= Debe haber nacido como una mutación, su fuerza es incluso mayor que la del Rey Lobo =
Terminaron las pruebas, si no lo enfrento seriamente estaré en problemas.
El generador de la armadura ruge intensamente mientras una gran cantidad de mi maná fluye hacia él, mi cuerpo también se llena de maná mientras uso la técnica de fortalecimiento que he estado desarrollando.
El Troll parece notar la gran cantidad de maná que se filtra de mi cuerpo debido a la técnica incompleta.
Su propio cuerpo se hincha y ruge una vez más, ésta vez carga a una velocidad mucho mayor que antes, en términos de velocidad es muy superior a la mía sin mejorarme con maná.
Con mis puños llenos de energía lanzo un golpe para interceptar su hoja, la onda expansiva nos empuja a ambos hacia atrás mientras que los árboles que nos rodean se sacuden violentamente y la tierra bajo nuestros pies se agrieta.
Pude recomponer mi postura primero y corro hacia él para golpear su pecho, siento el crujir de sus huesos y antes de que pudiera responder pateo su rodilla hacia atrás rompiendola en el acto obligando al Troll a ponerse de rodillas, me preparo para golpear su cabeza con todas mis fuerzas pero ignorando las heridas de su cuerpo me lanza un potente cabezazo.
La fuerza del golpe fué tal que su sangre se exparse por mi casco cubriendo momentáneamente mi vista de verde, al instante siguiente un poderoso impacto en mi hombro me toma por sorpresa casi poniéndome de rodillas, el suelo bajo mis pies se hunde formando un cráter y otro impacto en mi abdomen me empuja varios metros hacía atrás.
Limpio mi casco con una mano al mismo tiempo que con la otra golpeo el abdomen de la bestia que se preparaba para cortar mi cuello con su hoja.
La rodilla de la bestia ya se ha regenerado y furiosamente lanza una gran cantidad de golpes con su espada, su técnica es brusca y errática pero la fuerza y velocidad de cada golpe compensa ampliamente sus deficiencias.
Ahora entiendo lo que siente Elizabeth cuando pelea conmigo.
Defiendo cada golpe con mis propios puñetazos pero con cada impacto fragmentos del blindaje de mis nudillos cae al suelo sin poder resistir los choques.
La bestia ruge y lanza un gran pisotón cargado de maná, acto seguido el suelo comienza a cambiar y grandes bloques de tierra endurecida se lanzan contra mí elevandome en el aire, el Troll comienza a llenar su espada de maná y ésta se recubre de una energía espesa de color rojo oscuro, similar al color de la sangre coagulada.
Él salta en mi dirección listo para dividirme en dos con un golpe, su espada parece más peligrosa así que no voy a arriesgarme a detener el golpe, activo [Ojos de la Verdad] y exprimo pensamiento acelerado al límite para definir la trayectoria del ataque en mi cabeza, finalmente envío maná hacía mis pies y uso algo de magia para crear un punto de apoyo en el aire.
Gracias a eso pude evadir el golpe en el último segundo y responder con un puñetazo cargado con una gran cantidad de maná en dirección a su cabeza, desafortunadamente pudo retorcerse en pleno vuelo para recibir el impacto con la hoja de su espada.
El monstruo impactó con gran fuerza en el suelo, hundido en un cráter de varios metros de profundidad, mientras me mantengo torpemente en el aire con magia, comienzo a reunir mucho maná en mi mano, una bola de fuego inmensa es creada y luego condensada en forma de un misil para ser disparado al cráter.
Al impactar una gran explosión envuelve el área, ráfagas de aire caliente soplan violentamente, una gran sección del bosque bajo mis pies es arrasada y las llamas consumen con furia todo a su paso.
En medio de la explosión el Troll sale cubierto de fuego tomándome por sorpresa e impacta su espada con mi pecho lanzandome al suelo con una fuerza enorme.
Al golpear el suelo, todo el aire sale de mis pulmones y quedo momentáneamente aturdido por el impacto.
En el instante siguiente el monstruo cae del cielo golpeando de nuevo mi pecho con su espada, la coraza de mi pecho se agrieta y algunos pedazos caen al suelo.
El monstruo me toma de un pie y comienza a golpearme una y otra vez contra el suelo, rápidamente me recupero y pateo su cabeza con una gran fuerza obligándolo a soltarme.
Su cuerpo está casi completamente calcinado, un gran agujero atraviesa su abdomen probablemente dónde lo golpeó mi proyectil pero la bestia sigue de pie.
Puedo ver cómo su regeneración ya está reparando poco a poco el agujero, por más poderosa que sea le tomará un tiempo recuperarse de tanto daño sin embargo la bestia ignora completamente el dolor de sus heridas y puede pelear casi como si estuviera en plena forma.
Por otro lado mi propia regeneración no es ni de lejos tan rápida, las múltiples fracturas que me provocó tardarán un par de horas en repararse, es gracias al esqueleto de la armadura que puedo moverme perfectamente.
Él ruge y corre de nuevo hacia mí, freno su golpe con mi brazo y respondo golpeando sus costillas, el impacto las hunde y responde el golpe con un potente puñetazo directo a mi casco.
El golpe me sacude ligeramente hacia un lado pero con los pies firmemente en el suelo continuo peleando, su espada se ha vuelto más rápida que antes pero yo también me he acostumbrado a sus movimientos.
Poco a poco comienzo a arrinconar a la bestia, estoy exprimiendo al máximo la armadura, mis habilidades y todas mis capacidades físicas para abrumarlo con golpes increíblemente poderosos.
Sin darle un solo instantante para pensar enfoco cada golpe para hacer todo el daño posible.
La bestia trata de bloquear mis golpes con su hoja pero poco a poco la potencia de cada golpe va debilitando su defensa hasta que finalmente tras un golpe sus articulaciones ceden y suelta su espada.
Con otra gran golpe derribo a la criatura, trata de recomponerse pero me pongo sobre su cuerpo presionadolo hacía abajo, comienzo a golpear su cabeza con todas mis fuerzas, la bestia redirige una enorme cantidad de maná a su cabeza para protegerse pero de poco sirve, golpeo una y otra vez, hasta que después de muchos golpes la bestia deja de respirar.
Me pongo de pie y tomo su enorme espada del suelo, finalmente corto su cuello separando su cabeza del cuerpo poniendo fin a la batalla.
Me siento exhausto, por primera vez desde que llegué a éste mundo una pelea me lleva tan al límite, sin esa espada la pelea habría sido mucho más fácil pero al menos conseguí un buen premio.
Ese metal es mucho más resistente que mi blindaje.
Algo se mueve muy sutilmente en el borde mi visión.
= Parece que tu admirador volvió =