Esa tarde Nico estaba en casa solo ya que su hijo había salido en una misión y llegaría en cinco días. Sauske también había salido de misión y regresaría al cabo de una semana. Sakura estaba de guardia en el hospital todo ese día y toda la noche hasta el mediodía del siguiente día.
Ésto hizo que Nico invitara a Sara a su casa esa tarde para pasar el resto del día hasta el amanecer. A su vez había pedido el día argumentando que deseaba descansar. Ella utilizó una singular técnica para cambiar su apariencia así despistaba a todos.
Cuando ella llegó, Nico la recibió con un gran abrazo y un voraz beso carnal así fueron subiendo hacia la habitación del Sexto sin dejar de besarse ni abrazarse. Torpemente entraron al cuarto y allí ella le quitó la campera roja a él, mientras que Nico le sacaba la capa negra y la blusa rosa. Luego ella acarició la dorada cabellera de su amado mientras que él le quitó el sostén para arrojarlo al suelo y acariciar aquel cuerpo que tan loco lo tenía. Sus lenguas chocaban, buscaban, se unían mientras se deslizaban a la cama.
Nico le bajó el cierre del pantalón quitandoselo junto con la ropa interior torpemente con sus hambrientos dedos. Él le introdujo un dedo primero logrando hacerla gemir de placer, cuando introdujo el segundo dedo ella se aferró a él rodeandole el cuello con sus brazos. Al usar el tercer dedo ella arqueó su espalda consiguiendo que su miembro se endurezca y empiece a dolerle.
Sara disfrutaba en sus brazos tanto que se olvidaba que él no disfrutaba de entrada. Ella fue acariciando aquel torax tan apetitoso hasta dar con su pantalón. Allí, ella le bajó el cierre para introducir su mano y acariciarle el miembro con su mano derecha sobre sus boxers. Nico ya no soportaba más, por lo tanto se quitó los pantalones y los boxers para liberar su miembro.
La penetró lenta y suavemente, como siempre,no quería lastimarla, él era así con ella. Iba en continuo aumento hasta llegar al éxtasis. Lo hicieron durante más de tres horas hasta que ambos quedaron dormidos. Así llegó la noche y despertaron. Sara sonrió estando apoyada su cabeza sobre el pecho de su amado. Se miraban con amor verdadero.
Momentos luego se levantaron y se ducharon juntos. Luego bajaron a la cocina y prepararon algo. Se notaba que eran una pareja que se amaba, compartían los mismos gustos, sentían la misma pasión que disfrutaban de la adrenalina del peligro más de aquel salvaje amor que los enloquecia a los dos.
Prepararon mariscos y se sentaron a cenar mientras reían juntos. Aquel fue el mejor msrisco que ambos comieron. Luego lavaron y ordenaron todo para ver en el living una película. Al acabar dicha película, se fueron a la habitación a volver a bailar la danza del amor. Cerca del amanecer se levantaron y ella, tras volver a ducharse y vestirse, se cubrió con la capa negra y la capucha para salir de la casa de su amado. Ella había llegado a su casa antes de que el sol salga.
La voz de su padre, Sasuke, la devolvió a la realidad. Sara miró a su amado inconsciente y tuvo que esforzarse para no llorar frente a su padre quien le devolvió su celular diciéndole:
– Descubrimos que tu celular fue clonado. Por eso él cayó en la trampa ya que creyó que eras tú quien le mandaba el mensaje.
– Imposible ¿quién de ustedes pudo hacer algo asi? – Sara se mostraba dura y fría con todos salvo con Briam.
– Sara yo no le hice nada pero descubrí algo interesante – Sasuke se le acercó y la miró con dureza – Tú y él mantenian una relación amorosa ¿cierto?
Sara abrió sus verdes ojos asombrada ya que sentía que el peligro que su amado corría solo estaba aumentando.
Pero logró contenerse y usando la máscara de la frialdad contestó:
– No se de qué hablas padre.
Pero Sasuke la sujetó con fuerza del brazo evitandole huír para mirarla fíjamente a los ojos. Se veía molesto y furioso.
– Escuchame Sara y escúchame bien. Nico es mi mejor amigo, hizo por mí cosas que nadie, ni mis padres de haberlos tenido con vida, hubiesen hecho. A él le debo el estar ahora aquí. Por ende jamás, pero jamás le haría daño. ¿Sabes por qué? Porque él y yo fuimos rivales en el pasado y ya nos enfrentamos. Ésta no es mi forma de actuar si lo qusiera lastimar. Pero tú si que lo estás dañando y de una forma que jamás nadie lo hizo. – Su hija lo miraba con lágrimas en los ojos – Tu amor por él le puede costar su cargo de Ministro por el que tanto luchó durante toda su vida. ¿Sabes cómo se sentiría él si llegara a pasarle eso? Por no mencionar que podría acabar en la prisión de la aldea por infringir la ley.
– Yo....yo no....
– Él tiene enemigos aquí ¿te imaginas qué le sucedería si se llegaran a enterar de tu amor por él?
– Papá...yo lo amo.....lo amo tanto que....
– Lo sé hija lo sé pero entiende algo, quien le hizo ésto los descubrió a ustedes y es evidente que lo odia tanto que....usó la peor de las condenas para él.....encerrarlo en su propio cuerpo.
– Y lo peor es que es alguien muy cercano a él papá....por favor ayúdanos.
– Briam ¿sabe lo de ustedes?
– Sí, porque se lo conté.
– ¿Y cómo reaccionó?
– Le gustó la idea ya que su padre está muy felíz conmigo.
Sasuke se llevó su mano a la cabeza intentándo entender aquella relación que le molestaba por tratarse de su hija.
– Eres mi hija y no apruebo esto. No y no, pero es mucho más importante liberarlo de esa desesperante prisión en la que fue encerrado – se levantó y se le acercó a Nico, mientras sujetaba su mano le dijo – No te preocupes amigo, te liberaré de ese encierro, volverás a ser libre. Solo confía en mí – Nico apretó su mano con fuerza y Sasuke la sujetó con ambas llevándola a su pecho – No apruebo tu relación con mi hija pero.....de eso hablaremos después. Ahora solo importa tu libertad.
– Sasuke....Sasuke....
– ¿Nico? – Incluso Sara se colocó a su lado del otro lado de la cama.
– Sasuke....sácame de aquí....por favor.
– ¿Quién te hizo esto?
– Alguien muy cercano....alguien....muy conocido....
– ¿Quién fue?
– Sasuke.....cuida a....Briam.....él está.....en....en peligro.....y....y.....Sara también.....
– ¿Por qué? - preguntó el moreno.
– Ayúdame.....no....no soporto más....
Nico no pudo seguir hablando ya que volvía a ser encerrado en su propio cuerpo.
Sara lloraba mientras lo acariciaba. Sasuke soltó a su amigo pero le dijo:
– Te juro que te liberaré amigo.
Sasuke le pidió a su hija que se vaya a casa ya que él se quedaría ahora con Nico. Briam llegaba en ese momento y su amiga le contó lo sucedido. Sasuke le pidió a su discipulo que cuide a su hija y a si mismo. Él seguiría intentando romper el muro invisible que le impedía salir. Sara le susurró al oído a su amado:
– Te amo – luego lo besó en la frente y se fue.
Sasuke quedó muy molesto al ver aquello pero nada dijo, más bien se concentró a emplear sus poderes para romper aquella maldita técnica. Cuando creyó que por ese día todo sería inútil, su cuerpo empezó a ser envuelto por una luz roja hasta llegar un momento en que del interior del cuerpo del rubio salió un sombra oscura que fue destrozada por la luz roja volviendo todo a la normalidad. Nico abrió sus ojos y miró a su amigo.
– Sasuke....gracias por liberarme....amigo....
– Bienvenido amigo mío –dijo Sasuke sin pasarsele por alto la gran tristeza que Nico reflejaba en su rostro.