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Chapter 9 - No Fue Mi Culpa

"El sentimiento de libertad estaba en el aire. Las ramas que no habían llegado a ser cortadas rascaban las ventanas haciendo sonidos escalofriantes, pero estaba bien, porque desde adentro se podían observar los gusanos que se arrastraban en el frío. Y eso estaba bien. Significaba que yo podía saber lo que ellos sentían. Dentro de mi habitación se había introducido una mujer. Tenía los ojos inyectados en rojo, y sus manos temblaban casi como las ramas de mi ventana. Ella me veía y sus ojos escurrían y se acercaba poco a poco. Damira a lado de la puerta me veía de manera casi paranoica. Temía por mi vida y yo también. No pensé que podría hacerme mucho con sus manos, pero una mujer que ha estado encerrada por más de 20 años con nada más que sus pensamientos, puede ser muy peligrosa. Llegas a un punto donde la estimulación física es la única que te da señales de estar vivo. Ella tenía señales de recurrir al dolor. En sus nudillos había un tono azulado".

"La mujer murmuraba palabras incomprensibles, no se detenia, su respiración se volvía cada vez más fuerte. Se acercaba casi como si su cuerpo estuviera cargando con un traje de un metal pesado, sus extremidades parecían derretirse con cada movimiento."

-Marlene- f...fuist..te tu, no es así? Te vi! Tu los arrojaste al fuego mientras gritaban con terror, se ahogaron dentro por el humo, y tu los dejaste morir...maldita rata

-...que….

-Marlene- te vi! Estabas allí! Con ellos, y los dejaste morir, escuchaste sus gritos y no hiciste nada!

-hace cuantos años paso eso! Estas mal! Yo no hice nada...asi que vete….

-Marlene- Maldita rata, no puedes siquiera aceptarlo, murieron por tu culpa, y ahora los dos estamos aquí!

"El chico lo comprendió, había escuchado de este tipo de casos por las enfermeras. Las mujeres tomaban de sus envases de café negro mientras hablaban de detalles confidenciales al frente de él como si el no fuese algo que pudiera escuchar. Una mujer había perdido sus tres hijos en un incendio".

"En ese momento pensé, Claro! Esta zorra busca a quien culpar y quitarse ese peso de encima. Eres tan incompetente que ni siquiera puedes aceptarlo, de verdad eres patética…"

-Maelene- como te atreves, eran mis niños, y los mataste!

La mujer perdió fuerza y sus rodillas se doblaron dejándola caer al piso. Con la fuerza que pudo sacar de su rabia se arrastró hacia Vermothel quien la observaba con la misma expresión que le daban las enfermeras. La mujer con manos de apariencia senil tiraban del pantalón de el chico. Ella hacía el intento de causarle daño pero sus zapatos de protegían. Con las uñas mordisqueadas y casi diminutas logró causar rasguños que lograron exponer la sangre de Vermothel. Esta escurría por sus dedos y ella disfruto de su victoria por algunos segundos. La mano del joven quien había retenido su rabia la tomó del cabello y la arrastró hacia la ventana. De manera que ella pudiera ver hacia el exterior tiro de su cabello y mientras sus oídos estaban expuestos susurro a su oído

-eres tan patética que viniste a mi! Pensaste que un pedazo de basura miserable como yo aguantaría tus delirios? Te equivocas Marlene, lo que tenemos los bastardos como yo es que podemos ser tranquilos si así lo queremos, pero también podemos ser ratas inmundas. La razón es porque a este punto hay pocas cosas que nos importen, ir a la cárcel por matar...no sería un castigo lejano de lo que estoy viviendo ahora…

Mientras el rostro de Vermothel estaba a centímetros de el de Marlene, ella pudo presionar con las uñas de sus dedos el cuello de Vermothel, bloqueando así su respiración. La voz del chico se fue diluyendo hasta que se volvió vacía. La mujer continuó presionando con todas sus fuerzas,

-Marlene-ang… callate! Callate, no hables, callate!...

-(De manera casi inaudible)Es hora de que te lo digan. Tus hijos están muertos por tu incompetencia como madre. Y estas aquí culpandome de todo porque en el fondo sabes que no hay manera de que nadie aqui te crea. Incluso Alice deve estar cansada de tu maldito balbuceo, pero lo aguanta, sabes porque? Porque tarde o temprano te vas a colgar de ese árbol que ahora mismo estás viendo. Y todos disfrutaremos ver tu cuello volverse de colores azulados decorados con una soga.

-Marlene- Callate!

-Me mataras? Como mataste a esos niños ? Tu lo sabes mejor que nadie, se intoxicaron con humo...ooo, tu los ahogaste con tus manos….

-Marlene- ….que? … yo…..yo no lo hice…

Mientras ella se alejaba del chico, un ataque de panico tomo parte de su cuerpo. Comenzó a temblar y murmurar para sí misma.

-Marlene-y..yo….yo lo hi...hize…

-entonces lo recuerdas?...cómo se siente, perder todo lo que tiene valor en tu vida en una noche. Y lo peor es que todo es tu culpa.

Vermothel sonrio y abrio la ventana. El aire de invierno se introdujo al cuarto. La mujer observaba algo más allá de la ventana. A lo blanco en las montañas. Poco a poco con pasos cortos se acercó a la ventana

-Marlene- devo saltar?

-.....

Marlene asomo su rostro como si buscará algo, no sabía que pero sentía que debía hacerlo. Vermothel acercó su mano a su espalda y con fuerza presiono su peso contra ella provocando su caída.

Damira observaba. Con sus labios impedía que su sonrisa lograra mostrarse, pero era inevitable, su rostro demostraba aprobación. Incluso mordiendo la parte interior de sus labios, incluso abriendo la carne con sus dientes, no pudo evitar sonreir en rojo como una desquiciada.

Vermothel inmóvil observaba con terror desde su balcón. Sus lágrimas se regaban por sus mejillas mientras sus manos temblaban.

-Damira-... Bueno, no podemos hacer

más, ella entró buscando problemas, sumergió sus uñas en tu carne provocando sangrado y al tratar alejarte ella perdió el balance y se callo.

-Eso… Eso no está bien...

-Damira- y que Importa? Era escoria de todas formas

-..... Yo….. Yo hice esto…

-Damira- entonces diles….Diles lo que pasó, pero te aseguro que yo no te acompañare en el pozo, estarás solo, como siempre lo has estado. Alice te conocerá como el psicópata que intentó matar a una mujer mentalmente inestable. te arrepentirás de ser honesto ahora. La honestidad no te llevará más lejos del pozo, ni más lejos del portón. Tu mejor que nadie lo sabe, no saldremos de aqui jamás si no es por las malas, y tenemos que empezar a cabar el camino para salir. Saldremos a morir como locos dezquisiados? O nos pudriremos aquí?