La casa se estaba moviendo, velozmente, sobre el paisaje. Am, desesperadamente sorprendida trato de buscar el ángulo en que el vidrio de la ventana le permitiera ver que movía la cabaña a ese ritmo tan vertiginoso.
- ¿sin habla, novata? - le dijo Li, jactándose de su superioridad en lo arcano.
-pero qué mueve esto- interrogó Am, volviendo su mirada a los misteriosos ojos de la maga.
-un demonio que esclavice hace un tiempo- una sonrisa en extremo arrogante, pero agradable, se dibujó en su rostro; - más bien, una porción de este-.
- ¿un demonio? - había leído que ciertos magos, que se adentraban en lo oscuro, podían hacer tratos con demonios para que estos les "sirvieran"; - eres una bruja-.
-no- rio Li; - mi magia no cae tan bajo, esclavice este demonio por la fuerza, pertenecía a un monstruo-.
- ¿un monstruo?, qué clase de bestia podría…-.
-Gar'Dal Dark Dreams- pronunció eliminando la agradable expresión de su rostro, como si aquel nombre le causara nauseas.
Am guardo silencio un momento, noqueada, trago saliva y habló.
- ¿te enfrentaste al Rey Oscuro? -.
-se puede decir- pensó un momento si contarle o no; - que tenemos asuntos pendientes-.
- ¿de qué clase? -.
-el me engaño, de un forma horrible- Li bajo su mirada, Am pudo ver como sus ojos se tornaban levemente llorosos.
Arzelen necesitaba saberlo, ya había visto el poder de su compañera, necesitaba saber qué clase de monstruo era Gar'Dal.
- ¿es… fuerte? -.
-me he enfrentado a seres poderosos, pero Gar'Dal esta otro nivel- levantó la cabeza y con algo de orgullo concluyó; - pero yo no me quedo tan atrás, logré sacar un pedazo de su esbirro favorito y ponerlo bajo mi control-.
La joven maga quedó pasmada, estaba frente a alguien realmente increíble. Se levantó y se acercó bruscamente a Li tomándole las manos, la mujer le dibujó un rostro de sorpresa, inquieta por las intenciones de Am.
-tienes que enseñarme, enséñame a ser una maga de combate- le suplicó.