Chapter 10 - Capitulo IX

Sujeto con fuerza mi mano para detener el temblor.
La madre de Daniel había llamado por mi y ahora mismo me encontraba frente al salón que fue hecho para la Luna.
Inhalo profundamente buscando un poco de  tranquilidad para mi corazón.
– Adelante. – dijo alguien desde adentro antes de que pudiera tocar la puerta. La abro con cuidado y una amable sonrisa me recibió.

– Buenos días. – pronuncio con cierto nerviosismo.

– Buenos días, Linsey. Toma asiento. – saluda la madre de Daniel señalando con su mano uno de los sillones individuales que se encontraba en la habitación.

Me siento y mantengo mi mirada en mis manos.

– Así que, Linsey. ¿Cómo estás?– me pregunta con una sonrisa.

Levanto mi mirada y observo sus hermosos ojos.

– Mu-muy bien, gracias por preguntar. Y... Y usted?- pregunto con un ligero tartamudeo.

– Muy bien, también.– responde.– Verás, Linsey, te llamé por una duda que tengo desde ayer.

Asiento con la cabeza y ella sonríe de nuevo, pero ahora...un poco más triste.

– ¿Es cierto que estás embarazada?–

La miro asustada. ¿Cómo sabe eso?

Mi mirada viaja por toda la habitación.

Mi mirada se detiene en un espejo y algunas pinturas de la habitación.

Sentía como si cada persona de las pinturas me jugaban y miraban con desprecio.

–¿Linsey?– me llama.

En el espejo logro ver mi reflejo mirándome con desagradado.

Mi corazón va a mil por hora y siento como mi respiración se corta.

"Inútil."
Escucho la voz de mi madrastra en mi cabeza. Su cara aparece en el reflejo del espejo y me mira con odio.

"Te quedarás sola para siempre"

Ahora la cara de Alexander, con una sonrisa sucia y ojos odiosos, mirandome arrogante.

"¿Acaso crees que podrás ser feliz?"

–¡Linsey!– la madre de Daniel me llama sacudiendo mi cuerpo suavemente.

Mi ojos se enfocan un los suyos y ella suspira aliviada.

– Pensé que te estaba dando un ataque de pánico.– me suelta y regresa a su asiento.

Agacho mi cabeza y niego.

Inhalo profundamente y exhalo.

– Es-estoy embarazada.– confieso con voz temblorosa.

– Ya veo.– responde ella. El silencio reina unos segundos y vuelve a hablar.– ¿Sabes quién es el padre?– dice ahora con una voz más seria.

Cierro los ojos con fuerza y asiento.

– Y supongo que no es mi hijo, ¿No es así?

Niego con la cabeza lentamente.

–Haaah....– suspira pesadamente mientras masajea su sien.

Levanto la mirada y la Luna tenía los ojos cerrados.

– Yo.... Yo sé que nada de lo diga va a cambiar la situación... Se que no debería estar aquí.– dije, dirigiendo mi mirada a uno de los cuadros de la habitación.

– Así que estás consiente de que toda esta situación es absurda, ¿verdad?– pregunta y yo asiento con la cabeza.

Clavo mi mirada en el suelo, mientras escucho como ella suspira.

– Linsey. – me llama y levanto la mirada. Sus ojos verdes brillan de manera encantadora. – Te propongo un trato.

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Daniel's POV

– Deja de moverte tanto, y ponte a trabajar. – Kale me mira con disgusto desde su escritorio. Me detengo un momento y lo miro con desprecio.

– Jamás entenderías este sufrimiento, insensible.– contesto y sigo dando vueltas en la habitación.

Uno de los empleados me dijo que mi madre había llamado a Linsey al Salon de Lunas. Y tristemente los hombres no están permitidos ahí.

– Debería buscar una chica que me sirva de espía.– susurré para mí mismo.

– Me das asco. – giro mi cabeza en dirrección a Kale y lo fulmino con la mirada. – Mucho asco. – remarcó con disgusto.

– Soy tu alfa! Deberías respetarme. – exclamó con enojo.

– Sip... Debería.– responde dejando la pluma de lado y levantándose del escritorio para luego dirigirse a dónde estoy yo. – Pero no eres de mucha ayuda.– señaló dando palmaditas en mi hombro para luego salir de la oficina.

Me quedo quieto estupefacto ante tal acto de rebeldía de parte de mi beta.

–Aveces me das penita.

????
Dude, quien te preguntó?

– Pues contéstale algo, entonces.

– PUES....– Grito intentando encontrar algo que responderle. Kale se queda quieto frente a la oficina mirándome. – pues...– algo algo! ALGO QUE PUEDA DECIRLE A ESTE!– NO ME IMPORTA SI ME RESPETAS O NO >:C

– Elige al Alfa, decían, será divertido, decían.

Shhhh.

Kale me miró con sorpresa por unos segundos. A qué no te esperabas esa, hah!

– ¿Enserio que eso fue lo mejor que se te ocurrió?– pregunta Kale con una mirada de pena.

– AHHH FUERA DE MI OFICINA. –grito enojado.

– Ya estoy afuera. – responde y se va.

Me siento en mi silla, rendido.

Los betas son lo mejor, decían, te apoyan, decían.

– No me copies.

Ahhh mejor vayamos a ver si Linsey ya acabó.

Salgo de mi oficina y me dirijo al área donde está el Salon de Lunas.

"Prohibido el paso"

El cartel de advertencia en amarillo se mostraba amenazante con esas palabras.

Mi tatarabuela había creado está área cansada de lo pegajoso que era mi tatarabuelo. El cartel decía eso y además tenía un cuchillo dibujado.

Claramente, el destino de aquellos que se atrevieran a entrar a esta área sería una que jamás olvidarán y que traería traumas posiblemente permanentes.

Muy bien, nadie por allí, nadie por allá. Entremos.

Camine con cuidado por el pasillo que llevaba al salon principal.

El aroma de Linsey se encontraba en este lugar intercalado con el de otras lobas.

Una de las puertas del pasillo se abrió de repente y por instinto me metí en la habitación más cercana.

Los pasos de las que salieron de esa habitación se fueron alejando.

Suspire aliviado y me di la vuelta.

Unos ojos verdes me recibieron con molestia.

Ay no.

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LINSEY'S POV

– ¿Un trato? – pregunto confundida.

– Así es.– la Luna responde mientras se levanta de su asiento y se acerca a uno de los muebles que había en la habitación. Abre uno de los cajones y saca un sobre azul.

Se sienta una vez más y me mira con una sonrisa.

– Toma. – me extiende el sobre. Lo tomo y la miro sin saber que hacer. – Ábrelo. – señala con una sonrisa.

Miro el sobre azul en mis manos por unos segundos. Lo empiezo a abrir y saco las hojas que se encontraban dentro.

Una foto de una cabaña, un mapa, dinero y una identificación falsa.

Levanto la mirada y la luna sonríe.

– Vete de la manada.

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