Buenos días, buenas tardes o buenas noches. Eso depende de la hora en la que empiezas a leer esta mi historia.
Pero desde ya te avisó que está historia no es para personas débiles, así que si advertido estás.
Mi nombre es Vetgod, y nací en una pequeña ciudad llamada «La ciudad del oro negro», perteneciente al Reino Piura¹.
Formó parte de una familia de mercaderes en la cuál soy el segundo a cargó del negocio pues desde pequeño mostré un gran talento en el comercio. Un talento que se queda corto si se compara con mi talento para la magia. Es por eso que a la edad de 16 años mi padre me envió al mejor instituto mágico de la ciudad, «La real academia mágica», una académica que está presente en casi todas las ciudades y que está conectada a la realeza. Y antes de que lo olvidé dicha academia sólo acepta estudiantes que tengan un talento mágico de grado B, A, S,SS, SSS.
Y si alguno se pregunta porque a la edad de 16 años voy a dicho instituto les diré que la edad general de los nuevos estudiantes es esa.
Y mi talento mágico es de grado A, un grado que solo una de cada mil personas tiene. Y mi historia inicia justo en el día que llegué al instituto.
Por cierto olvidé mencionar que escribiré en primera persona y en tiempo pasado pues ya llegando al final de mi vida quiero dejar mis memorias para quien sea que encuentre este texto. Sólo espero que esta mi vida no les cause problema alguno y al menos logré distraerlos de esa su PUTA Realidad.