¡Me Convertí En El Jefe Final Dentro Del Juego De Fantasía!—
Prólogo 2: "Mundo de realidad virtual"
Hace años, el mundo comenzó a cambiar drásticamente en todos los ámbitos imaginables. Los avances en tecnología habían evolucionado como nunca antes en la historia. El mundo entero se vería inmerso en las nuevas tecnologías.
Desde el momento en que apareció la realidad virtual (VR), se sabía que había venido para quedarse y no desaparecer como otros productos similares. La realidad virtual nació como una forma de entretenimiento para un público adolescente y joven.
Al principio, se trataba simplemente de ponerse unas gafas y ver los juegos desde una perspectiva diferente. No estabas dentro del juego, pero tampoco estabas completamente fuera de él. Era un punto intermedio entre la realidad y la virtualidad, un avance con respecto a las consolas y las computadoras personales.
Antes, los juegos se veían en una pantalla que estaba a cierta distancia de tus ojos, pero con la llegada de la realidad virtual, el entretenimiento estaba mucho más cerca de tus ojos, lo que atraía a los jugadores mucho más que los monitores o televisores. Incluso ver películas y series se volvía más divertido, como si estuvieras más cerca del mundo de tu serie favorita.
Todos deseaban estar cerca de sus personajes preferidos, explorar mundos fantásticos y disfrutar de conversaciones físicas con amigos, a pesar de estar a miles de kilómetros de distancia. La realidad virtual avanzó en el mundo y ganó millones de seguidores.
Sin embargo, no todos estaban interesados en este producto, a pesar de haber sido aceptado por el mundo de manera inconsciente y destinado a evolucionar. A pesar de todo, seguía sin ser la realidad virtual que todos los jugadores deseaban. Aunque te acercaba al mundo que deseabas, seguía siendo una falsa virtualidad.
Por esta razón, el VR en el mundo de los juegos pasó a ser algo secundario e incluso terciario. Los creadores se dieron cuenta de que era imposible convertir la realidad en otro mundo a través de sus dispositivos y decidieron enfocarse en otros campos.
Con esta arriesgada decisión, la realidad virtual se centró en otros sectores y evolucionó con el tiempo. En la actualidad, un gran número de trabajadores de oficina se conecta a diario a oficinas virtuales. Desde allí, pueden gestionar, supervisar, participar en reuniones, controlar máquinas y realizar trabajos utilizando robots desde una silla. Muy sencillo, ¿verdad?
Los asuntos financieros se gestionan a través de bancos virtuales y monedas digitales. Para la comida, existen tiendas virtuales que reproducen negocios tal como son en el mundo real, y gracias a la tecnología, es posible sentir los productos como si los estuvieras tocando. Estas tiendas cuentan con almacenes que tienen una amplia variedad de alimentos bien conservados, y cuando realizas una compra, los productos son entregados por drones a través de canales subterráneos, evitando problemas de tráfico y contribuyendo a la reducción de la contaminación.
Los deportes pueden verse desde dentro de la cancha, incluso si no estás físicamente en el estadio. Incluso puedes ver los partidos desde lugares públicos o crear salas privadas para verlos junto a tu familia y amigos.
Si te sientes mal, puedes visitar a un médico virtual, quien puede recetarte los medicamentos necesarios para mejorar tu salud y, mediante el escaneo de la realidad virtual, diagnosticarte desde tu propia casa. Por supuesto, en caso de una afección grave, todavía se requeriría una visita a un hospital físico, pero incluso entonces serías atendido por máquinas controladas por un médico que utiliza la realidad virtual.
En el ámbito espacial, la realidad virtual también ha contribuido significativamente. Los humanos pueden explorar y estudiar los planetas sin la necesidad de enviar personas en misiones peligrosas. Utilizan la realidad virtual para analizar y determinar si un entorno es seguro o no. Esto permite que, cuando llegue el momento de enviar a los humanos, todo esté preparado y seguro. Lo mismo ocurre con las exploraciones subterráneas y acuáticas.
El gran avance de la realidad virtual en todos los ámbitos ha llevado a un desarrollo cada vez mejor. Ha llegado el momento en que los jugadores pueden disfrutar de un juego en su máxima expresión. La realidad virtual ya no es una falsa virtualidad, el cerebro se adentra por completo en mundos inimaginables de videojuegos.
XXX
Capitulo 2: Lucianauciana"
En una inmensa habitación de entrenamiento se encontraban varios individuos, y en medio, en la zona de duelos, yacían tres personas: dos con espadas metálicas y cubiertos por armaduras de protección de esgrima, y el tercero estaba en medio haciendo de árbitro. Este último no parecía una persona común, y mucho menos un árbitro. Llevaba un uniforme completamente negro y formal, junto con guantes blancos. A simple vista, se podía apreciar que era alguien de más de cincuenta años, pero, a pesar de su aparente edad, su físico decía lo contrario. No cabía duda de que era de gran edad, pero su apariencia le daba un aspecto más joven en comparación con su rostro, ya que tenía hombros anchos, una postura perfecta, músculos y un aura imponente.
Por otro lado, en los costados había dos personas listas para cruzar espadas. Era imposible ver sus rostros debido a la protección que llevaban. Sin embargo, a simple vista se podía apreciar un detalle físico que los diferenciaba. Este aspecto era la altura; el individuo de la derecha sobrepasaba al de la izquierda por una cabeza entera. Además, ambos tenían cascos de protección de diferentes colores; el de la derecha era negro y el de la izquierda blanco. Sus armaduras protectoras coincidían con el color de sus respectivos cascos.
"¡COMIENCEN!", gritó el anciano de forma imponente. No cabía duda de que este anciano o señor hacía de árbitro en este encuentro.
El individuo de blanco se dirigió corriendo a gran velocidad contra el de negro. Mostraba movimientos rápidos y precisos, su velocidad era impresionante y aterradora. No cualquiera podría seguir sus movimientos. Era tan rápido que parecía estar en un lugar y al siguiente instante, ya estaba frente a su oponente.
Sin embargo, el individuo alto vestido de negro se mantuvo impasible, apenas reaccionaba. Parecía no tener intención de responder al ataque, como si ya hubiera renunciado ante la velocidad del otro individuo. En una batalla, pueden ocurrir muchas cosas, así que nunca se debe dar nada por sentado.
El individuo de blanco extendió su brazo junto con su espada y no dudó en apuntar directamente a la máscara protectora del de negro. Pero, para su desgracia, se encontró con algo inesperado cuando decidió ignorar lo que estaba ocurriendo a su alrededor y enfocarse en su oponente.
El individuo alto, vestido de negro, esquivó rápidamente al atacante, dio un paso hacia un lado y, al ver que solo pretendía golpear su rostro, aprovechó la distracción para cruzar su pie y provocar la caída inminente de su oponente blanco.
La velocidad del individuo blanco era completamente sobrehumana, pero la fuerza utilizada por el de negro para derribarlo también lo era. Para una persona promedio, habría sido extraño realizar una acción como esa.
El choque entre la velocidad y la fuerza fue tan intenso que el individuo blanco se elevó un metro por encima del suelo. El de negro aprovechó el momento y, a través de la máscara, el individuo blanco escuchó una pequeña risita burlona que lo molestó y preocupó, aunque en ese momento estaba cayendo al suelo.
El de negro levantó sorprendentemente su pierna y la colocó a la misma altura a la que el de blanco estaba cayendo. Respiró profundamente en ese instante y lanzó una patada hacia el estómago del individuo blanco. Este salió disparado dos o tres metros hacia adelante, y la patada fue directa a su abdomen.
En resumen, eso debió de haber sido extremadamente doloroso.
"La victoria de este encuentro es para Luciana", gritó nuevamente el anciano mientras realizaba un movimiento de brazos y manos para señalar al ganador.
Luciana, la vestida de negro, se quitó la careta de esgrima, dejando al descubierto su hermoso y delicado rostro, con ojos completamente rojos, pestañas largas y una expresión fría, como la de uno de esos antiguos robots sin emociones.
Puede sonar sorprendente, pero a diferencia de ahora, los robots antiguos no tenían emociones ni personalidades propias. En la actualidad, es normal tener máquinas como parte de la familia o incluso hacer amistad con ellas.
La hermosa mujer tenía rasgos bien definidos y maduros. Una vez que se quitó la máscara, su hermoso cabello largo y oscuro revoloteó con elegancia.
Con esas expresiones, era difícil saber si estaba feliz o agotada tras el enfrentamiento de hace segundos. Sin embargo, debido a la duración del combate, sería fácil concluir que no le costó trabajo derrotar al individuo blanco. La verdad es que a Luciana le resultó muy sencillo vencerlo.
"¡Felicidades por la victoria, hija mía!", expresó el anciano, que compartía con Luciana los mismos rasgos físicos. Claro, tenían muchas similitudes, pero la diferencia era evidente a simple vista: ella no tenía los mismos músculos que su padre; de hecho, tenía un cuerpo extremadamente delgado, e incluso se podían ver algunos de sus huesos.
"No fue nada, padre. Solo quisiera que mi tonto hermano dejara de pedir duelos innecesarios", respondió Luciana.
"Me gustaría que al menos tuviera un poco de dignidad como hombre."
Aquellas palabras frías y ese rostro de asco eran pronunciados por Luciana. Aunque la verdad es que estaba exhausta, no físicamente, ya que el duelo no le supuso un gran esfuerzo, sino mentalmente. Mientras expresaba eso, su hermano menor yacía en el suelo con los puños apretados y dolores en todo su cuerpo. Irradiaba puro odio después de perder una vez más contra su hermana mayor. Esta era la derrota número quince y él seguía intentando ganarle.
Sin duda, su hermano era fuerte, pero no lo suficiente como para hacer arrodillarse a su "querida" hermana. Entre el enojo y las lágrimas, se levantó del suelo y avanzó hacia ella después de arrojar con fuerza su careta de esgrima en cualquier dirección. Mientras lo hacía, una de sus manos la mantenía presionada contra su abdomen, clara señal de que sentía el impacto de su hermana.
"¡Maldita muñeca de mierda!", "¡Te odio!, ¡Te odio!, ¡Te odio!, ¡Te odio!", "¡Yo me convertiré en el único que herede toda la familia!", gritaba su hermano menor, con tres años de diferencia. La forma en que lo expresaba dejaba claro el "inmenso amor" que sentía por su hermana. Su odio era desgarrador, y su rostro al decirlo resultaba aterrador.
A pesar del odio y de todo, no cabía duda de que eran hermanos, pues compartían los mismos rasgos físicos en el cabello y los ojos. Posteriormente, un grupo de chicos con características físicas similares se acercó al lugar del duelo. Los quince chicos y chicas que se acercaron eran hermanos de los dos que habían luchado, pero todos ellos se reunieron para ayudar al hermano que acababa de perder, no a Luciana, quien simplemente observaba desde donde estaba cómo sus hermanos menores acudían en ayuda del derrotado.
A Luciana no le importaba lo que su hermano perdedor le decía, y mantenía su rostro frío y sin emociones, algo que molestaba profundamente a su hermano. En ningún momento reaccionó ante sus provocaciones, o al menos eso parecía.
"Por lo visto, ya terminé con la basura, ahora es momento de que me vaya", dijo al mirar a su padre e ignorar las provocaciones de su hermano. El padre asintió con un simple movimiento de cabeza y se dirigió a salir de la sala de entrenamiento.
Luciana no podía evitar sentirse molesta por la situación. Siempre tenía problemas con su hermano y su familia en general. Los escasos momentos de tranquilidad que solía disfrutar eran interrumpidos por asuntos innecesarios como este.
Su hermano menor deseaba con fervor tomar el liderazgo de la familia, pero al no ser el primogénito, le resultaba imposible. Luciana era la primogénita y, por lo tanto, la única heredera de toda la fortuna familiar. La primogénita anhelaba el día en que toda su familia estuviera bajo su control, lo que le permitiría vivir en paz, evitar negocios sucios innecesarios, y finalmente disfrutar de su vida.
En esta familia, la única forma de arrebatarle el puesto de heredera a la primogénita era desafiándola a un duelo de espadas y ganándoselo. Por eso, su hermano estaba tan obsesionado con vencer a su hermana.
Además, la familia de Luciana no era una familia común. Con la gran cantidad de hijos que tenían, era evidente que eran parte de la nobleza del nuevo Imperio Sudamericano, responsables de producir y suministrar armamentos para el imperio y otras naciones por medios ocultos.
En pocas palabras, eran una de las familias nobles más poderosas del imperio, y el hermano menor de Luciana ansiaba arrebatarle el puesto a su "preciada" hermana.
Lukas, el hermano menor de la primogénita, no se conformó con haber perdido nuevamente contra su hermana. Estaba frustrado, y a pesar de los intentos de consuelo por parte de sus hermanos menores, no pudo contenerse. Su cerebro estaba lleno de ira y vergüenza, y no procesaba la información que le llegaba.
Agarró su espada y corrió a gran velocidad para apuñalar a su hermana desprevenida mientras ella abandonaba la habitación.
-CONTINUARA-