste a Misato, y… ¡Oh! — exclamó el Tercer Elegido, cuando finalmente despegó la vista del Laptop y se encontró repentinamente frente a él a la pelirroja en traje de baño. Le fue imposible no dar un rápido vistazo al perfecto cuerpo de la chica, y lo que vio fue más que satisfactorio. Asuka Langley era en verdad una chica muy hermosa.

— Ya que no puedo ir a bucear a Okinawa, bucearé aquí — declaró Asuka con una sonrisa de orgullo y satisfacción, al constatar la mirada de admiración que le había dado Shinji.

— Ya… ya veo — respondió el vástago de Gendo, sin poder apartar la vista del perfecto cuerpo de la pelirroja, pero disimulando lo mejor que podía.

— Hmm, déjame ver. ¿Qué estás tratando de hacer? ¿No puedes resolver una ecuación tan fácil? Está bien, esta es la respuesta. Es muy simple — dijo la pelirroja, inclinándose para ingresar la respuesta en el Laptop, dándole de paso una muy buena vista de su escote a Shinji, que la verdad ya estaba comenzando a disfrutar el espectáculo, mientras una parte de su cuerpo comenzaba a cobrar vida propia.

— ¿Cómo puedes resolver esto cuando fracasaste en el examen de la escuela? — preguntó sorprendido el joven Ikari, apartando un momento su mente de los pechos de la pelirroja, al ver resuelto el ejercicio que lo mantuvo ocupado los últimos 10 minutos.

— No pude entender lo que estaba escrito en el examen.

— ¿Estás diciendo que no fuiste capaz de leer las preguntas en japonés? — preguntó Shinji, sorprendido.

— No domino bien los Kanjis. Después de todo, nunca necesité estudiarlos en la Universidad.

— Espera un momento. ¿Dijiste Universidad? — preguntó el joven, impactado.

— Así es, me gradué el año pasado — respondió la pelirroja con orgullo — ¿Qué está escrito aquí?

— ¿Esto? Es un problema respecto a la Expansión Térmica.

— ¿Expansión Térmica? ¡Qué infantil! Resumiendo, las cosas se expanden cuando se calientan y se contraen cuando se enfrían — Expuso Asuka, con las manos en las caderas, como si fuera un profesor dictando la lección del día.

— Lo sé, pero…

— Para que lo entiendas mejor, te daré un ejemplo. ¿Crees que mis pechos puedan hacerse más grandes si los caliento? — preguntó la chica en forma coqueta, cubriéndose los pechos con las manos.

Shinji observó a la chica unos momentos, primero disfrutando de la sensual pose que estaba haciendo y luego considerando qué responderle. Hace un par de meses atrás se habría avergonzado de la sola idea de responder, pero no ahora. Ahora tenía vasta experiencia en esa área, de primera mano y nada menos que con una mujer adulta. Él ahora sabía muy bien que pasaba con los pechos de una mujer cuando esta se excitaba.

— Bien, tanto como crecer no, pero te dará mucho placer al tocarlos y tus pezones se pondrán erectos y muy sensibles — respondió Shinji como si fuera un experto en el tema; de hecho, lo era.

La cara de Asuka se volvió tan roja como su cabello ante esa explicita respuesta de su compañero de equipo; respuesta que además era bastante subida de tono. Por acto reflejo la pelirroja se cubrió el pecho con las manos en forma protectora.

— ¡Eres un cochino pervertido! — respondió finalmente la chica, ante la respuesta de Shinji.

— Oye, tú preguntaste — respondió el Tercer Elegido en forma inocente, encogiéndose de hombros.

— Permiso — dijo Rei repentinamente, pasando junto a Asuka mientras secaba su cabello con una toalla, luego de salir de la piscina donde había estado nadando hace ya varios minutos.

Shinji fue nuevamente presa de un ataque sensorial al ver a Rei Ayanami en traje de baño. La chica era realmente hermosa, de piel clara y a simple vista, suave como la seda; tanto, que sintió un repentino deseo de acariciar sus largas y lindas piernas. Shinji tragó sonoramente y desvió la vista tratando de apartar esas afiebradas ideas de su cabeza, junto con ignorar la fuerte erección que lo aquejaba.

Asuka miró con molestia a la chica peliazul cuando pasó por su lado, pero esto no fue suficiente para que dejara de lado su sorpresa ante la respuesta y actitud de Shinji. La respuesta fue como si él hubiera aprendido eso de forma práctica, y su actitud fue de cierto orgullo. ¿Acaso el idiota de Shinji había tenido alguna experiencia con una chica? No, no era posible, ninguna caería tan bajo… ¿verdad?

— Mejor me voy a nadar. Si me quedo aquí se me pegará tú estupidez — dijo finalmente la pelirroja, dando media vuelta para ir por su equipo de buceo, dándole sin querer a Shinji una muy buena vista de su trasero, que dicho sea de paso, tampoco estaba nada mal.

— Me retiro. Debo ir a estudiar — señaló Rei, tomando un bolso con sus cosas que estaba cerca de Shinji, para luego encaminarse a la salida.

— Sí, sí, váyanse y déjenme solo. Ya estoy acostumbrado — dijo Shinji para sí, volviendo de mala gana a sus estudios, sin muchos progresos hay que decir — Asuka. ¿Me podrías explicar este otro ejercicio?

Desde la puerta que daba a los vestidores, Rei miró fijamente a Shinji por largos segundos y como trataba infructuosamente de que Asuka le explicara otro ejercicio. Por un momento se pudo apreciar un gestó en la cara de Rei, una intensa mirada, que se fue tan fugazmente como había aparecido. Luego de eso, la chica de ojos escarlata ingresó a los vestidores con su rostro habitual.

 

_______________________________________________________________________________

 

Balalaika le dedicó una seria mirada al Sargento Boris, luego de que este dejara unas gruesas carpetas llenas de papeles sobre el escritorio de la rubia.

— ¿Estos son los informes que se supone debo revisar hoy? — preguntó la rubia, tomando con desgano una de las gruesas carpetas, para abrirlas y revisar de mala gana su contenido.

— Sí, Capitán. Esos son — respondió con seriedad el hombre, de pie en posición firme frente al escritorio de la mujer.

— Esto es lo único malo de este trabajo, Sargento. La cantidad de papeleo que hay que revisar. Ya imagino la montaña de papeles que habrá que llenar luego del ataque de un Ángel — comentó Balalaika dándole una calada a su habano.

— Eso es algo que confirmaremos uno de estos días — comentó el hombre.

— En eso tiene razón, Sargento. Más temprano que tarde tendremos que enfrentarnos contra uno de esos engendros. Pero por ahora… — dijo la rubia dejando la frase a medio concluir, para tomar un montón de papeles y comenzar a revisarlos de mala gana.

Percatándose de que la conversación había llegado a su fin, Boris dio media vuelta y se disponía a salir de la oficina de la rubia, momento en que esta habló, haciendo que el fornido hombre se detuviera en seco frente a la puerta.

— Me he enterado que actualmente está en muy buenos términos con la doctora Ritsuko Akagi, Sargento.

Boris se congeló ante estas palabras y se volteó para ver a su Capitán, la cual le estaban dando una mirada penetrante. ¿Cómo se había enterado ella de eso? ¿Lo estaba vigilando? Luego de pensarlo un momento desechó esa posibilidad. La verdad es que había sido un tanto evidente sobre su interés por Ritsuko, así que es probable que la propia Balalaika lo hubiera deducido.

— Capitán, sobre eso…

— Tranquilo Sargento. Usted es hombre, así que es normal que quiera tener compañía en su cama de vez en cuando. Es su elección de compañía la que me tiene un tanto sorprendida — comentó la rubia, dándole una calada a su habano — Aun así, pienso que su elección de compañía fue una gran elección, Sargento. Ritsuko Akagi no solo es una mujer muy atractiva, también puede ser una buena fuente de información, si usted sabe cómo hacerla hablar — finalizó la rubia con una sonrisa juguetona, dejando bastante claro el método que debía usar para hacer hablar a la científica.

— Capitán, yo no estoy con ella por… quiero decir…

Boris se encasquilló, no sabiendo cómo responder a esas palabras de su Capitán. No podía ir decirle de buenas a primeras que estaba con Ritsuko porque la ama. Conociendo a Balalaika, ella sería capaz de meterle un tiro entre los ojos por solo mencionar la palabra "amor". Al levantar la vista y mirar a su Capitán, Boris sintió un escalofrío recorrerle la espalda. Balalaika estaba dándole una mirada estrecha mientras mordía su habano. "Se dio cuenta… lo sabe", pensó el hombre con temor.

Balalaika dio un suspiro de resignación mientras expulsaba una voluta de humo. La mujer se levantó pesadamente de su escritorio y caminó hacia un estante contiguo, abrió una puerta, tomó una botella de vodka y llenó 2 copas, tendiéndole una al Sargento. Boris se adelantó y tomó la copa que le tendía su Capitán.

— ¿Sabes lo que estás haciendo, Sargento? Gente como nosotros, que tiene los pies metidos en el fango y las manos manchadas con sangre, no puede permitirse este tipo de debilidades. Para gente como nosotros, cosas como el "amor", no son más que eso: debilidades. ¿Estás consciente de eso? ¿Estás consciente de que al estar con esa mujer, estás ofreciendo un punto débil a tus enemigos?

— Sí Capitán. Lo estoy — dijo Boris, con voz firme.

— Pero no la dejarás, ¿verdad?

— Si usted me lo ordena, lo haré Capitán — respondió el hombre, con voz firme.

Balalaika miró fijamente a su subordinado y supo que él hablaba en serio. Pudo ver algo de dolor en sus ojos ante la sola idea de dejar a esa mujer, pero también pudo ver que él cumpliría con esa orden si ella la solicitaba. Balalaika desvió la mirada y negó con la cabeza mientras sonreía.

— Hemos luchado juntos por muchos años, Sargento. Peleamos hombro con hombro en varias guerras, atravesando infiernos de balas y manchándonos las manos con sangre en el proceso. Durante todo este tiempo nunca he dudado de tus capacidades y de tu buen juicio, y nunca me has decepcionado.

— ¿Capitán? — preguntó Boris sin entender.

— Confío en tu buen juicio Sargento, y en que no dejarás que esto interfiera en tus obligaciones. Y lo más importante, que no olvides a quien le debes lealtad — dijo la rubia con una mirada acerada.

— Jamás lo ponga en duda, Capitán. Usted sabe que mi lealtad es absoluta — respondió Boris con firmeza, leyendo la amenaza velada tras las palabras de Balalaika, que le dejaron claro que a la menor señal de traición, tanto él como Ritsuko, pagarían con su vida.

— Nunca imaginé que llegaría el día en que te vería en este trance, Sargento — comentó la rubia, que había cambiado la mirada acerada por una mirada divertida y una sonrisa juguetona en los labios — Tal vez nos estamos volviendo viejos y eso nos hace ser más sentimentales.

— Es probable — comentó Boris un poco más tranquilo, al comprender que había pasado el peligro inmediato para él y Ritsuko.

Balalaika levantó su copa y Boris la imitó en un silencioso brindis, con el que habían dejado claro sus asuntos. Boris tenía la venia formal de Balalaika para su relación con Ritsuko, con la advertencia de por medio, de que sabía lo que pasaría a la menor señal de falta de lealtad. Aun así, esto en verdad era sorprendente. Un año atrás Balalaika no hubiera consentido algo semejante. Tal vez era cierto que se estaban volviendo viejos y sentimentales, o tal vez Balalaika tenía un motivo para permitir su relación con Ritsuko; motivo que no era tan difícil de entender. Como fuere, con el tiempo lo sabría.

 

________________________________________________________________________________

 

Shinji estaba en medio de la pasarela que estaba frente al EVA-01. Pese a que nunca le gustó montar en ese gigante púrpura, había algo en ese coloso que lo hacía especial. No podía explicarlo con palabras, pero de alguna forma, por extraño que parezca, estar ahí, junto al EVA, lograba calmarlo y relajarlo. Era precisamente eso lo que necesitaba en ese momento.

Luego de pasar toda la tarde estudiando, sumado a tener a Asuka como maestra en un diminuto traje de baño, había quedado bastante alterado; una vez que logró convencerla de que lo ayudara con los estudios. Por un lado la cabeza le daba vueltas y por otro, los recuerdos de Asuka en traje de baño dejaron bastante despierta cierta parte de su cuerpo, lo cual ya estaba siendo un tanto molesto, por lo que trataba de distraerse ejercitándose practicando artes marciales, lanzaba golpes de pies y puños a un contrincante imaginario.

Hacía ya tiempo que había comenzado a tomarle el gusto a las chicas; vivir con dos de ellas, que además eran devastadoramente hermosas, no le hacían las cosas precisamente fáciles. Esta situación lo había llevado a recurrir a la masturbación en forma más recurrente de lo que hubiera deseado, pero desde que comenzó a tener sexo con la Capitán Balalaika, es como si sus sentidos se hubieran incrementado. ¿Sería acaso porque ya sabía lo que había y sabia; además, que tan bueno era? Puede ser, o puede ser simplemente que con 14 años, la testosterona le brotaba hasta por los poros.

"Eso debe ser. Exceso de testosterona" razón Shinji, dando la vuelta para darle una patada giratoria a su imaginario oponente. Luego de eso, se fue con una combinación de golpes de puños, un golpe de revés y una patada lateral. Mantuvo la postura con la pierna extendida a un lado por unos segundos y luego volvió a una posición firme. En ese momento, Shinji cayó en cuenta de que estaba jadeando por el esfuerzo. Al ver la hora en su reloj de pulsera constató que llevaba casi una hora ejercitándose, además, se estaba haciendo tarde y tenía algo de hambre.

— Hora de irse a casa — dijo para sí el chico y se encaminó a la salida, pero se detuvo para darle una mirada al gigante púrpura. Por un momento estuvo tentado a despedirse del EVA, pero luego negó con la cabeza mientras sonreía por esa ocurrencia.

 

________________________________________________________________________________

 

Ritsuko Akagi estaba de pie ante el escritorio de Gendo Ikari, que le daba una mirada penetrante tras sus enguantadas manos. La mujer había acudido a la oficina del Supremo Comandante de NERV para un reporte de rutina sobre los niveles de sincronización de los Pilotos EVA. Hasta ahí, todo normal, al menos, hasta que Gendo le hizo una solicitud que nada tenía que ver con el trabajo. Para Ritsuko este era el momento de la verdad, este era el momento de romper con aquel círculo vicioso de autodestrucción en el que había caído. El momento de liberarse y comenzar con su nueva vida.

— No voy a acudir a su casa esta noche, Comandante. Lo nuestro se acabó. Desde ahora nuestra relación será estrictamente profesional — declaró Ritsuko con firmeza.

Gendo miró fijamente a la mujer sin mover un solo músculo, permaneciendo en silencio por varios segundos. Ante la falta de respuesta del hombre, Ritsuko dio por finalizada la conversación, dio media vuelta y se dispuso a salir de la oficina.

— ¿Ese ruso de nombre Boris, tuvo que ver en esta decisión?

Ritsuko se volteó ante la mención del Sargento. No le extrañó que Gendo supiera sobre ella y Boris; después de todo, se habían estado viendo bastante seguido últimamente. Fue el tono en la voz de Gendo lo que la preocupó. Aun así, la mujer se mantuvo firme y le devolvió la mirada.

— ¿Si lo fuera, hay algún problema con eso? — preguntó la rubia, desafiante ante Gendo por primera vez en su vida.

— Ese hombre no es de fiar. Le prohíbo acercarse a él más allá de los asuntos estrictamente profesionales que sean de competencia mutua — señalo Gendo, ganándose una mirada molesta por parte de Ritsuko.

— Usted no es nadie para decirme qué hacer con mi vida privada, Comandante.

— Si eso interfiere con su trabajo en NERV, tengo todo el derecho de intervenir. Ese hombre no es de fiar. Debe alejarse de él, doctora. Es una orden.

Ritsuko apretó los dientes en frustración y sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas. ¿Es que este hombre no pensaba dejarla en paz? ¿Acaso pretendía tenerla siempre bajo su control, dispuesta a cumplir sus caprichos? La científica sintió que por un momento su resolución comenzaba a flaquear, sintió que no podría salir de ese círculo de autodestrucción. Ese hombre no se lo permitiría. Entonces recordó las palabras de Boris la otra noche y sintió como sus fuerzas regresaban.

"Si sientes que no tienes fuerzas... entonces te prestare la mía"

— Lo que haga con mi vida privada es asunto mío, Comandante. Usted no es mi dueño para decidir por mí. Si no le gusta esto, entonces renuncio. Usted mejor que nadie sabe que ofertas de trabajo no me faltan y mucho mejor remuneradas — sentenció la mujer, para luego dar media vuelta y salir de la oficina con el corazón acelerado por lo que acababa de decir, pero internamente feliz.

Atrás, Gendo Ikari estrechaba los ojos tras sus enguantadas manos. A partir de ese momento se le había creado un flanco que no podía darse el lujo de descuidar.

 

________________________________________________________________________________

 

Shinji salió del ascensor y comenzó a caminar por el corredor del edificio rumbo a su departamento, mientras pensaba qué haría de cenar que fuera contundente y no tan difícil de preparar, ya que no tenía muchas ganas de cocinar. Fue así como el chico caminó hasta encontrándose con una gran sorpresa sentada de espaldas a la puerta de su departamento.

— ¿Misato? — preguntó el sorprendido Piloto EVA al encontrarse con la mujer frente a él, sentada en el suelo rodeando las piernas con los brazos.

La mujer, que estaba con los ojos cerrados, levantó la cabeza al escuchar su nombre y le dedicó una radiante sonrisa al chico frente a ella, quedando en el olvido en forma inmediata la frustración que sintió al no encontrarlo en su departamento, y todo el tiempo que debió esperar sentada ante su puerta.

— Hola Shinji — saludó ella con una sincera sonrisa.

— Misato, ¿qué haces aquí a esta hora? — preguntó él, curioso.

— Bien, andaba cerca de aquí y decidí pasar a hacerte una visita. Espero no te moleste.

— No, por supuesto que no.

— Genial. Por cierto, traje la cena. Espero te guste la comida Tailandesa — agregó Misato, mientras que con una mano levantaba una bolsa blanca que descansaba junto a ella y en la que Shinji no había reparado hasta ese momento.

La alegría de la mujer por ver al chico que le movía el piso, se intensificó al ver aparecer una sonrisa en la boca de Shinji y como este le tendía la mano para ayudarla a ponerse de pie. Misato aceptó su mano y con ayuda del chico se puso de pie, para luego seguirlo dentro del departamento.

________________________________________________________________________________

 

La sala del departamento era iluminada únicamente por la luz que se colaba por el gran ventanal que daba al balcón. Dentro, en el sillón de 3 cuerpos, una feliz Misato contemplaba como Shinji dormía plácidamente con la cabeza apoyaba en su regazo, mientras le acariciaba el cabello a los compases del tema "In too Deep" de Phil Collins, que se reproducía por los parlantes del equipo de música. La mujer recordó con agrado como Shinji se sintió tan feliz de verla y que gracias a ella se había ahorrado el tener que cocinar, ya que había llegado bastante cansado de su día en NERV.

El estar a solas le dio a Misato la posibilidad de conversar con Shinji como hacía tiempo no hacía. Escuchó con interés como el chico hablaba de sus progresos en el entrenamiento con el Sargento Boris. El escuchar sobre el entrenamiento en verdad no era muy del agrado de Misato, pero para Shinji parecía ser muy importante; no por el hecho de aprender cosas militares, sino más bien porque parecía ser un logró para él, como si se estuviera demostrando a sí mismo que podía cambiar y superarse; y en verdad lo estaba logrando.

Desde que Shinji se puso bajo la tutela del Sargento Boris, había cambiado mucho. Se había vuelto más seguro de sí mismo, más interesante y más hombre. Su cuerpo también había cambiado mucho en este último tiempo. Ahora, Shinji distaba mucho de ser ese chico en extremo delgado que vio desnudo el día que llegó a su departamento. Ahora había ganado algo de peso y masa muscular, tanto que hasta sus músculos comenzaban a marcarse. No había dudas de que Shinji Ikari estaba transformándose poco a poco en todo un hombre, superándose y mejorándose a sí mismo, pero manteniendo eso tan especial que había logrado cautivarla. Shinji seguía siendo el mismo chico tierno y sincero que se escondía tras ese caparazón con el que se protegía del mundo.

Sonrió con ternura al acariciar la mejilla del chico. En verdad era una locura lo que su desbocado corazón sentía por el joven Piloto EVA, pero había llegado a un punto donde ella ya no podía volver atrás aunque así lo quisiera. Ya era tarde para el arrepentimiento, ahora solo quedaba ir hacia adelante, hasta donde sea que eso la llevara. Misato no pudo dejar de sentir algo de temor al pensar en su situación, en todas las cosas que podían salir mal, todo lo que podía sufrir con su extraño amor, pero sabía que valía la pena asumir el riesgo.

— Te amo, Shinji — susurró la mujer, acariciando la mejilla del chico, a la vez que una solitaria lágrima caía por una de sus mejillas.

Shinji nunca llegó a escuchar la confesión de la mujer, su sueño era demasiado profundo para eso, estaba tan cansado por su día en NERV, que nunca se dio cuenta cómo fue que se quedó dormido con la cabeza apoyada en el regazo de Misato. El joven piloto EVA dormía plácidamente recibiendo las caricias de la mujer, quien secretamente lloraba de felicidad por ese íntimo momento que tenía con el dormido joven, por el dolor de tenerlo tan cerca y tan lejos a la vez.

La noche siguió su curso en la sala de ese departamento, con la mujer acariciando tiernamente el cabello de la persona que amaba, hasta que el sueño la abrazó, haciendo que se quedara dormida en el sillón junto al Piloto EVA.

 

________________________________________________________________________________

 

Era entrada la noche y Benny cubría el turno de noche en el Centro de Mando de NERV. Esto no era algo que le gustara particularmente, ya que prefería estar durmiendo en su cama, pero debía reconocer que trabajar de noche tenía sus ventajas, como poder trabajar con un poco más de libertad con MAGI.

En los pocos días que había estado en NERV, se había interiorizado del funcionamiento de esta institución tan particular, junto con comenzar de lleno con el trabajo para el cual Balalaika lo había contratado. No era algo que a él le gustara particularmente, pero había accedido al encargo de Dutch, poniéndose al servicio de Balalaika únicamente por tener la oportunidad de trabajar en MAGI, y no se había decepcionado.

MAGI era la máquina más impresionante que había conocido y en la que había tenido la oportunidad de trabajar. Había intentado obtener información sobre MAGI en el pasado, pero se encontró con un muro impenetrable, formado por una poderosa serie de firewall y una tecnología que parecía estar más allá de lo imaginado, como si fuera sacada directamente de la ciencia ficción; apreciación que no estaba tan alejada de la realidad. Ahora que estaba en NERV, pudo finalmente comenzar a conocer la verdad sobre MAGI.

MAGI era una computadora similar a los humanos, no solo en el sentido de que recrea en una computadora los dilemas comúnmente inherentes al ser humano, también es similar en el sentido de que utiliza un Sistema-Operativo-de-transplante-de-personalidad que tiene el patrón de razonamiento lógico de los humanos trasplantado al computador; y no era cualquier patrón de razonamiento lógico, era el de propia Dra. Naoko Akagi, la creadora de MAGI. Es así como MELCHOR-1, BALTHASAR-2 y CASPER-3 tenían transplantado el patrón de razonamiento lógico de Naoko como una científico, madre y mujer respectivamente, encontrándose el último, su cerebro.

El conocer esta verdad solo logró aumentar el interés de Benny por MAGI, lo que a la vez hacía mucho más interesante su trabajo. No solo estaba lidiando con una sofisticada computadora, estaba lidiando técnicamente con una mujer, y eso… eso sí que era escabrosamente interesante. Una computadora que a la vez era una mujer. Su sueño hecho realidad.

Benny tecleó en la terminal revisando unos datos a los que había logrado acceder, usando las habilidades que le habían permitido hackear los ordenadores de la CIA unos años atrás, encontrando finalmente lo que estaba buscando.

— Bingo — dijo el hombre de barba crecida por su pequeño gran logro, para luego salir en un pestañeo de la aplicación que tenía reducida en una pequeña ventana, borrando todas sus huellas en el proceso, luego de lo cual se puso de pie, estirándose para relajar la tensión de su espalda y mirar luego las tres torres que conformaban el sistema MAGI, en la parte baja del Centro de Mando, con una sonrisa en los labios.

"Te tengo MAGI. Ya se cuál es la ruta que debo seguir para llegar a ti. Una vez logre recorrerla sin inconvenientes, podremos finalmente conocernos más apropiadamente" pensó el hombre de lentes, sin quitar la vista de las tres torres que conformaban el sistema MAGI.

— ¡Aquí llega el café! — anunció Nami con una linda sonrisa, sacando a Benny de sus pensamientos.

Nami era una linda mujer de 26 años, de larga cabellera castaña, ojos color miel y un imponente par de pechos, que cubría el turno de noche junto con él, que en ese momento se acercaba con una bandeja con dos humeantes tazas de café.

— Muchas gracias, Nami. Eres un encanto — dijo Benny con galantería, recibiendo el café que le ofrecía la mujer, que era demasiado evidente en su interés por él.

El hombre de lentes miró disimuladamente los pechos de Nami y el leve sonrojo de sus mejillas por su agradecimiento en forma tan galante. Ella quería con él, no había lugar a dudas, así que decidió cumplir con las expectativas de su colega; después de todo, él es todo un caballero y no podía decepcionar a una mujer tan linda como ella, ¿verdad?

Benny sonrió traviesamente, dándole un sorbo a su café.

 

_______________________________________________________________________________

 

— ¿Estas son las fotos del monte Asama? Esto no nos da una imagen clara — dijo Fuyutsuki, observando seriamente unas fotografías termales expuestas en un gran monitor que ocupaba todo el suelo de un cuarto, que se mantenía a oscuras para ver de mejor forma las imágenes.

— Efectivamente, pero esta mancha debe tener alguna importancia, si lo reportan directamente desde el Observatorio del Instituto de Investigación de Terremotos en Asama — respondió el Sargento Boris, observando la fotografía tan seriamente como el anciano.

— Realmente no podemos ignorarlo — razonó Fuyutsuki.

— ¿Qué supuso MAGI? — preguntó Ritsuko.

— 50/50 — respondió Maya, de pie junto a la rubia, revisando una tablilla de datos.

— ¿Hay alguien allá? — preguntó Fuyutsuki.

— La Capitán Balalaika ya ha llegado allá — respondió Misato, con algo de nerviosismo por lo que la rubia podía hacer si es que alguien cometía el error de hacerla enfadar.

 

________________________________________________________________________________

 

Balalaika observaba seriamente un monitor con los brazos cruzado bajo el pecho, mientras le daba una calada a un inseparable habano, para total fastidio de los presentes que debían soportar el penetrante aroma a tabaco.

— ¡Este es el límite! — dijo un investigador, mirando a la mujer.

— Continúe. 500 metros más — respondió la rubia, sin apartar la vistas del monitor.

— Profundidad 1.200. Armadura Anti-presión quebrada — informó un operador.

— ¡Capitán Balalaika! — llamó el investigador.

— Si se destruye lo pagaremos. 200 metros más — fue la cortante respuesta de Balalaika, que seguía con la vista fija en el monitor, sin siquiera pestañear.

— ¡Señal en el monitor! — informó Makoto Hyuga, sentado ante una terminal frente a la rubia.

— Inicien el análisis — demandó la rusa, dándole una calada a su habano.

— A la orden — respondió Hyuga.

La ex-mafiosa miraba seriamente el monitor expulsando volutas de humo por la boca, impaciente por la respuesta. En ese momento sonó una alarma y una voz femenina se escuchó por los altavoces, anunciando que la sonda se había comprimido e implotado producto de la presión. Balalaika esbozó una pequeña sonrisa al imaginar la cara que pondría el Comandante Ikari al ver la factura que le harían llegar por la destruida sonda.

— ¿Estado del análisis? — preguntó la rubia.

— Finalizó justo a tiempo — respondió Hyuga — ¡Patrón Azul!

— No hay duda. Es un Ángel — dijo Balalaika con una sonrisa de satisfacción.

Finalmente había llegado el momento que la rubia había estado esperando desde que llegó a NERV. Después de mucho tiempo pelearía una guerra otra vez, solo que de una forma muy distinta. Con eso en mente, la mujer se giró para observar a los presentes desenfundando su pistola Makarov. Entonces, habló con voz fuerte y decidida.

— Desde ahora, este laboratorio está completamente cerrado y bajo el control de NERV. Ninguna entrada a este cuarto será permitida y todos los eventos de las últimas seis horas serán mantenidos en secreto. Al que no esté de acuerdo con esto, le meteré una bala entre los ojos.

Ninguno de los presentes se atrevió a cuestionar la orden.

 

________________________________________________________________________________

 

— ¿Es segura la línea, Sargento? — preguntó Balalaika, hablando por un teléfono móvil desde el final de un solitario corredor del Instituto de Investigación de Terremotos.

— Sí Capitán, puede hablar con tranquilidad — respondió Boris, desde el Centro de Mando de NERV.

— Bien, solicita un A-17 del Comandante Ikari, de inmediato — ordenó la rubia.

— ¿Un A-17? — preguntó un sorprendido Boris.

— ¿No sabes lo que es un A-17, Sargento? ¿Acaso no estudiaste el libro de códigos de NERV? — preguntó Balalaika, levantando una ceja.

— Sé lo que significa, eso lo que… ¿realmente haremos esto, Capitán? — preguntó un preocupado Sargento Boris, antes las implicaciones de solicitar un A-17.

— Por supuesto — fue la decidida respuesta de la rubia, desde el otro lado de la línea.

 

________________________________________________________________________________

 

— ¿Un A-17? ¿Un ataque preventivo? — preguntó un sorprendido miembro del comité de SEELE, en una oscura habitación donde el grupo se había reunido, convocado por el urgente llamado del Comandante Supremo de NERV.

— Así es — respondió Gendo tras sus enguantadas manos, sentado en su clásica posición.

— ¡Es demasiado peligroso! ¿Acaso ha olvidado lo que ocurrió hace 15 años atrás? — preguntó otro miembro del comité, mirándolo con seriedad.

— ¡Esta es una oportunidad! — respondió Gendo — Hasta ahora no hemos hecho más que defendernos, ahora podemos ir a la ofensiva por primera vez.

— Es muy arriesgado — señalo Keel Lorentz, director del comité de SEELE.

— Pero usted sabe cuán importante es conseguir un ejemplar vivo de un Ángel — señaló Gendo.

— Bien, esto nos dará la oportunidad de ver en acción a su nueva Directora de Operaciones, junto con analizar el resultado del nuevo entrenamiento de los Pilotos EVA. Ahora sabremos si la Capitán Balalaika está realmente calificada para el puesto — señaló Keel Lorentz — Pero Ikari… fallar no será tolerado.

Con esas últimas palabras, el consejo de SEELE se retiró de la sala, dejando solos a Gendo y Fuyutsuki, que estaba de pie junto a su antiguo pupilo.

— ¿Fallar? Si fallamos, la humanidad dejará de existir — comentó Fuyutsuki, con las manos tomadas en la espalda — ¿Realmente estás seguro de esto?

Por respuesta, Gendo sonrió tras sus enguantas manos.

 

________________________________________________________________________________

 

— ¿Eso es un Ángel? — preguntó Shinji, observando la foto de lo que parecía ser un embrión dentro de un huevo, exhibida en un gran monitor que ocupaba todo el suelo de un oscuro cuarto, para así ver de mejor forma las imágenes.

— Así es — respondió Ritsuko — Es algo similar al estado de una crisálida antes de la adultez. La prioridad máxima para esta operación es atrapar al Ángel, capturarlo vivo y preservar su condición original tanto como nos sea posible.

— ¿Y si fallamos? — preguntó Asuka tomando la palabra como la líder del grupo, estudiando la foto del Ángel con seriedad con las manos en las caderas.

— Aniquílenlo tan rápido como puedan. ¿Está claro? — dijo la científica.

— Sí señor — respondieron automáticamente y por inercia los tres Pilotos EVA, acostumbrados a responder de forma marcial gracias al entrenamiento que recibieron.

Las tres mujeres presentes en ese cuarto, compartieron una mirada curiosa por la automática y marcial respuesta de los Pilotos EVA. Al verlos ahí, de pie observando la foto del Ángel era palpable el cambio de los tres chicos. Al enfrentarse ante lo que será su próxima misión, es como si hubieran activado un interruptor y hubieran pasado de ser simples chicos de 14 años, a ser "soldados listos para la guerra". Al verlos así, para las tres mujeres quedaba más que claro que el entrenamiento de Balalaika había logrado su objetivo.

— Por orden la Capitán Balalaika, la persona designada para esta misión es Asuka — dijo Misato, mirando fijamente a la pelirroja.

— ¡Genial! Finalmente podré demostrar el resultado mi entrenamiento abordo del EVA.

— Llevarás a cabo la misión en el EVA-02, usando un equipamiento especial. Shinji será tu respaldo — señaló Misato, mirando al chico con el que técnicamente había dormido la noche anterior. No pudo evitar recordar lo avergonzado que se sintió Shinji al despertar y encontrarse durmiendo con la cabeza recargada en su regazo. Era agradable saber que esa parte de él no había cambiado.

Shinji respondió marcialmente con un "Sí señor" a la orden de la mujer, sin poder evitar recordar su despertar en la piernas de Misato esa mañana. No pudo dejar de sentirse avergonzado, pero en cambio, contra todo lo que pudiera esperar, Misato parecía feliz. Este hecho no dejó de extrañarlo un poco, pero luego de unos segundos, apartó esos pensamientos de su mente y se obligó a enfocarse en la misión y en no defraudar a Asuka y la Capitán Balalaika, si llegara a tener que intervenir.

— ¿Qué haré yo? — preguntó Rei.

— El EVA-00 al ser un prototipo, no satisface los estándares requeridos por el equipamiento especial que se empleará en esta misión. Además, no tenemos el equipamiento necesario para acondicionar una tercera unidad — señaló Maya, mirando a la chica peliazul.

— Rei y el EVA-00 permanecerán alerta y a la espera en el cuartel general — informó Misato.

— Sí señor — respondió Rei, con seriedad.

— Lo siento niña modelo. Será para la próxima — dijo Asuka, mirando a la chica peluzul con su tradicional sonrisa triunfante, aunque en esta ocasión, estaba carente del veneno que llevaba hace unos meses atrás.

— Ya que el A-17 ha sido ordenado, nos retiraremos tan pronto como todo el operativo esté preparado. Estén listos para partir apenas sean requeridos — sentenció Misato, para regresar la atención de los pilotos a lo que era verdaderamente importante, y de paso, dando por terminada la conversación.

— Sí señor — respondieron en forma marcial, Shinji y Asuka.

Rei observó a sus compañeros de equipo unos momentos, especialmente a Shinji, para luego devolver la vista a la imagen del Ángel en forma de crisálida. Su rostro no decía nada, pero nuevamente por unos segundos, sus ojos expresaron algo más, pero una vez más, nadie se percató de ello.

 

________________________________________________________________________________

 

Luego de algunos problemas con Asuka, producto de su Plug-Suit resistente al calor, que la hacía parecer un pez globo, los pilotos fueron trasladados junto a sus EVA hacia donde tendría lugar la operación. Pasado el mal rato inicial, Asuka estaba expectante y deseosa por comenzar. Quería ver qué tanto había progresado. El ejercicio que debió realizar con Shinji y Rei dejó en claro que los tres se habían superado mucho, pero una cosa era un ejercicio contra soldados ordinarios y otra muy distinta era una batalla contra un Ángel, que siempre podía ofrecer comportamientos impredecibles.

Para Shinji fue una sorpresa que no le eligieran para llevar a cabo la misión. Antiguamente siempre lo elegían a él para todo, pero ahora las cosas eran distintas. Misato ya no estaba al mando. A la cabeza de las Operaciones Militares de NERV estaba la Capitán Balalaika. ¿Habría elegido a Asuka para no ponerlo en peligro a él? Definitivamente no, ella no era ese tipo de mujer. La Capitán Balalaika no dudaría en enviarlo a la muerte de ser necesario. Pero aun así, la apreciaba, e iría gustoso a enfrentar la muerte por ella. ¿Acaso estaba mal de la cabeza? ¿Acaso el sexo lo había vuelto un idiota? Puede ser, hasta cierto punto. Aun así, no dejaba de sentirse un poco preocupado por la pelirroja.

 

________________________________________________________________________________

 

Luego de realizar todos los preparativos, las dos Evangelion se encontraban listas para la misión. El EVA-01 de pie a un lado de una enorme grúa, y colgada de la gran grúa el EVA-02 en su traje especial Tipo-D, resistente al calor, presión y radiación. El EVA color rojo parecía un buzo en un traje de profundidad, lo cual no era una comparación tan alejada. En ese momento unos aviones pasaron volando a gran altura por sobre donde estaban preparando la operación.

— ¿Qué es eso? — preguntó Shinji, por el comunicador, captando el paso de los aviones.

— La Fuerza Aérea de la ONU estará pendientes de nosotros hasta el final de la operación — respondió Ritsuko bajo un toldo, revisando unos instrumentos junto con Maya.

— ¿Nos ayudarán? — preguntó Asuka, curiosa.

— No. Se encargarán de limpiar el lugar — respondió Ritsuko, sin dejar su trabajo.

— Si fallamos — agregó Maya, con algo de aprensión.

— ¿Qué quieren decir con eso? — preguntó de vuelta Asuka, arrugando el entrecejo.

— Destruirán al Ángel con una mina N2, junto con todos nosotros — fue la respuesta de la científica.

— Que considerados de su parte — comentó Asuka con sarcasmo.

— ¿Quién ordenaría tal cosa? — preguntó Shinji, sorprendido.

— El Comandante Ikari — fue la cortante respuesta de Ritsuko, al mencionar a su ahora ex-amante.

— Bastardo — dijo el joven entre dientes, pero lo suficiente fuerte como para ser oído por el sistema de comunicación del EVA.

Las personas que alcanzaron a escuchar la despectiva declaración del joven Piloto EVA para su padre, se sorprendieron por el veneno que llevaba esa sola palabra. Mientras, en un camión ocupado como Centro de Mando Móvil, una mujer con una gran cicatriz en su rostro, sonrió complacida al escuchar esa palabra de boca del chico.

 

________________________________________________________________________________

 

Un carro con un lente se desplazó por el brazo de la gigantesca grúa hasta quedar sobre la abertura por la que se podía apreciar un río de lava. Un rayo salió disparado hacia la lava perdiéndose en sus entrañas, luego de lo cual, el carro se regresó hasta su punto de inicio.

— Operación láser completada — dijo Benny con profesionalismo, acostumbrado ya a lidiar con situaciones tensas, gracias a sus años trabajando en la Compañía Lagoon.

— Trayecto asegurado — informó Huyga a Balalaika, que estaba de pie tras él, con los brazos cruzados bajo el pecho, un inseparable habano en los labios y su sobretodo del Ejército Ruso sobre los hombros.

— Equipamiento Tipo-D chequeado — informó Maya, mientras por los monitores se podía ver como el EVA-02 era desplazado por el brazo de la grúa hasta dejarlo sobre el río de lava que corría bajo él.

— EVA-02 está en posición — informó Hyuga.

Por unos segundos no hubo respuesta, por lo que Ritsuko y Boris, que estaban de pie junto a la rubia en el Centro de Mando Móvil, la observaron esperando una respuesta. Balalaika estaba firme como una estatua pendiente de los monitores. Ritsuko estaba por decir algo, pero Boris levantó una mano para indicarle que se detuviera. Él conocía mejor que nadie a su Capitán y sabía que en este momento no era prudente molestarla. En eso, la rubia lanzó su habano al suelo y lo apagó con la punta de uno de sus zapatos. Al levantar la vista, la fijó en un monitor por el cual podía ver la cara de Asuka.

— Pelirroja. ¿Estás lista? — preguntó.

— ¡Sí señor! — respondió Asuka, aún sin poder pasar a su oficial superior.

En el Centro de Mando Móvil, Balalaika esbozó una sonrisa ante la firme respuesta de la chica.

— Eso es lo que esperaba oír — dijo la rubia — Bien pelirroja, demuéstrame de lo que eras capaz. ¡¡Que comience la operación!!

 

Continuará…

_______________________________________________________________________________

Notas del Autor: Finalmente viene la primera batalla con Balalaika al mando. Como ya se habrán dado cuenta, ha habido cambios con respecto al capítulo 10 de la serie, que es al que corresponde esta parte de la trama, lo cual era inevitable, ya que las cosas se están encaminando hacia un nuevo escenario totalmente distinto.

En este capítulo me di el tiempo de analizar un poco los sentimientos de los personajes, que se está alejando progresivamente del canon original de la serie, como Rei, un personaje que de seguro los sorprenderá en lo que viene ahora en adelante.

Saludos y nos leemos.