Vuelve a repetir aquellas palabras- Alexander Santoro destilaba maldad a su alrededor y sus hombres que se estaban manteniendo cerca la protección quisieron desaparecer.
Artemio secuestro a Amara – David volvió expresar las mismas palabras, si te llamo es porque necesito refuerzos vía terrestre es imposible necesito que tus hombres capacitados para estas emergencias rastreen las vías Marítimas y aéreas.
Alexander no le había dado ninguna respuesta a David ya que la llamada había terminada, Alexander había marcado el número de alguien más por, pero antes de que marcara un número desconocido - ¿Hola?
Alexander – La voz de Amara lo había sorprendido
Isla Poveglia – Fue lo único que Alexander escucho antes de que la llamada volviera a terminar, pero Alexander Santoro no necesitaba escuchar más.
Preparen la avioneta saldremos de inmediato para Isla Poveglia – El gran movimiento de hombres se observó 15 minutos después la avioneta había ascendido.
Mientras tanto Amara ya estaba llegando en la Isla y el momento para que sean descubiertas parecía estar cerca.- ¿Qué vamos a hacer?- Carol estaba preocupada sabía que Artemio tenia bastantes hombres esperando por el.
Esperar por Alexander mientras eso ocurre debemos luchar por nuestra supervivencia- Expreso Amara- Ve por todas las armas de los hombres mientras yo reduzco la velocidad.
Carol le hizo caso a Amara y fue por las pistolas, al mismo tiempo que la Avioneta de Santoro ya se encontraba cerca de la Isla después de varias horas – David la tengo- Le informo Alexander a su amigo.
El yate había detenido su curso y el momento más difícil para las mujeres podría acercarse, pero la avioneta de Alexander también había llegado al mismo tiempo, aquella Isla fue adquirida por Santoro y actualmente es alquilada por Sandoval.
Los trabajadores reconocían perfectamente cuando Santoro venia de visita por la ruta de entrada que tenía el hombre. Los empleados y los hombres de Artemio estaban confundidos, pero el Yate 2 y 3 habían descubierto que algo no andaba bien cuando visualizaron a varios hombres esperando por ellos.
Lo primero que hicieron fue conectarse con el Capitán del Yate en donde estaba Artemio, pero Amara no contesto, fue aquel el momento exacto en que los hombres empezaron a disparar.
Carol también salió la balacera desde los Yates alerto a los demás- Eliminen a los de atrás- Alexander en ese mismo momento Alexander tomo una moto acuática las balas llovían, pero Alexander había llegado en donde quería y era al primer yate, sus ojos fulminaron a Carol, pero lo que buscaba estaba más al interior rápidamente había avanzado hasta llegara ella.
Pero los disparos no habían cesado, aunque Amara ya estaba bajo la protección de Santoro, pero el capitán que solo había sido apuñalado por Amara volvió a despertar y había tomado el arma que estaba al lado suyo, pero Alexander se había dado cuenta al hombre no le tembló el pulso para acabar con la vida del Piloto.
La pareja salió cuando el área estaba totalmente despejada los hombres de Alexander habían bloqueado por completo a los hombres de Artemio.
Lleven a Artemio en mi cabaña – Aquella orden tenía otro significado y solamente el hombre sabía que intenciones tenia.
Amara había sido envuelta en los brazos de Alexander mientras se disponían a subir a una de las camionetas Amara visualizo a Carol que estaba siendo guiada a otro vehículo. Unos minutos después una hermosa cabaña había quedado ante los ojos de Amara, pero Alexander ya había descendido y tenía cara de pocos amigos.
Señor – Uno de sus hombres estaba por informarle algo – Hemos perdido el cargamento al venir a rescatar a la señora – Aquellas palabras fueron sorpresivas para Amara que venía sigilosamente por detrás de ellos, no se esperó que Alexander Santoro haya perdido una fortuna por ir a salvarla ¿Acaso efectivamente el la quería, lo que le ha dicho es verdad?
No pasa nada el dinero viene y va la vida de mi mujer vale más que el dinero- Expreso Alexander Santoro, aquellas palabras contrajo el estómago de Amara unos minutos después la mujer se acercó a él.
Gracias por venir – Susurro Amara – Y lamento la perdida de tu cargamento- Amara mantenía la cabeza agachada hasta que unos instantes después Alexander la envolvió en un abrazo.
Por ti movería el cielo y el infierno Amara- Alexander tomo posesión de los labios de la mujer, un beso ardiente parecía que habían pasado mil años desde que no la besaba cuando solo fueron 72 horas, las manos del hombre acaricio cada tercio de piel de la mujer, la temperatura iba subiendo, sus manos subían por las piernas de Amara sus respiraciones se mezclaban y ellos solamente necesitan una cosa fundir sus cuerpos en las llamas de la pasión, que dos cuerpos se conviertan en uno entrelazados en la cama.
La espalda de Amara toco la textura del sofá mientras el cuerpo de Alexander se cernía lentamente por encima de ella sus miradas se encontraron, a mirada verde de ella era una perfecta combinación de sus ojos azules como el cielo.
Alexander empezó a desvestir a la mujer lentamente hasta que no hubo más impedimento para que sus cuerpos fueran uno solo, el pequeño cuerpo de Amara se arqueo al sentir la virilidad del hombre, la profundidad de sus embestidas erizaba su piel, pero ellos necesitaban esta pasión Alexander se maldijo por lo bajo por no usar protección, pero cuando está cerca de ella se olvida de absolutamente todo, sus uñas arañaban la espalda del hombre, la oscura habitación se llenó de la fragancia del amor que estaban teniendo, Alexander no puede negar que estar profundamente enterrado en el cuerpo de Amara se sentía extremadamente placentero y cada gruñido de placer que emitía enviaba a Amara a un mundo desconocido, aquel éxtasis conocida como placer, las embestidas fueron más rápidas y el cuerpo de la mujer había reaccionado apasionadamente ante las caricias y de la manera que Alexander tenia intimidad con ella.
Hasta que su interior se contrajo la sensación era abrumante para Amara sus pensamientos se nublaron y dejo que los instintos se apoderara de ella, Alexander había cambiado la posición dejando ahorcajadas a Amara encima de el, pero el choque de sus cuerpos no carecía de ritmo es más necesitan más, pero ya no podían soportarlo una explosión de emociones y un pequeño grito de placer de Amara que fue acallado por un beso de Alexander tras el placer inmenso que habían encontrado, el hombre había encontrado su liberación dentro de ella y en esta noche de pasión excitante podría concebirse el amor más grande de la pareja de la misma manera que podría desatarse el sufrimiento de Amara Mendoza.