[Punto de vista de James]
Mientras Eiden se marchaba a traerle leña al anciano que vivía alejado del pueblo, no pude evitar pensar:
"Qué buen chico que es"
Inevitablemente, esas palabras hicieron que cayera en mis más profundos pensamientos y recordara el pasado…
[4 de enero 1564 DY]
En medio de lo que parecía ser un coliseo lleno de multitud, se encontraban dos niños con caras llenas de odio mirándose fijamente.
El niño ubicado a la derecha tenía un cabello verde que ondeaba con el viento y unos ojos negros que junto a sus rasgos faciales y su altura de, 165cm le hacían ver como una persona lo suficientemente atractiva como para enamorar a cualquiera.
En su espalda colgaba un mandoble de su misma altura.
Por otro lado, el chico, ubicado en la parte izquierda del círculo, tenía un cabello corto plateado que con sus hermosos ojos púrpuras y su altura de, 168 cm le daban un aspecto fiero e hipnotizante.
Contrastando con el chico de pelo verde, él llevaba un estoque, un arma ligera pero contundente.
Un hombre de aspecto viejo, vestido con un elegante traje negro y una insignia que tenía escrito "árbitro", se acercó al centro del círculo y dijo:
"El duelo entre James, de 13 años, representante de la casa Lewis, y Richard, de 14 años, representante de la casa Miller, da comienzo"
En el momento en que la voz del árbitro resonó en el estadio, lo dos niños salieron disparados hacia su respectivo oponente.
"James, hoy voy a arrebatarte el título de prodigio del siglo" Exclamó Richard.
James simplemente lo miró con sus profundos ojos negros y no dijo nada.
James sacó el espadón y comenzó a condensar mana de aire y fuego en el mismo.
"Ni sueñes que te dejaré hacerlo" Bramó Richard
Luego de pronunciar esas palabras, Richard clavó su estoque en el suelo y casi de inmediato todo el piso se volvió hielo de un color negro siniestro.
Sin decir una sola palabra, James agarró su espadón e hizo un simple corte hacia abajo, ese simple corte, fue el detonante para que por lo menos 3 tornados de 8 pies de altura aparecieran y comenzaran a arrasar con todo lo que tenían a su paso.
Los ojos de Richard se agrandaron y rápidamente construyó una pared de hielo.
Los tornados chocaron contra el muro, lo que provocó una explosión.
James aprovechó el momento y reforzó su espadón con fuego.
Al momento siguiente, James pareció teletransportarse al lado de Richard y con un fuerte tajo, le logró provocar una quemadura en su ojo derecho.
Richard gritó de dolor y comenzó a retorcerse por el suelo.
"El… El ganador es James de la casa Lewis" Tartamudeó, el árbitro.
[Punto de vista de James]
Miré fijamente como Richard se retorcía por el suelo como un vulgar gusano.
"Cuando me retó, pensé que sería diferente al anterior, parece que me equivoqué" Murmuré para mis adentros
Mientras veía como venían los médicos para curar a Richard, salí del escenario.
"Parece que se excedió otra vez, señor"
Me giré, solo para encontrarme con mi mayordomo personal, Winston.
"Señor, será mejor que nos vayamos, hay un carruaje esperándolo afuera" Me dijo Winston.
Ladeé la cabeza en señal de aceptación y me dirigí junto a Winston hacia el carruaje.
Me subí al carruaje y mientras nos dirigíamos hacia la mansión de mi padre, pude vislumbrar la "linda" ciudad que me rodeaba.
Enormes edificios descuidados con chimeneas gigantescas, fábricas que contribuían a la polución de la que antaño fue una majestuosa capital, niños pidiendo dinero por las calles y adultos muriéndose de hambre.
Esto es Lordran, la capital del país Artemis, una de las principales potencias del continente humano.
Es conocido por la importación de metal y minerales preciosos hacia todo el continente, pero sobre todo, porque aquí está situada la academia más prestigiosa de todo el reino humano, o también conocida cómo la academia "Lotus".
"Señor, ya hemos llegado" Exclamó Winston.
El carruaje se paró en una enorme mansión de aproximadamente 6.800 m², era de un hermoso color blanco marfil y contrastando con el centro de la ciudad que estaba lleno de contaminación e inmundicia, esta se encontraba en un hermoso bosque, rodeado de pura tranquilidad y naturaleza.
Bajé del carruaje y me dirigía hacia adentro, pero una voz me detuvo
"El señor pide que se dirija hacia su oficina" Advirtió Winston
Rechiné los dientes en silencio y me dirigí hacia la oficina de mi padre.
Cuánto más me acercaba hacia su oficina, más sudor caía de mi frente y más me pesaban los pies.
Cuando por fin estuve en frente de la puerta que daba hacia el estudio de mi padre, una voz se oyó desde dentro:
"No me hagas perder el tiempo y entra"
Hice caso a la voz y me apresuré a entrar.
Delante de mí se encontraba un hombre corpulento de 2 m de altura, con un pelo y unos ojos tan negros como la misma noche, sentado escribiendo tranquilamente.
Cuando me di cuenta de que su mirada se posaba sobre mí, no pude evitar mirar hacia el suelo para no hacer contacto visual con él.
"¿Sabes que has hecho mal?" Me dijo.
"…"
"Respóndeme cuando te haga una pregunta" Me exigió con una mirada gélida.
"No supe medir mi fuerza y acabé provocándole una herida mayor" Respondí
El corpulento hombre me miró unos segundos para luego esbozar una turbia sonrisa.
"Si no controlas tu fuerza, podrías acabar haciendo daño a los que más quieres, por ejemplo, tú, hijo, eres un manipulador elemental de 3er nivel con 13 años, y sabes muy bien que podrías hacer mucho daño a cualquiera de tu edad ¿verdad?"
"…"
No sabía que responder, así que me mantuve callado.
De repente, la sonrisa de mi padre desapareció y antes de que pudiera reaccionar, me agarró con su fuerte mano por el cuello.
"¡Que te dije sobre responder a las preguntas que te hago!" Bramó el monstruo que lamentablemente era mi padre.
Me propinó una bofetada tan fuerte que mi nariz comenzó a sangrar.
Mi mirada se mantuvo igual de inexpresiva.
"Verás James, yo soy un manipulador elemental de 8vo nivel y probablemente si esa bofetada te la hubiera dado en serio, tu cabeza hubiera salido disparada" Exclamó.
Me soltó del cuello haciendo que me cayera.
"Escúchame bien mocoso, actualmente el jefe de la familia Miller está intentando hundirnos debido a las heridas que le causaste a su hijo, yo me aseguraré de solucionarlo, pero como no aprendas a controlarte, tendré que prescindir de ti" Me amenazó.
"Ahora lárgate de mi oficina"
Salí despavorido de su oficina y me fui al bosque que quedaba al lado de la enorme mansión.
Una vez que corrí lo suficiente como para sentir que estaba fuera del alcance de mi tiránico padre, comencé a llorar para desahogarme.
Mis lágrimas no paraban de caer.
De repente sentí un toque en la espalda y me giré solo para ver a un chico pelirrojo, de unos 10 años, que me dijo:
"¿Por qué lloras?, si quieres te puedo ayudar me llamo Thomas y me gusta mucho hacer amigos"
[Actualidad]
"James, James, ¡James!"
Me desperté sobresaltado y vi a Sharon a mi lado con una tez pálida
Miré la hora y marcaban las 00:36
"¿Qué sucede?" Pregunté
"Eiden aún no ha aparecido y está nevando afuera" Respondió con preocupación.
Justo cuando me levantaba para ir a buscarlo, una voz me interrumpió.
"No hay necesidad de preocuparse, señor"
De las sombras salió un hombre pelirrojo
"Thomas, ¿tú sabes donde se encuentra?" Pregunté
"Sí, señor, actualmente se encuentra en la casa del anciano que vive en la colina" respondió con obediencia.
"¿Está seguro con ese hombre?" Respondí
"Sí, señor, es un individuo un poco amargado, pero no creo que le haga daño al joven señor"
"Perfecto, pues un problema menos" Pensé
Lo que ignoraba es que un hombre se acercaba rápidamente hacia este pequeño pueblo, un hombre con una mirada furiosa y una horrible cicatriz en su ojo derecho.