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Solo un Brujo

🇪🇸Vlacki
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Synopsis
Indalf, que fue abandonado por sus padres a una temprana edad, fue capturado por unos brujos y convertido en uno de ellos. De sus padres, solo tiene un libro que le dejaron cuando se fueron y, quiere encontrarlos, aunque quizá le ocurran varias cosas mas…
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Chapter 1 - El Pueblo

I

—Lo hacemos por tu seguridad, Indalf. —dijo una mujer con una sonrisa falsa.

—¿Eh?

—Por favor, no nos odies… —La mujer abrazo a Infulf y empezó a llorar—. No te preocupes por nosotros, solamente vive ¿Si?.

La puerta se abrió de golpe y entro un elfo joven a la habitación en la que se encontraban. El elfo de nombre Aiver era alto, cabellera plateada larga con ojos azules marinos, vestía unas túnicas verdes sucias.

—Luna, tenemos que irnos ya, ellos están por llegar. —explico Aiver—. Pero antes déjame decirle algo a Indalf.

Aiver alejo a Luna de Indalf y le susurro algo para tranquilizarla. Luna era una humana, mas joven que Aiver, tenia el pelo de color castaño con ojos verdes.

—¡Papa, mama!-grito Indalf con lágrimas en los ojos—. No entiendo que pasa, pero no os vayáis.

La tristeza se reflejaba en los ojos de Aiver y Luna, pero necesitaban hacer esto, ellos ya estaban condenados a muerte, pero su hijo se podría salvar.

—Hijo, recuerda esto, en ninguna circunstancia puedes perder o enseñar este libro, escóndelo.

—¡Me da igual el libro! -dijo furioso Indalf—. Solo quiero que estéis aquí.

—Tu solo haz lo que te dije, ahora, ¡corre!.

Indalf se despertó jadeando en medio de un bosque a plena noche. Era frecuente que tuviera esta pesadilla de cuando sus padres lo abandonaron, todavía no sabia porque, pero lo descubriría.

Indalf es un semi-elfo de cabello color grisáceo largo, acomodado en el hombro, con ojos afilados, de un tono verde claro. Su vestimenta era un capa negra con capucha que lo rodeaba completamente. Tenia una especie de pin de un cuervo que la unía y su ropa es una camiseta azul con unos pantalones de cuero marrón. Pero lo mas desconcertante de todo, era el muy grande mandoble negro que tenia en la espalda, se veía hasta mas grande que el mismo, aunque no es que el fuera muy alto.

«El brillo de la luna es hermoso», pensó Indalf, «pero la verdad es que no es tan hermoso como mi pelo».

Indalf se sentó en la tierra con un bostezo y empezó a pensar que hacer ahora. Cuando se despertaba así, nunca lograría dormir mas, así que la mejor opción era ir a su destino.

Miro a su cintura y comprobó que el libro de sus padres estaba en su lugar y se dirigió a Besaul, el pueblo en el que tiene que realizar su misión.

—¡Aghh! Tardare como unas 12 horas andando —se quejo Indalf—. Mejor voy corriendo, tardare menos.

3 horas después, en pleno amanecer, Indalf estaba en el lugar donde creía que debía realizar su misión.Era un lugar no muy grande, casas de madera antiguas y sucias, aunque había buena vegetación. Ahora solo necesitaba confirmación de que estaba en el lugar correcto.

Alzo bien la cabeza y empezó a buscar a alguien. Cuando lo hico, corrió hacia esa persona.

—¡Buenos días, señorita! —saludo alegremente Indalf—. Me pregunto si esto es Belaus.

—¿Besaul? —corrgió la chica que estaba llevando una canasta con frutas y vegetales.

—Sip. Exactamente eso dije, entonces es ¿No?

—¿Eh? Pues si. Per…

—¡Perfecto! —exclamo Indalf interrumpiendo a la chica—. ¿Me podría decir donde esta el jefe del pueblo?

—Justo en el centro, es la casa mas grande de todo el pueblo.

—¡Gracias!

—Pero al jefe no l…

Indalf no escucho a la chica y hecho a correr hacia el pueblo. Habían varios caminos de tierra y en ambos lados de ellos, había una gran cantidad de casas amontonadas, pequeña y sucias, aunque estables.

Pero no se detuvo y siguió corriendo hasta que encontró la casa mas grande y que estuviera en el centro. Sorprendentemente,cuando la encontró, vio con claridad que era la casa mas grande, pero la mas lúgubre. Se acerco y golpeo la puerta para avisar de su llegada.

—¿¡Quien es el que me molesta a esta hora!? -Un enfadado anciano abrió la puerta con furia y miro a Indalf-. ¿Y tu quien eres?

Indalf se sobresalto por el repentino arrebato.

—Bueno, bueno. A ver si te relajas… —aconsejo Indalf-. ¿Eres el jefe de la aldea?

—Si, ¿Que quieres? —pregunto el jefe de la aldea con los ojos entrecerrados.

—Me llamo Indalf y, soy de la Academia del Cuervo Fantasma -explicó señalando el pin de cuervo en su capa-. Vine por la misión de la arañita demonio, ya sabes, a matarla y eso.

—Ah… -se sorprendió el jefe del pueblo—. Un brujo…

—Mas que un brujo, yo nos llamo humanos de condiciones especiales -replicó Indalf-. En fin, quiero los detalles para la misión.

—Esta bien, llámame Edan —le dijo—. Ahora, entra.

Indalf acepto la invitación y entro en la casa. Estaba en un estado bastante malo, las sillas parecían que no podrían soportar si se sentaba y la cama tenia grietas.

—¿Por qué tu casa es la peor si eres el jefe? —preguntó Indalf.

—Porque no necesito lujos —contesto Edan—. Envejecí con ella, no quiero cambiarla…

—Entiendo… Bueno, hablemos de la caza.

—Si, eso. Sientate —Edan le ofreció una silla a Indalf—. Veras, hace una semana y media, encontramos a un aldeano muerto, en la zona de talas. Murió incinerado, pero otro chico que estaba allí vio lo que paso.

El silencio se podía escuchar durante unos segundos en la habitación.

—¿y? ¿Qué paso? —pregunto Indalf.

—Fue una araña, muy grande, de unos 5m y podía controlar el fuego. No nos atrevemos a acercarnos allí —dijo Edan con voz temblorosa.

Indalf alzo una ceja con sospecha.

—¿Solo eso? —le preguntó, sentía que algo no estaba bien.

—Si.

—¡Oh, vamos! Es solo un muerto, podría haber sido el otro en venganza o algo así.

Indalf se levanto y se preparo para irse, no creía que un demonio solo había matado a un humano en una semana y media, esos bichos están sedientos de sangre.

—¡Un segundo! —Edan le detuvo—. Por favor, explora esa zona un momento, estoy seguro que el no miente.

Indalf lo pensó por un momento. Quedarse un poco no le importa y, como ha venido hasta aquí… tendrá que cobrar el dinero, el tiempo no es gratis y el no es rico.

—Esta bien —aceptó Indalf—. Pero cobrare igualmente aunque no haya demonio.