Chapter 31 - Naranjas con Chocolate

Eran cerca de la hora de las siete de la tarde cuando Hoshino terminó de enseñarle el lugar a Asier, quien estaba bastante emocionado por comenzar en ese mismo momento, incluso lo intentó, mas fue arrastrado de regreso al primer piso de la empresa para volver a casa bajo la mirada decidida de Hoshino de mandarlo a descansar, no importó cuanto se quejó Asier ni cuanto le lloro, en menos de treinta minutos estaban de regreso en la mansión un malhumorado Asier y un agotado Hoshino.

Hoshino sentía una leve pisca de culpa, por lo que mandó a un sirviente a preparar algunos postres dulces para la cena.

Cuando finalmente ambos se sentaron a cenar la noche ya había llegado y el cielo nocturno lleno de estrellas se reflejaba a través de los grandes ventanales del comedor, la mansión de la familia Moreau estaba ubicada a las afueras de la ciudad y tenían un gran terreno y solo había dos mansiones más de otras familias a kilómetros de distancia, por lo que las luces de la ciudad de afectaban la vista del cielo nocturno.

Comieron en silencio hasta casi terminaran, cuando Hoshino habló.

"Mañana llegará mi padre, no tienes que preocuparte por nada, él es bastante amable, comenzará a estar cada vez más en la casa desde que me dejó la empresa, por lo que lo verás seguido si estás aquí".

"Está bien, ¿mañana iré contigo?" preguntó Asier mientras comía su pastel de chocolate.

"No es necesario que vayas tan temprano, puedes aparecer cerca del mediodía, tu cuerpo aún necesita descansar" le dijo Hoshino con el ceño fruncido, después de todo el salía de la casa a las seis treinta de la mañana, era demasiado temprano para una persona que estaba en recuperación.

"Estoy bien, mira ya puedo mover los dedos para hacer las cosas básicas" le dijo Asier mientras movía el tenedor entre sus dedos en señal de demostración.

"Sigue sin agradarme la idea, ¿no te estas sobre esforzando?" le pregunto Hoshino preocupado.

"Para nada, así que…" dijo Asier en tanto que lo piraba con ojos de cachorro.

Hoshino no pudo resistir a la mirada del joven frente a él, en especial junto con todas las vendas, por lo que con un suspiro asintió en aprobación "Está bien, vamos juntos mañana, aprovecharé de presentarte a tu nuevo asistente y agente".

Asier se frotó la frente pensado, "¿No tenía un asistente antes? Estoy seguro de haber visto a un hombre que me ayudó con algunas cosas".

Hoshino: "En este momento necesitamos a una persona que se encargue de tus necesidades especiales, no puedes tener a cualquier persona".

"Tiene sentido" Asier asintió en entendimiento.

Ambos terminaron la comida, Asier quería tomar té, por lo que se quedó un tiempo más en el comer y Hoshino subió a trabajar al estudio, recordándole antes de irse que le avisara cuando quisiera subir hasta su cuarto.

Mientras tomaba el té una sirvienta que debía estar cerca de los cincuenta años se le acercó y se sentó en la silla a su lado derecho.

Asier la miró de reojo, sin saber que hacer, ¿Es normal que esto suceda? Nunca había pertenecido a la clase alta, por lo que sus semanas en la mansión Ricci eran su única experiencia y esta situación jamás se había presentado.

La mujer miró al joven a su lado, al ver que el silencio no se rompía, comenzó a hablar "Joven señor, puede darme un minuto de su tiempo" le dijo con una sonrisa amable.

Asier la miró directamente a los ojos buscando algo fuera de lugar, pero no había nada, solo cansancio y cortesía, por lo que aprobó "Claro".

"Mañana, ¿Qué le gustaría almorzar?" preguntó la mujer con una sonrisa.

"¿Eh?" exclamó Asier sin entender.

¿Es normal hacer este tipo de preguntas, en especial de esta manera?

Es siente un poco extraño, pero al mismo tiempo no tiene nada de malo…

"Queríamos saber si tiene algo que sea de su preferencia o cosas que no le agraden" dijo la mujer.

Asier lo pensó por unos momentos, estaba cien porciento seguro que su primer día en la mansión había entregado esta información al mayordomo a pedido de Hoshino, entonces ¿Por qué se la pedían nuevamente? Además, si llegara el caso en que se extraviara la información ¿no vendría el mayordomo en persona?

Algo definitivamente no encajaba, pero tampoco encontraba algo que pudiera favorecer al otro al pedirle esta información.

¿Estaba pensando demasiado?

¿La vida la había hecho ser en extremo desconfiado?

No, algo que había aprendido es que nunca se es demasiado cauteloso.

Pero entonces ¿Qué?, no podía pensar en ninguna razón.

La mujer tampoco mostraba nada en su rostro, ¿era demasiado buena fingiendo? Pero aun así ni siquiera los mejores actores se habían escapado de su análisis corporal.

Asier finalmente contestó "Oh, está bien, de todas formas, desde mañana no almorzaré en la mansión".

"Con que es así" sonrió la mujer, había notado desde el primer día que esta persona no estaba acostumbrada a tratar con sirvientes o no sabía ni notaba las cosas que las otras personas hacían correcta o incorrectamente, sin embargo, tampoco era estúpido, si le preguntaba la razón por la que no estaría presente, cualquier persona notaría que no podía hacer una pregunta tan personal, era mejor que el otro mismo le soltara un poco de información.

"Mn" dijo Asier sin comentar nada más, llegó a la conclusión: ya que no le gusta la situación no seguirá hablando.

Marcó a Hoshino a través del teléfono celular en su regazo, la otra persona no contestó, pero dos minutos más tarde estaba parado en el marco de la puerta mirándolo con una sonrisa brillante.

"Vine a escoltarte gatito" dijo Hoshino mientras se acercaba y le guiñaba un ojo.

La sirvienta se había levantado y marchado en el momento que había escuchado los pasos en la escalera, por lo que cuando Hoshino apareció Asier estaba solo terminándose su té con el ceño fruncido mientras pensaba profundamente en la situación anterior.

Hoshino le pellizcó la mejilla con ternura entretanto preguntaba "¿En qué piensas tan concentrado?".

Asier no podía decirle que una de sus sirvientas le había hecho preguntas extrañas, ¿había algo que pudiera hacer él? Después de todo no había habido ningún problema, decidió mirar y ver que sucedía, por lo que negó con la cabeza en dirección a Hoshino mientras le sonreía como si nada estuviera pasando.

Hoshino notó que algo le preocupaba, pero ya que no quería hablar de ello lo dejó pasar.

"Vamos te llevaré arriba" dijo Hoshino, y sin esperar su respuesta, tomó a Asier en brazos bajo su exclamación de sorpresa y lo cargó hasta la habitación.

"¿Quieres que llame a alguien para que te bañe y cambie de ropa?".

"¿Estás aquí no? ¿Por qué necesitas llamar a alguien más?" le dijo Asier inocentemente, aunque por dentro estaba pensando en sacar el máximo provecho a su situación actual, ya que no puede hacer casi nada por sí mismo, ¿Por qué no dejar que un chico guapo se encargue de él?

¡Si no estuviera en este estado ya se habría arrastrado en medio de la noche a la pieza del otro!

La vergüenza y timidez se puede guardar para más tarde, su lema es disfrutar del momento y luego preocuparse de las consecuencias.

Por supuesto, no se lo diría a la persona frente a él, después de todo ¿de qué sirve perder la cara si no va a conseguir ningún pedazo de carne? Si va a perder la cara de todas formas ¿no es mejor ganar algo a cambio?

De todas formas, sabía que el hombre frente a él no lo rechazaría, no lo había hecho en ninguna oportunidad hasta ahora, claramente era un tsundere.

Hoshino miró la expresión de inocencia fingida de la otra persona, ¡no se la creía en lo más mínimo! ¿Acaso este mocoso cree que no recuerda todas las veces que se lanzó sobre él? Mmm… pero él también quiere lanzarse encima del otro…

Se sentía incomodo permitiendo que otras personas tocaran el cuerpo del gatito y lo vieran desnudo, sin embargo, ¡él mismo no podía hacerle nada en el estado que estaba! Por supuesto que quiere bañarlo, pero ¿su autocontrol aguantará? Sabes… no es un monje… es más siempre se había jactado de su autocontrol sin importar que belleza se le acercara, mas siempre que estaba cerca de Asier su autocontrol era del tamaño de una uva, pequeño y fácil de romper.

Asier miró como el otro hombre se mantenía en silencio, y continuó presionando.

"Vamos, no quiero que otros me toquen" le dijo haciendo un pequeño puchero.

Hoshino se movió agitado en su lugar en el borde de la cama "Pero…" ¡No creo ser capaz de hacerlo!

Asier continuó presionando sin ninguna pizca de culpa "Solo quiero que tú me toques" le dijo mientras se mordía suavemente el labio inferior y lo miraba fijamente sin pestañar.

Hoshino quedó petrificado y sin habla.

¡¿Este niño lo está provocando?!

¡Claramente esto es provocación!

Todo su cuerpo se sentía tenso, endurecido y acalorado, ¿Cómo es que cada vez que entra en esta habitación algo sucede? ¿Tiene un incienso afrodisiaco en el cuarto o algo así?

Asier lo continuó mirando sin apartar la vista, mientras fingía sentirse profundamente agraviado y triste, incluso hizo que sus mejillas se sonrojaran levemente como un pequeño tímido y adorable.

Era una actuación perfecta, si Hoshino no conociera lo suficiente de su personalidad atrevida y desvergonzada, se lo habría creído sin dudar.

A pesar de que sabía que la actuación del otro era falsa, aún acepto.

Tuvo que apartar la mirada y respirar hondo antes de regresar la vista y volver a tomar a Asier entre sus brazos para llevarlo al baño, ya que la mirada llorosa del otro junto con las rojas mejillas le había dado ganas de presionarlo contra la cama y, hacerlo suplicar y llorar su nombre durante toda la noche.

Asier sonrió internamente al sentir el bulto bajo los pantalones de Hoshino cuando fue cargado hasta el banco del baño, orgulloso de no haber perdido su carisma y talento.

Cuando la tina fue llenada de agua caliente, Asier buscó una bomba de baño bajo el lavamanos, era de color naranja con un fuerte olor a cítricos y cuando fue arrojada dentro del agua, llenó el baño de olor a naranja, junto con grandes burbujas y un hermoso color damasco.

Hoshino miró la escena y entendió porque esta persona siempre tenía olor a naranja, aunque ¿el olor a chocolate que siempre lo acompaña de dónde viene?

El aromático olor del baño junto con el vapor que ya se había extendido por todo el cuarto, hizo que Hoshino se sintiera aun más acalorado y embriagado, este era el olor que siempre había sentido en la otra persona, y ahora que estaba en cada molécula de oxígeno que respiraba lo hacía sentir que se había sumergido en el cuerpo de la otra persona. La situación empeoró cuando tuvo que desvestir a Asier, quitó la camisa negra de manga corta junto con la tela/collar que siempre envolvía su esbelto cuello y vio las marcas en su cuerpo, su mente quería preguntar al respecto pero se detuvo, sin embargo, el cuerpo parecía tener vida propia y alargó la mano para acariciar cada una de las marcas con las puntas de sus dedos, cuando llegó a la del cuello, Asier sintió que todo su cuerpo se estremecía y soltó de forma inconsciente un gemido bajo, la sensación era tan buena que se estaba perdiendo en ella y la persona que antes se había reído por el fierro levantado ahora también estaba en la misma situación.

Todo el cuerpo de Asier se acercó inconsciente más cerca del toque del otro e hizo que el suave roce se transformara en una fricción más profunda.

Ambos estaban completamente metidos en la situación, olvidándose del agua caliente que esperaba ser utilizada.

Hoshino se acercó aún más al otro al igual que Asier, por lo que terminaron uno arrodillado en una pierna frente al banquillo con el rostro a solo unos centímetros del torso del otro que estaba sentado en el banco con la respiración agitada, los labios ligeramente abiertos y el pecho inclinado hacia el otro en busca de mayor contacto.