—Doctor, ¿cómo está mi abuela? —preguntó Stella.
—Señorita Richard, no se preocupe, su abuela está bien ahora. Está en una condición mucho mejor comparada con hace dos años. En ese entonces, cuando venía al hospital, ni siquiera podía moverse por sí misma.
El doctor le entregó algunos informes y dijo:
—Pero gracias a ese hombre, que ha cuidado de su abuela todos estos años y ha utilizado el mejor equipo médico del mundo.
Después de escuchar las palabras del doctor, Stella quería conocer a ese hombre para poder agradecerle personalmente por cuidar de su abuela todos estos años.
—Doctor, ¿quién es ese hombre que cuida de mi abuela? —preguntó Stella.
—Señorita Richard, esa persona nos pidió mantener su identidad en secreto. Espero que la Señorita Richard no le cause problemas a nuestro hospital. Si quiere saber, puede preguntarle a su abuela. Tal vez ella sepa.
Stella escuchó esto y asintió.