PV: Hefesto
Mi nombre es Hefesto, soy la diosa de la forja y la creación, para ser precisa soy la Septuagésima cuarta (74) bajo el título de "Hefesto".
Los dioses no somos inmortales, al menos no completamente, si bien gozamos de una vida eterna, aun podemos morir.
Las formas de matar a un dios son contadas, entre ellas está un conflicto entre seres divinos, en pocas palabras un dios puede matar a otro dios, no podemos olvidar que ciertos dragones han logrado obtener el poder de matarnos, y también está el enemigo natural de los dioses, los demonios.
Estos tres son los principales peligros para la vida de un dios, sin embargo, la principal razón de mi estado actual es la improbable pero aun posible forma más triste de morir para un dios.
Eso es... un [caído], básicamente cuando un dios le otorga su poder a un mortal, este puede adquirir parte de su divinidad, en otras palabras, se convierte en su [Campeón], o llegando más lejos en un [Semidiós].
Sin embargo, cuando un Campeón o un semidiós adquieren suficiente fuerza, pueden traicionar a su dios, esto los convierte en caídos, seres con el poder de dañar a los dioses.
"Sigh." - No pude evitar soltar un suspiro cuando observaba al hombre que designé como mi campeón, era alguien... diferente a lo esperado.
Este Joven tenía la bendición de [Fenrir], al menos eso pensaba, por eso decidí elegirlo como mi campeón, el problema es que el mismo dios [Loki] decidido darle su bendición, lo que significa que dos seres divinos le están dando parte de su poder, sin olvidar a Fenrir quien es una bestia divina.
Cuando lo note, era tarde para retractarme, el mayor problema es que los elegidos por Loki son... impredecibles, el último de ellos fue un hombre respetable que alcanzo la cima de los humanos, tanto en poder como en estatus.
Este Rey domino su región con Justicia, pero un día simplemente enloqueció masacrando a la mitad de su gente, se volvió un tirano perseguido por todos los héroes y campeones del continente, al final huyo hacia el continente de los demonios, y Loki su dios en aquel momento fue castigado por los dioses de su Panteón.
Hasta donde sé, ese semidiós sigue vivo y el actual Loki debería ser el encargado de eliminarlo.
En fin, cuando me di cuenta de que este hombre era el elegido por Loki, decidí vigilarlo yo misma, después de todo si realmente existe la posibilidad de que se vuelva un caído, debo estar preparada.
El problema es... acaba de cometer un asesinato en masa, cerca de 50 hombres han sido eliminados por él, aunque todos eran criminales, no levanto una ceja mientras sesgaba sus vidas, por sus acciones debería haber sido un [asesino], y sin embargo su clase está centrada en un [espadachín].
Aun así, es sorprendente que su misión este llegando a su final tan rápido, puedo entender porque Fenrir lo bendijo, después de todo no es muy diferente a un rastreador, si no supiera que es un Humano, bien podría pasar por un semihumano.
Su nombre es Jon, un joven de nivel 17.
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"Clang" el repentino ruido me saco de mis pensamientos, cuando observe pude ver como la batalla llegaba a su clímax, actualmente solo quedaban dos enemigos frente a él.
El líder de los bandidos comenzó a correr contra Jon, este corre ligeramente hacia el para confrontarlo, el bandido lanza un tajo horizontal, pero Jon se desliza bajo la espada.
Cuando el bandido lo nota, Jon ya se encuentra a sus espaldas, y sin esperar un momento hace un giro sobre su propio eje, golpeando con su espada hacia la espalda de su enemigo.
Con pánico en su mirada, el bandido coloca su brazo rápidamente hacia atrás con el objetivo de bloquear el tajo, sin embargo, subestimo la fuerza de Jon, ya que la espada se incrusta en el brazo izquierdo del hombre y ofreciendo poca resistencia lo termina amputando.
El brazo cae al suelo y el bandido rápidamente crea distancia entre ambos, su expresión muestra ira, pero no puede hacer nada más que ver como sigue desangrándose.
En el momento que baje su guardia para tratar su herida, Jon atacara y acabara con él, por tanto, decide ir con la única opción posible.
Poco a poco comienza a acumular energía, sin duda listo para usar su habilidad final, por lo que mis ojos me dicen, debe ser [Corte Flash] una técnica avanzada que permite lanzar un Tajo a una muy alta velocidad, algo a lo que pocos pueden reaccionar.
"Te matare desgraciado. [Corte Flash]" - insultándolo para llamar su atención lanza su golpe.
Un borrón es lo único que se ve, cuando la espada se dirige hacia Jon, sin embargo, sus ojos cambian de color por un breve momento cuando el también activo su habilidad [Último Recurso].
"Clang" resuenan sus armas cuando hacen contacto, y lo que queda al final son los dos hombres parados de espaldas, sosteniendo sus espadas en alto por el cruce que tuvieron un momento atrás.
Pero a diferencia de antes, el bandido ha dejado de sonreír, después de todo su arma se ha reducido a la mitad, por su torso comienza a aparecer una fina línea de sangre.
"Así que este es mi final... podrías decirme ¿Quién eres?" - Cayendo de rodillas pronuncia estas palabras hacia Jon.
"Soy quien acepto la última voluntad de un Lobo..." - cuando pronuncia esas palabras, el bandido muestra una expresión de sorpresa y pesar antes de caer al piso.
Pude ver como su vida llego a su fin.
Jon lo observa un momento antes de llevar la mano a su mejilla, ahí hay un corte ligero del cual la sangre comienza a salir, eso significa que, si no hubiera contratacado en ese momento, habría perdido su cabeza sin duda.
Después de limpiar la sangre, dirige su mirada hacia el almacén donde ha aparecido otro hombre en la entrada, cuando lo ve ahí, muestra por primera vez desde que llego al campamento una expresión de asombro.
Después de todo, el hombre ante él es Lewis, el excomandante a quien vino a cazar a este bosque, y ni hablar de la expresión de Lewis, quien tiene la cara pálida.
"T-tu.... ¿Qué haces aquí?" - pregunta con asombro al notar al joven quien fue el preludio a su caída.
"Una rata escapo y la seguí hasta aquí para eliminarla." - Responde Jon mientras prepara su cuerpo para el combate.
"¡Mph!, un simple aventurero no puede pelear contra mí." - sin darse cuenta de la situación en la que se encuentra, y más aún del cadáver a sus pies, insulta a Jon para suprimir el nerviosismo.
"Dime ¿Dónde están los caballeros?, ¿a quién más envió esa perra?" - con la tensión aumentando en su cuerpo, busca a su alrededor otros potenciales enemigos.
Es entonces que su mirada se cruza con el cadáver del Líder de los Bandidos, el mismo hombre que en circunstancias normales no podía imaginar vencer.
Cuando lo ve en el suelo, su corazón se acelera al sentir la fría caricia de la muerte, rápidamente gira su mirada buscando desesperadamente al asesino, pero al final ante el solo hay un hombre en medio de la oscura noche.
Este hecho lo lleva a darse cuenta de la realidad de su situación, tristemente para él lo absurdo de la misma no cambiara el resultado.
Sin decir una palabra, Jon avanza hacia Lewis, puedo ver que su habilidad comienza a agotarse y entendiendo que lo golpeara el efecto secundario, apresura su ataque.
Lewis se pone nervioso y trata de atacar lanzando golpes al azar, sin embargo, en el estado sobrecargado en el que se encuentra Jon, esquiva fácilmente los golpes, solo dando ligeros pasos, al igual que un verdadero espadachín, y así sin más llega ante Lewis.
"E-espera puedo dart..." - las suplicas son interrumpidas cuando la espada de Jon se clava en su pecho, con ese golpe acaba la Sobrecarga de Jon, y su cuerpo comienza a debilitarse.
El cuerpo de Lewis cae al suelo, desprovisto de la vida, y poco después Jon se recarga contra la pared mientras se desliza hasta quedar sentado.
"Oigan, creo que lo logre, déjenme descansar un momento e iré a sacarlas de ahí." - Hablándole a las chicas dentro del almacén, Jon cierra sus ojos y trata de regular su respiración.
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"Es impresionante ¿verdad?" - Una voz me sobresalta cuando miraba el final del combate de Jon, al mirar hacia atrás puedo ver a una hermosa mujer caminar en mi dirección.
"¿Quién eres?, no perteneces a este Panteón y no recuerdo haberte invitado a mi hogar." - Sin prestarle mucha atención vuelvo a mirar el espejo frente a mí, el cual muestra la situación de Jon.
La razón de esto, es que solo un dios o en este caso diosa, estaría interesada en hablar conmigo en este preciso momento.
"Por favor, no finjas, después de todo eres tú quien trata de robar mi campeón." - parándose a mi lado, comienza a observar lo que muestra el espejo.
"Además debes admitirlo, el sin duda tiene el aura de un Héroe." - Loki declara viendo con clara codicia el reflejo de Jon.
"¿Por qué lo elegiste?, no parece tener el aura de la diosa del caos." - al ver que Jon se recuperaba, decidí cuestionar a Loki.
"Te equivocas, ese hombre podría ser la más grande calamidad que haya llegado a este mundo." - Me responde con una brillante sonrisa en su rostro.
"A que te refieres, tu misma dijiste que tiene el aura de un Héroe, porque lo elegirías si es una calamidad." - Sintiendo una ligera ansiedad, vuelvo a cuestionar a Loki.
"Por la misma razón que tu Hefesto, ese hombre jamás dañaría a quienes ama, no es diferente de un Lobo y su manada." - Dándome una extraña metáfora, continua sus palabras. - "Pero lo contrario también aplica, si dañan su manada no dudara en perseguir a su enemigo hasta eliminarlo."
"No existe un mejor Campeón para nosotras que él, por eso debes ayudarme a protegerlo Hefesto." - Loki insinúa mientras gira para retirarse. – "Solo hasta que crezca lo suficiente"
Al terminar sus palabras no pude evitar permanecer un momento en silencio, había mucho que considerar en realidad.
"Solo piénsalo, y avísame cuando decidas, ya que si me quedo más tiempo los Dioses sospecharan." - con esas palabras desaparece en el arco de entrada de mi templo.
"Sigh." no pude evitar soltar un suspiro al pensar en lo complicado que se volvería toda esta situación.
Mi primera opción fue consultarlo con Athena, pero tristemente ella ha desaparecido desde hace ya un tiempo.
Ahora que debería hacer.
Fueron mis últimos pensamientos antes de volver a mirar el reflejo de Jon.
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[1:15 am]
PV: Jon
[Misión Oculta: La Odisea del Lobo]
[Capitulo 1 - El Martillo de la Justicia (Hefesto)]
[El Joven lobo rastreo a su enemigo con astucia e inteligencia, al cual logro acorralar en medio del Bosque Antiguo.
Pero su enemigo no estaba solo.
Rodeado por una fortaleza de bandidos, aumento la dificultad para el Joven lobo
Sin embargo, contra todo pronóstico, atravesó las defensas de la fortaleza
Eliminando a todos los enemigos, llego al final
Frente a frente, combatió en un duelo contra el líder de los bandidos
Y al finalizar termino con la vida del criminal Lewis
Trayendo paz a las pobres mujeres atormentadas por estos hombres
Ganando con ello el Afecto de Hefesto.]
[Favor de Hefesto]
[La diosa de la Forja y la Creación, te ha otorgado su Favor, este es un grado superior de Bendición, otorgado solo a quienes consideran dignos de su aprecio.
Aumento Pasivo de Fuerza +10
Resistencia al fuego 30%
Aumento Pasivo en habilidades relacionadas con la manufactura.]
Cuando leí el mensaje en mi visión confirmé la muerte de Lewis, ahora podía regresar a casa, no habían pasado muchos días, pero sin duda los extrañaba.
Pero antes de volver, tenía que resolver los problemas frente a mí.
Con eso en mente reuní mi fuerza y volví a levantarme, una vez de pie camine hacia el cuerpo del bandido muerto, y busque algún indicio de llaves o algo.
Tristemente no fue como en películas o historias, y el sujeto no traía convenientemente las llaves en su cuerpo.
Sin más, regrese y tome la espada larga de Lewis, una vez confirme su peso, me dirigí hacia las cautivas que me miraban con ligero temor.
"Tranquilas, no tengo las llaves, pero esto debería servir." - al terminar mis palabras, me detuve, ya que las cadenas sobre las chicas... estaban demasiado cerca de sus cuerpos.
"Lo siento, quizás debería buscar de nuevo." - con vergüenza en mi rostro salí de la habitación y camine en busca del hogar del bandido.
Fingiré que no escuche risitas de esas chicas, si... seguro fue por el temor de que las abandone.
Haciendo a un lado mis pensamientos, me apresure hacia la casa en el centro del campamento, la cual sin duda era el lugar del líder.
"Auuu..." - al acercarme pude oír los pequeños aullidos de los cachorros, aceleré el paso y al entrar los vi en la esquina de la habitación dentro de una jaula.
Busqué rápidamente las llaves, y para mi sorpresa... no las encontré.
"Ese hijo de p.... debí dejarlo vivo hasta que me diera las llaves." - al no encontrar lo que buscaba, opté por usar la fuerza en la jaula, ya que para mí fortuna el líder tenía algunas armas, entre ellas unas mazas.
"Clang" El sonido agudo del metal contra el metal, con eso como indicador el candado en la puerta de la jaula se abrió... o destrozo.
"Auu" los pequeños lobos se lanzaron sobre mí y comenzaron a lamer mi cara, no lo entendía por completo, pero ellos parecían saber porque llegue aquí.
Después de unos momentos jugando con los pequeños, recordé mi propósito al venir aquí, y comencé a buscar las llaves de nuevo.
[3:01 am]
Después de un largo tiempo por fin logre encontrar las llaves, uno de los cachorros termino encontrando un escondite sobre el piso de madera, el cual contenía las llaves que busque, y no solo eso, sino también algunos documentos comprometedores sobre transacciones realizadas por estos bandidos.
En fin, con las llaves en manos, volví al almacén, donde las mujeres tenían miradas ansiosas posiblemente creyendo que algo me paso o que las abandone.
Tanto así que, al verme, algunas comenzaron a sollozar en silencio.
Después de tranquilizarlas comencé a liberarlas de sus cadenas una a una.
"Oye, ¿de dónde sacaste a estos cachorros?" - me pregunto una de las chicas mientras quitaba las cadenas de la última chica.
"Los bandidos mataron a su manada, yo vine aquí siguiendo el rastro." - Les empecé a explicar los sucesos que me llevaron hasta mi punto actual.
"E-entonces ¿no te enviaron por nosotras?" - la triste pregunta de una de las chicas, no pude contestarla.
Ellas entendieron mi silencio, y algunas volvieron a sollozar.
"No importa el motivo por el que llegaste aquí, nos salvaste... eso no cambiara" - reconocí la voz de la chica que hablo, si no me equivoco ella fue quien grito y distrajo a los guardias.
"Está bien, podemos hablar después, primero hay que salir de este lugar." - instándolas a caminar fuera del almacén, camine primero y las espere en la entrada.
Lo que paso después me dejo sin palabras, ya que un grupo de chicas jóvenes salió de esa oscura habitación, con la luna iluminando sus cuerpos, pude apreciar que solo tenían pequeñas telas cubriéndolas y eso no fue lo que me quito el aliento.
Entre el grupo de chicas, vi por primera vez desde que llegué a este mundo a un elfo.
Un Elfo Oscuro.