Chereads / Renací como un vampiro en otro mundo capaz de controlar la mente / Chapter 9 - Capítulo 9 – Tareas matutinas (R-18)

Chapter 9 - Capítulo 9 – Tareas matutinas (R-18)

El sol salió por el este iluminando lentamente mi habitación. Al sentir el calor de la mañana detuve mi meditación y abrí lentamente mis ojos. Durante el transcurso de la noche hice un avancé significativo. Estaba seguro que si continuaba a este ritmo podría alcanzar el primer círculo en dos días más. 

Abriendo la pantalla de estado busqué mi recompensa por inicio de sesión. Esto era una parte de mi rutina en el juego por lo que no me la podía saltar.

-  Felicitaciones al usuario por reclamar su primer inicio de sesión. Obtuvo 10 monedas de plata como recompensa.

No estaba seguro de que fuera a funcionar. Afortunadamente este sistema no me decepcionó permitiéndome obtener más fondos para la reconstrucción del territorio. En este mundo las transacciones eran mediante monedas de diferentes denominaciones. 

La moneda más baja era la de cobre seguido de plata, oro, platino y oro blanco. Una moneda de cobre sería considerada como 1 dólar estadounidense si tuviera que compararlo. La moneda de plata tiene 100 veces el valor inicial por lo que valdría 100 dólares. Seguido por la de Oro que equivale a 100 de plata, platino era 100 de oro y un oro blanco son 100 monedas de platino.

Los pueblos pequeños no tenían acceso a la moneda. Por lo que dentro de esas comunidades aún se realizaba el trueque. 

Los impuestos del territorio debían de ser cobrados dentro de poco. Los terrenos pequeños pagaban el valor de los impuestos en grano mientras que los ciudadanos de esta ciudad si tenían acceso a las monedas. Mediante un acuerdo comercial el grano recolectado se vendía en otros puntos permitiendo obtener ingresos. 

El mismo día de la recolección se debe de enviar el 10% de lo recaudado al rey. Debido a esto se enviaría un recolector de impuestos de la capital que verificaba que todo el proceso se llevé con normalidad.

La fecha se acercaba y solo quedan 3 días antes de la recolección. 

*TOC * TOC

El ruido de la puerta me sacó de mis pensamientos. 

-  Adelante.

La puerta se abrió lentamente y una hermosa mujer entró a mi dormitorio sosteniendo una lavacara y una toalla. Esta mujer era Camila la sirvienta ladrona que domé ayer. 

-  Buenos días maestro. Permítame ayudarlo en la mañana.

Vi el rostro pálido de Camila con grandes ojeras en el rostro. Debió de haber realizado lo que le pedí ayer. Limpiar esta casa por completo ella sola era una tarea enorme. Si dormía no terminaría a tiempo. 

Me desvestí y liberé a mi polla que ya tenía una erección al ver el seductor cuerpo de Camila.

Inmediatamente Camila se agachó y dejó la tina con agua a un lado. 

-  Limpia mi pene con tu boca.

Queriendo hacer un desastre con su boca que solo sabia realizar groserías le di una orden.

-  Q… Qué… ¡No pienso hacer eso! ¡Esta sucio!

Su boca decía una cosa, pero su cuerpo ya comenzó a moverse solo. El olor espeso de mi pene le asaltó las fosas nasales haciendo que se sintiera mareada y un poco rubor apareció en su rostro haciéndola lucir encantadora.

Su delicada lengua salió de su boca y toco la punta de mi pene. La suave y cálida sensación me asaltó agarrándome desprevenido. Camila lamio mi pene como si fuera una paleta hecha de caramelo. 

La sensación de su lengua no podía ser suficiente para hacerme alcanzar el clímax. Por lo que agarré su cabeza y la inserté profundamente en su garganta. Su garganta recibió mis treinta centímetros con aparente facilidad. No me extrañaba que esta perra podría hacerlo por esa boca entrenada que tenía. 

Bajé la mirada y vi lagrimas bajando alrededor de su delicado rostro. Queriendo sentir aún más su estrechez y calidez moví mis caderas.

-  *WHA *WHA *WHA

Ruidos lascivos empezaron a salir de la boca de Camila mientras saliva se derramaba en el piso. Su garganta era tan estrecha como su coño. Parecía que esta mujer nació para darme placer. Todo su cuerpo era lujurioso y muy apetecible.

Los intentos de respirar de Camila solo hicieron que su garganta me apretara más permitiéndome alcanzar el clímax. Una espesa carga de mi semen llenó su garganta y bajaba a su estómago mientras otra pequeña parte subía y salía por su nariz.

-  Traga toda mi semilla no la desperdicies.

Saqué mi polla de su boca e inmediatamente empezó a toser.

-  *Cof *Cof *Cof

Mientras lo hacía me lanzaba una mirada salvaje. Si las miradas mataran ya estuviera muerto mil veces. Sin embargo, este acto solo hizo que me sintiera más satisfecho.

-  ¡Te odio! ¡Ojalas murieras de la forma más cruel posible!

Camila se recompuso y mientras estaba en suelo comenzó a insultarme. Al parecer aun no aprende la lección. Mi miré mi polla erecta completamente sucia de semen y se ocurrió una idea.

-  Oye se volvió a ensuciar límpialo con tu lengua otra vez.