Chapter 7 - Capitulo 7

¡Me Convertí En El Jefe Final Dentro Del Juego De Fantasía!—

Capitulo 7: "Todo se oscureció"

Abyss se quedó totalmente perpleja por ese estúpido fallo. Sabía que este mundo era muy realista, pero no pensó que tanto. Aunque era un poco contradictorio, imaginaba que con su habilidad de espada y un buen palo podría hacer algo; sin embargo, literalmente no pudo hacer nada.

Para colmo, el golpe fue directo al pecho del lobo y el pectoral de estas tres bestias era duro, ancho y fuerte. Con solo verlo, Abyss creyó que ni con una bala sería posible atravesarlo. Al darse cuenta, se sintió más tonta por pensar que con un palo sería suficiente.

El lobo y Abyss se miraron durante un segundo; ambos no entendían bien lo que había sucedido. Sin embargo, el lobo reaccionó más rápido y quiso atacar con su inmensa mano. Un golpe de ese lobo le habría volado la cabeza, ya que su mano era mucho más ancha que su testa.

Viendo las intenciones del lobo, Abyss dio un pequeño salto hacia atrás, y las tres bestias la miraron como un depredador lo haría con su presa. Se preguntó si esta vez tenía más opciones sobre qué hacer, pero no había tiempo para pensar; algo debía hacer rápidamente.

"Sé que dije que huir no era opción, pero… este sí es el momento perfecto para replantearme lo que dije hace unos minutos. No soy perfecta, todos podemos fallar en algún momento."

Con estas palabras dichas, Abyss corrió como si no hubiera un mañana. La idea principal era largarse del lugar y alejarse de esas bestias. Dada su condición física, estaba claro que esas bestias no eran capaces de correr tanto. Si el juego era tan realista como lo había presenciado, los lobos jamás podrían correr tanto como ella.

"Ya me estoy cansando ja…ja…"Dijo mientras corría y reía levemente por el miedo que tenía. Abyss ya no daba más del cansancio. Estaba sudada, su respiración era entrecortada y estaba llena de tos por el sobreesfuerzo físico. Jamás había sufrido algo así; nunca le hubiera costado correr algunos metros en el mundo real.

"Después de todo, el mundo virtual es bastante real."

Expresaba agotada y a duras penas con una voz muerta. Ya no corría, solo caminaba a pasos rápidos y se mantenía de pie gracias a que se agarraba de los árboles en los alrededores.

Cuando pensó que todo había terminado, desde atrás y un tanto lejos oyó el aullido de los lobos. Escucharlos le dio dolor de cabeza y maldijo el encuentro con ellos. Entre pequeños trotes, siguió avanzando hasta que llegó a un lugar sin salida.

En frente, había un acantilado tan alto como un edificio. Abyss miró hacia abajo y tragó saliva al ver lo lejano que parecían todos esos árboles. A pesar de todo, el bosque continuaba por debajo del acantilado, y desde donde estaba era imposible verle fin al mar de arboles.

"Nunca me voy a cansar de decirlo, ¡Este juego es hermoso!"

El sol se estaba yendo, era un precioso atardecer. Hasta hace unos segundos, estaba intentando sobrevivir, pero ahora se sentía un tanto alejada y esto le permitía ver el precioso paisaje que estaba sucediendo.

No obstante, no todo era sonrisas. De repente, empezó a sentir leves dolores en toda su piel. Se preguntó seriamente a qué se debía eso, hasta que recordó una de sus características innatas que la hacía totalmente imposible recibir algunos rayos solares. Rápidamente se escondió entre los árboles y miró el atardecer.

"Qué bueno que esos lobos ya no me siguen. No me hubiera gustado lanzarme de acá para volar y caerme debido a mi poco físico."

Disfrutaba como nunca lo que estaba viendo. Todo parecía ir bien, pero en el instante que pensó eso, un fuerte ruido se escuchó por todos lados, algo apocalíptico.

Abyss se levantó y miró hacia todos lados para ver de dónde provenía aquel sonido, aunque venía de todos lados. El ruido se hizo tan potente que Abyss quedó totalmente aturdida. Cayó al suelo adolorida y empezó a gritar por el inmenso sufrimiento que estaba pasando. Al mismo tiempo, su visión se nublaba.

Estaba sintiéndose muy mal. Por dentro, no dejaba de preguntarse qué estaba ocurriendo.

"¿¡Fallos en el juego!?", gritaba mirando hacia abajo mientras intentaba taparse los oídos para no escuchar más el ruido. Sin importar lo que hiciera, el ruido seguía siendo una completa pesadilla de dolor. Fueron algunos segundos hasta que el ruido desapareció por completo.

Cuando desapareció, Abyss se levantó y miró hacia el frente. Se encontró con un cielo totalmente distinto. El cielo estaba en su precioso atardecer antes del grotesco ruido apocalíptico, pero ahora el cielo parecía bañado en sangre. Además, en medio del mismo, había una cruz oscura desde la cual parecía verse un espacio distinto. Desde dentro de esa abertura en el cielo se podían observar estrellas y un cielo oscuro. Era la única parte del cielo en la que se podía observar eso, ya que todo el cielo se había vuelto en un rojo sangre.

"¿¡Acaso esto no será un evento de inicio del juego!?"

Todo estaba siendo muy extraño. En las redes sociales no se había avisado de tales sucesos con anterioridad. Se supone que cosas de esta magnitud se decían antes de tiempo, pero si se trataba de una sorpresa, capaz que no habían decidido dar el aviso. Igualmente, el hecho seguía siendo muy raro para Abyss.

Intentó abrir el chat general para ver si alguien más estaba viendo lo mismo que ella, y cuando intentó hacerlo, se encontró que al abrirlo, en el segundo, el chat completo se veía como si hubiera sido hackeado y se hacía imposible ver los comentarios de otros usuarios a través del chat.

Con ver eso, sus dudas se disiparon y claramente esto no era un evento, aunque seguía estando la posibilidad, o al menos así lo pensaba la no-muerta.

Seguido, esa grieta oscura que estaba allá arriba se tragó por completo todo el cielo y todo lo que era posible ver para Abyss. Los alrededores estaban oscuros, y sus ojos poco a poco empezaron a cerrarse lentamente, como si un cansancio la consumiera por completo. En ese momento de pura confusión, Abyss llegó a pensar que todo ese cansancio se debía a su agotadora huida de hace un rato.

Las horas, minutos y segundos pasaron. Un tiempo desconocido transcurrió. Abyss al fin se había despertado y no tenía idea de cuánto tiempo estuvo tirada en el suelo como una muerta. Al parecer, había estado mucho tiempo en el suelo, ya que al despertarse podía ver un inmenso sol y cielo celeste entre todas las ramas que tapaban su visión. Al principio estaba atardeciendo, pero ahora estaba soleado y, por lo que veía, podía notar que era por la mañana o mediodía.

"¿Qué pasó con todo el ruido?"

"¿Dónde fue el cielo rojo y esa grieta oscura?

"¿Fue todo un sueño?"

"¡Imposible!"

"Estoy segura de que viví eso."

Estaba cien por ciento segura de que eso lo había vivido y no se trataba de una simple ilusión; se encontraba llena de preguntas con respecto a todo lo que había sucedido y quería respuestas.

Lo primero que hizo tras despertarse fue levantarse del suelo y pensar en el dolor de cabeza que tenía.

"¡Este dolor me está matando!"

"¿Cuánto tiempo he estado durmiendo en este lugar?"

"¡Estoy llena de tierra!"

Sentía como si su cerebro ardiera en dolor, y para ella era algo peor que una resaca. No obstante, a parte del dolor de cabeza, algo en su mente explotó; se había dado cuenta de un hecho sorprendente. Se supone que en el juego era imposible sentir dolor de cabeza; apenas sintieras eso, es porque algo malo estaba ocurriendo en el cerebro, y para cuando lo sintieras, ya estarías en el mundo real, pero… Claramente seguía en el juego por alguna extraña razón.

Nuevamente, hechos extraños estaban ocurriendo a su alrededor; sin embargo, cuando miró hacia el frente, vio algo que la dejó totalmente boquiabierta. En frente ya no había ningún acantilado, sino que todo era puro árboles. La naturaleza que había antes en los alrededores se tornó totalmente distinta. El acantilado había desaparecido totalmente. Lo único que se mantenía era el mar de arboles.