Así como nunca me canso de leer, eres como un libro cuyos misterios quiero descubrir, quiero desvelarme todas las noches palpando cada hoja, leyendo a través de ti, de tus pensamientos, de tus palabras, de tus líneas; leer cada página y grabármelas de memoria, recitarte en susurros, en anhelantes silencios; revelar indicios de locuras plagados en decadentes oraciones que parezcan incongruentes, grabarlas en una hoja y leértelas en noches de desencanto.