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Chapter 15 - Capítulo 15 – Sintiendo Pena Por Su Cara.

Nadie esperaba que Yu Yuehan regresara a esta hora.

Durante un corto periodo de tiempo, todos los presentes en la sala de estar levantaron sus cabezas en dirección hacia él.

El mayordomo fue el primero en entrar en razón y se le aproximó inmediatamente, haciendo una respetuosa reverencia. —Joven Amo.

Yu Yuehan observó detenidamente a todas las personas presentes en la sala de estar, pero, al mismo tiempo, ignoró intencionalmente a Nian Xiaomu, ya que ella podría afectar sus emociones.

En ese momento, abrió su boca ligeramente y preguntó, —¿Qué está sucediendo?

Luego de esa pregunta, el asistente ubicado detrás de él se tambaleó y casi se cae.

Observó a su jefe, estupefacto.

Ellos ya habían escuchado suficientes comentarios mientras estaban afuera, justo ahora, pero el Joven Amo estaba tan ocupado ¿Le daría incluso importancia a un asunto tan trivial?

¿O era por quééste asunto involucraba a la Pequeña Señorita? O fue porqué…

Cuando las dos palabras "Nian Xiaomu" pasaron por su mente, el asistente tembló.

¡Debe ser su imaginación!

—Joven Amo Han, ocurrió lo siguiente: justo cuando recibí la guardia, me percaté de que alguien había manipulado las medicinas de la Pequeña Señorita; estaban mojadas —. Sin sentir vergüenza, Fang Zhenyi se paró justo delante del mayordomo y habló.

Sus ojos se ampliaron en el momento que observó a Yu Yuehan.

En vista de que él estaba cuestionando en éste instante, ¡¿cómo podría desperdiciar la oportunidad dorada de darse a conocer, calumniando a Nian Xiaomu al mismo tiempo?!

Al terminar su frase, ella notó que sus acciones parecían muy desesperadas. De inmediato levantó sus manos y se secó las lágrimas inexistentes de sus ojos. —Acabo de distraerme. Disculpe Joven Amo Han. Simplemente, estaba muy preocupada por la pequeña señorita..

Ella creyó que, incluso si él no recordaba a una persona tan insignificante como ella, Yu Yuehan (por lo menos) iba a reprender a Nian Xiaomu debido a sus preocupaciones por su hija.

Pero quién sabe, ni siquiera reaccionó un poquito con lo que ella había dicho.

Así tal cual, él pasó junto a ella y se detuvo frente a Nian Xiaomu.

—Tú lo explicarás.

Esa voz fría e indiferente parecía magnética. La escuchaba inesperadamente placentera en sus oídos.

—…

Había sentido una llama en su corazón, pero ahora se sentía un poco anonadada cuando oyó su voz.

¿Qué acababa de decir en ese instante?

¿Por qué su tono no era de interrogación?

¿Sería porque no creía en las acusaciones de Fang Zhenyi, por lo que le permitió a ella ofrecer una explicación?

Por alguna razón, hubo un rastro de afecto en el corazón de Nian Xiaomu.

Incluso la rabia que aprisionaba en su pecho se había calmado considerablemente.

—No fui yo quien mojó la medicina…

—Nian Xiaomu, ¡¿cómo te atreves a seguir mintiendo en la cara del Joven Amo Han y no admites tus errores a estas alturas?!

Justo cuando Nian Xiaomu comenzó a explicar, Fang Zhenyi se adelantó apresuradamente.

—Joven Amo Han, sólo estábamos nosotras dos en la habitación justo ahora. Cuando ella abrió el kit de medicina, su contenido ya estaba empapado. Lo vi con mis propios ojos ¿quién más podría ser aparte de ella?

Xiao Liuliu era la Pequeña Señorita de la Familia Yu. Su posición era muy honorable.

No había cámaras de seguridad en la habitación, por lo que dependían de lo que ella había dicho en relación con el incidente.

Un gesto de orgullo se observó en sus ojos, y continuó parloteando, añadiendo más y más detalles.

—Joven Amo Han, hay más…

—¡Cállate! —Yu Yuehan respondió fríamente, sus labios se abrieron ligeramente.

—Nian Xiaomu, ¿escuchaste? El Joven Amo Han quiso que te callaras…

A mitad de sus palabras, Fang Zhenyi quedó perpleja. Giró su cabeza hacia Yu Yuehan, con asombro.

—Yo. Quiero. Que. Te. Calles —dijo con voz despiadada, pausando en cada palabra pronunciada.

—…¿Qué?

Fang Zhenyi estaba sorprendida.

El mayordomo entró en razón y compuso su cara. —¡Fang Zhenyi, en la residencia Yu, debido a que el Joven Amo no le permitió hablar, usted no debe farfullar! Si hay una próxima vez, le pediré que se marche inmediatamente.

Fang Zhenyi: —…

En éste punto, ¿no debería estar indignado y echar a Nian Xiaomu?

¿Por qué, por qué soy yo quien recibe los regaños?