Me gustaría saber cómo es posible que en un momento estuviera a bordo de un vuelo en camino a una nueva vida y en el siguiente estoy en un bosque corriendo a cuatro patas. No es un lugar en donde recomendaría a nadie estar. Es un bosque oscuro, casi sumergido en la penumbra del anochecer, y mi tamaño actual dificulta mi movimiento entre los árboles.
Ni siquiera sé que animal se supone que soy, no he encontrado ninguna fuente de agua que me deje ver mi reflejo. Solo sé que cuento con un pelaje naranja con blanco y tengo pequeñas rallas negras. ¿Tal vez soy un tigre? No lo sé, si lo soy, debo de acabar de nacer ya que mi tamaño es considerablemente más pequeño que el de los árboles a mi alrededor.
Con la noche acercándose y la luz alejándose me doy cuenta de la situación tan grave en la que me encuentro, debo de encontrar un refugio rápidamente. Aunque, con mi nuevo cuerpo cuento con una visión nocturna mejorada y una rapidez superior a un humano promedio. Soy un simple cachorro y cualquier animal podría estar asechándome en las sombras.
Con escaso conocimiento sobre las noches en los bosques, consciente de sus aterradoras características y los peligros que esconden, decido probar suerte escalando un árbol. Se dice que estos son más seguros que la superficie y ofrecen una vista más clara del bosque. ¿Los tigres pueden trepar árboles? La verdad es que no lo sé, pero supongo que pronto lo averiguaré.