[8:28 am]
Caminé lentamente a lo largo del camino, para este momento han pasado cerca de 24 horas desde que comencé a perseguir a los bandidos.
Ya no puedo regresar al sendero principal, en algún punto ambos caminos paralelos divergieron, ahora no tengo más opción que continuar o solo perdería valioso tiempo en ambas misiones, pero lo cierto es... mi instinto me ha guiado hacia delante, como si fuera el único camino correcto.
Durante este tiempo encontré dos puestos de control de los bandidos, generalmente con dos o tres guardias, aunque fue un poco difícil elimine ambos lugares, después de todo no me gustaría terminar rodeado por ambos lados.
Además, si tengo un poco de suerte, podrían tener una forma de comunicarse, si eso pasa al no comunicarse pueden enviar a investigar... eso sería una excelente forma de reducir sus números.
Por eso me he mantenido fuera de visión al borde del camino, aunque ha sido difícil para mi pobre caballo, y he tenido que reducir la velocidad por ello.
Algo que he notado a lo largo de este tiempo, fue que desde que llegue a este mundo mi intención de pelear y matar ha aumentado de forma gradual, todavía recuerdo que cuando asalte el campamento de mercenarios, trate de escabullirme y no quise enfrentarme a casi ningún enemigo.
Ahora por otro lado, no pensé en dejar a ninguno vivo, es como si deseara matar a todos mis enemigos, probablemente esté relacionado con los efectos de la odisea.
Mis pensamientos vagaban sin rumbo al tiempo que avanzaba, pero no por ello rebaje mi vigilancia, pero extrañamente había pasado un tiempo desde el último puesto de control y aun no me había topado con nadie más.
Cuando estaba considerando el acelerar, escuche ruido desde los árboles delante de mí, rápidamente me oculte, y busque la fuente del sonido.
No tuve que esperar mucho antes de ver salir a dos hombres de unos arbustos, su ropa estaba desarreglada, su cabello alborotado, su respiración agitada y tenían una sonrisa obvia en la cara.
No necesito ser un genio para saber que hacían, la cuestión sería ¿con quién lo hacían? O....
No importa, no salió nadie más y ellos caminaron al sendero.
"Oye, ¿vamos al puesto o regresamos?" - uno de ellos propuso moverse, pero su tono indicaba lo contrario.
"Nah, solo digamos que fuimos y todo estaba bien" - declaró su compañero de manera contundente.
"Por mi está bien, aquí nadie se metería con nosotros" - el primero coincidió y comenzaron a caminar de nuevo por el sendero.
Esperé que la distancia aumentará y comencé a seguirlos.
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[12:08 pm]
PV: Lewis
Basura, para mi este lugar no es diferente a un basurero, todavía no puedo creer que una mocosa me haya obligado a huir hasta este lugar, por lo menos ella no sabía que hemos tenido negocios con los bandidos del norte durante años.
Las mujeres que nunca regresaron fueron enviadas por mí a este lugar, después de todo, estos bandidos trafican con esclavos por toda la frontera norte, y si les permitimos moverse nos dan una parte de sus ganancias.
Todos los guardias fronterizos participan en ello, así que es fácil conseguir un pase en el siguiente puesto, después será fácil con mi nivel ser contratado por cualquier noble.
Así que solo debo esperar un tiempo y podre regresar para encargarme de esa arrogante niña, sin embargo, primero debo salir de este basurero, el cual es el actual campamento de bandidos.
"Lewis, el líder te está llamando" - un bandido me llama desde la entrada de mi tienda, después de que mate al último que entro, ya no se acercan tanto.
"Muy bien, vamos" - salgo sin mayor complicación y camino hacia el centro del campamento, el cual es la residencia del líder bandido.
Caminando a paso lento, no tarde en llegar a mi destino, una enorme construcción de madera en el centro del campamento, todavía me sorprende que hayan creado este lugar en medio del [Bosque Antiguo], el campamento en si está cerca de ser similar al puesto fronterizo.
Es una muralla rodeando parte del lago, dentro de la cual construyeron lo que no difiere mucho de una aldea pesquera, probablemente de unos 50 metros de radio, y solo dos entradas o salidas.
Una por medio de un bote en el lago, y la otra lleva hacia el bosque, admitiré que fueron ingeniosos, ya que desde la salida debes caminar cerca de 500 metros antes de llegar al sendero usado por ladrones y traficantes, una vez en el sendero podemos avanzar a este u oeste, y el camino eventualmente nos llevara a la salida del bosque, desde la cual es sencillo llegar a los puestos fronterizos del reino.
Lo bueno de este sistema, es que a menos que seas parte de los bandidos o ellos te lleven, es muy complicado llegar a su campamento, las expediciones lanzadas por el reino y grupos mercenarios siempre han terminado en fracaso por estos motivos, por supuesto, jamás les diríamos la ubicación de los bandidos, eso significaría perder los ingresos que obtenemos de ellos.
…
Al final llegue a su residencia, sin necesidad de cortesía entre directamente, lo que llevo a encontrarme con la curiosa escena de una jaula con 10 cachorros de lobos azul pálido, estos pequeños animales chillaban y se movían inquietamente tratando de escapar.
"Así que realmente lo hiciste" - Declaré con fastidio cuando vi su mirada presuntuosa. - "algún día vas a terminar pagando caro por esto"
"Jajaja y tu pagaras por todas las mujeres que has arruinado... o espera, creo que ya lo hiciste jajaja" - se burló de mis palabras, pero no podía negar que tenía algo de razón.
"Entonces, ¿Qué quieres?" - pregunte con fastidio por su risa.
"Deberías suavizar tu actitud, o acaso no recuerdas como termino nuestra última pelea." - me amenazo, pero nuevamente no podía decir nada al respecto.
[Harry Espada Maestra Nv 39]
"Sigh." - Di un pequeño vistazo a su nivel nuevamente, solo puedo verlo como indignante, está a un paso del siguiente límite de clase, probablemente este hombre se convierta en el mejor espadachín de toda la región, solo por debajo del [Dios de las Espadas], después de todo ese hombre es el campeón de [Ares], y podría considerarse un semidiós.
"Saldrás mañana a medio día, mis hombres te llevaran hasta el límite del bosque, ellos tienen sus deberes, pero creo que no tendrás problemas tu solo." - Una vez que sus palabras terminaron, volvió a poner su atención en un mapa sobre la mesa.
Es una forma simple de decirme que me aleje, pero siendo sincero, no tengo motivo para quedarme y tampoco quiero hacerlo.
Di la vuelta y salí del lugar, así comencé a dirigirme de nuevo hacia mi tienda, no sin antes darle una mirada a la casa localizada cerca del lago, este era el almacén de suministros, donde se guardan las mercancías especiales de estos hombres... si el líder tiene los cachorros con él, significa que algo valioso debieron guardar en ese lugar.
"Al final no debería meterme en sus asuntos." - Dándome un consejo a mí mismo, seguí mi camino, pero por algún motivo no pude reprimir la inquietud que crecía dentro de mí.
Debería haberme ido directamente, sin quedarme con los bandidos.
Con esos pensamientos en mente continúe mi camino.
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[6:39pm]
PV: Jon
Recuerdo un famoso juego de mi mundo, su nombre era Fábula o algo así, si no me equivoco, en una misión debías entrar a un campamento a escondidas, para ello le quitabas su ropa y equipo a un bandido borracho, luego te infiltrabas por la puerta principal actuando natural.
Creí que algo así no serviría, pero no perdía nada por intentarlo, cuando seguí a los dos Bandidos "filósofos" terminé caminando lejos del sendero, pero no tarde en llegar a su campamento en el borde de un lago.
Una vez con el objetivo a la vista, me apresure a deshacerme de esos dos tipos, me puse su equipo y camine hacia la entrada, lo único malo, es que abandone la mayoría de mis armas, llevando solo un par de dagas y mi espada.
Usando al máximo mis habilidades de actuación, me moví como un borracho hasta la entrada, y una vez ahí, solo entre...
Los guardias me silbaron y se burlaron, pero parecía algo común mi actuación y no me cuestionaron más.
Supongo que mi peste a alcohol también ayudó, los soldados me dieron unas botellas cuando salí del campamento y por fin les di uso.
Me disculpe en mi mente con los creadores de ese fantástico juego, y rápidamente me mantuve con la cabeza baja, camine hasta el borde del lago y "vomite".
Luego de eso, me coloqué en una orilla y fingí dormir, esto dio un buen resultado, ya que cuando se acercaban a mí, la peste a alcohol y el vómito los ahuyentaban rápidamente.
Así me mantuve hasta que oscureció, algo que pude notar desde mi posición es que hay una salida secundaria por bote en el lago.
Eso fue algo afortunado, ya que mi objetivo era eliminar la mayoría de bandidos, y no quisiera que huyeran por agua.
Con eso en mente me acerque a los pequeños botes pesqueros, y comencé a dañarlos haciendo agujeros o empujándolos dentro del lago, una vez que termine, camine en la oscuridad hacia el primer edificio cercano, la cual era una pequeña cabaña.
intente entrar, pero la cadena en la entrada me lo impedía, por un momento pensé en abrirla, pero el ruido que provocaría sería suficiente para que me notaran, así que abandone la idea y comencé a caminar hacia las carpas y edificios de los alrededores, iniciando por los más pequeños o rústicos.
Después de todo, lo que haría, sería algo que coincidiría más con las habilidades de Hanna, en lugar de las mías, aun actuando ligeramente como un borracho entre en una pequeña habitación donde había 3 hombres acostados en sacos de dormir, rápidamente reduje mis movimientos y lentamente me acerque al primero, me hinque a su lado antes de colocar mi mano izquierda en su boca, al mismo tiempo que corte su garganta con la daga en mi otra mano.
Un proceso que repetí una y otra vez, hasta que aparte de mi en la habitación no quedaba nadie vivo.
Rápido y en silencio, así comencé a moverme a mi siguiente destino, que, por el tamaño del lugar, me temo que sería una larga noche, pero no es como si tuviera algo más que hacer.
Uno por uno, coseche sus vidas en la fría oscuridad, con solo la luna como mi testigo.
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[11:51 pm]
Sangre... sangre y más sangre, en algún momento mi visión se tiño con tal, me moví más rápido, fui más preciso, y cuando recuperé mi claridad, mis manos se habían vuelto rojas.
Casi llegue a cuarenta, mate treinta y ocho hombres en sucesión, pero mi suerte se acabó, algún guardia errante toco la alarma y ahora los restantes están buscando en el campamento, tratar de enfrentarlos a todos sería muy difícil, así que usare un viejo plan para atraerlos.
"¡Alto ahí!, no te muevas." - un grito repentino me sobresalta, y al girar mi visión puedo ver a dos soldados que se dirigen en mi dirección.
"Ayuda." - Para mí fortuna, mi ropa esta manchada de sangre, y mi cuerpo recargado en la pared de una casa, así que desde su posición parece que soy alguien de su lado, que está a punto de morir.
"Rápido, trae al curandero." - corriendo hacia mí, le grita a su compañero y se apresura a sostenerme.
Antes de que pueda seguir hablando, hundí mi daga en su estómago, y doy un golpe rápido en su cuello para evitar que grite, el me observa con incredulidad cuando la vida escapa de su cuerpo.
Sabiendo que agoto mi tiempo, avanzo rápidamente hasta el almacén cerca del lago, moviéndome entre las sombras de los alrededores, y evitando los pocos hombres en el camino, llegue rápidamente a mi destino.
Sin más demora, saco mi espada y doy un tajo sobre el candado. "Clang" El golpe resuena en la noche, pero al menos lo hice con la suficiente fuerza para abrir el almacén, sin pensarlo más, observo el interior del mismo y no pude dar un pequeño suspiro por lo que encontré.
"Esos malditos." - Dentro de este almacén había cerca de 10 mujeres encadenadas a las paredes, no tuve tiempo de examinarlas o considerar más la situación, peor aún no tenía una fuente de luz y no podía ver completamente el entorno.
"¿Q-que quieres?" - una voz cansada responde a mis anteriores palabras desde la oscuridad, sin embargo, mi tiempo se agotaba.
"Soy un aventurero, las voy a ayudar, pero necesito que grites, que crean que estoy dentro." - con esas palabras y sin esperar su respuesta, salgo rápidamente y camino atrás del almacén.
No tenía muchas expectativas de que me creyeran, pero tampoco perdía nada intentándolo, unos segundos después, escucho los pasos de los bandidos acercándose.
"A-aléjate, ¡monstruo!" - cuando consideraba mi siguiente movimiento, un pequeño grito sale desde el almacén.
girando alrededor del edificio, veo como cerca de 5 hombres llegan y dos entran rápidamente al lugar, mi pulso se acelera y mi cuerpo se llena de fuerza, entendiendo el significado me lanzo hacia delante.
Un tajo rápido corta la cabeza del primer hombre, cuando el segundo gira por el sonido, mi daga ya estaba frente a él, y se incrusta profundamente en su ojo.
El más cercano a la puerta, ya había cargado contra mi cuando me vio apuñalar a su compañero, sin perder la calma, espero a que acorte la distancia y uso mi habilidad.
[Grito de Guerra]
"¡Ven!" - esto lo paraliza durante un segundo, el cual uso para hundir mi arma en su pecho, con lo cual los tres soldados han caído.
"Impresionante, me sorprende que alguien de tu nivel haya logrado esto." - Desde la entrada del almacén un hombre me elogia mientras observa a sus compañeros caídos.
Revisando su estado, descubro que es de nivel 39, lo cual provoca que mi cuerpo comience a tensarse involuntariamente.
"También me impresiona, un simple ladrón llegando a ese nivel... deberías haberte quedado en el reino." - respondo, a la vez que controlo mi respiración y comienzo a planear mi próximo movimiento.
"Estas equivocado chico, soy el líder de los bandidos, no un ladrón cualquiera." - Con el ceño fruncido sale totalmente del almacén y se para frente a mí.
"Ladrones, bandidos o asesinos... son lo mismo, todos siempre caen igual." - Di una pequeña disculpa a Hanna en mi mente, después de todo no quería que me atacara en la oscuridad.
"Tch. espero que lo respaldes niño" - con enojo en su voz, comenzó a caminar en mi dirección.
Lo había enojado.
Ese después de todo, era el primer paso de mi plan.
Y lo que llevo a la caída de los bandidos del norte.