Chereads / El retorno de los guerreros elementares / Chapter 3 - El olor a vinagre pica

Chapter 3 - El olor a vinagre pica

Y el tiempo paso.

En la nueva dimensión, un único planeta fue dividido en cuatro. El oeste era en su mayoría hecho por lava y rocas volcánicas, y allí los enanos y algunas criaturas raritas suelen vivir.

El este abrigaba la mayoría de las florestas y sus espíritus, era el hogar de los elfos y duendes, y algunos cambiaformas.

 Ya el sur, tenía el clima más uniforme, era el hogar de los humanos.

Al norte, no había nada además la naturaleza en su más fiero estado, pero allí, una familia persistía al largo de los siclos, todo podría cambiar, pero siempre había un Hesperus asentado en el norte, aunque allí no era el centro de su poder, desde el inicio había a lo menos un Hesperus guardando aquel lugar.

Esta era una regla que permaneció desde el primero y permanecería hasta el último.

Nadie más vivía allí.

En el centro, el consejo, formado por los descendientes de los líderes de la guerra antigua, que había ocurrido hace un milenio

El líder nominal era siempre un Hesperus, pues en el centro de aquello nuevo mundo denominado Eukarya, había una torre, y en esa, vivía un antiguo espíritu elemental, que, aunque todos consideraban su reina, aún estaba sujeta debajo de los líderes de las cuatro razas, o más precisamente, debajo de los Hesperus, que fuera controlar la elemental, no si envolvía con nada relacionado con el poder.

El consejo era formado por doce representantes y un Hesperus, cuatro de cada raza, cuatro de los elfos, cuatro de los cambiaformas, cuatro de los enanos y cuatro de los humanos, cuando no lograban entrar en un consenso, el voto del Hesperus tenía su valor.

Pero había personas que no estaban contentas con el poder que esa familia poseía en sus manos, aunque no les decía en su cara, pues, su fuerza, era innegable.

"La antigua elemental del agua he renacido" dijo Melkior el mayor entre los representantes de elfos, sus ojos distantes. "En el momento parece una niña, no sé por qué vino hasta nosotros, pero dijo que quiere vivir una vida normal y no involucrarse con el poder"

"¿Por qué no la destruiste? Si es una niña no es un problema" dijo Bedron uno de los príncipes de los humanos con desdén "El tiempo de los elementales ya paso, no deberían existir e intentar tomarnos el poder"

"En ningún momento ella dice que intentaría tomar el poder" dijo Melkior calmamente, su semblante que emanaba frialdad escudriñaba al príncipe, lo cual si esquivó de su mirada.

"Como pudimos creer en un elemental", musitó, pero todos lograron oírlo. "Si no vamos a arrestarla, debemos libertar la elemental de la luz, que nos ha ayudado desde siempre."

"Me parece que usted es mucho próximo a la elemental de la luz" dijo uno de los representantes de los enanos, Wenderl, sus ojos fijos en afilar la borda de su hacha, los brazos musculosos del enano estaban a vista llamando la atención de una de las representantes de los humanos que tenía una sonrisa transgresora, el enano la miro con calma "Niña, si continuar mirándome así, voy a hablar con su abuelo nuevamente"

La joven sonrió más largamente "Mi abuelo me dijo que, si pudiera atraparlo, me considera muy capaz, entonces no piense en disculpas enano" dijo juguetona, después volvió su mirada para Bedron, sus ojos fríos como hielo

"Si quiere libertar a la elemental que logró matar mitad de las tribus cambiaformas en un acceso de rabieta, cegar al rey de los enanos, y matar a tu propio padre, adelante, pero antes de eso, voy a hacerte un eunuco, para que a ella no sea más útil. No se engañe, solo estás aquí porque tu tío rogó por usted. Cierra el pico, si sabes lo que es mejor."

Bedron se puso en píe, furioso, pero el otro hombre representante de los humanos, lo hundió en su silla y sonrió cordialmente. La tensión entre los miembros despiertos se calmó. Una ola de un cálido sentimiento de paz atravesó la sala, los ojos de los elfos y de Sebastian se volvieron fríos.

A los miembros no despiertos, solo roncaron más abiertamente. Sí, no despiertos, pues la última representante de los humanos, y uno de los representantes de los enanos, estaban con las cabezas hundidas en la mesa, durmiendo abiertamente.

"Sebastian, ¿qué piensas?", preguntó al hombre que solo miraba sin dar ninguna opinión. Él sabía que, mientras aquel hombre se pronunciará contra, todos lo seguirían. Aunque no le agradaba, eso era un logro de los humanos. "¿Piensas que la elemental es segura?"

Los ojos castaños del hombre lo miraron sin emociones, pero una pisca de aburrimiento fue visto por Melkior que escondió la sonrisa. Él sabía que todo lo que su amigo quería hacer era salir de esa reunión, o matar a esos dos perros.

Pero tenía que mantener las apariencias.

"¿Qué eso tiene conmigo?", preguntó sin inmutar la voz, todo su cuerpo exhalaba aburrimiento

"La única misión de los Hesperus es controlar a la elemental de la luz, nadie más. Pero…", y con una sonrisa espeluznante curvando sus labios finos continuó.

"Si alguien quiere libertarla, tendrá que destruir hasta el último de los Hesperus, y si lograr hacer eso, la elemental será destruida también. O no lo recuerdas, cuando intentaran destruir nuestro clan en la última vez, ¿su elemental no rugió de dolor? Debe haber sido tan excitante de escuchar, es una lástima que aún no hubiese nacido, pero los relatos me hacen templar de emoción."

Los otros miembros del consejo temblaron con la locura en sus ojos, hasta los dos que dormían se movieron incómodos con el sadismo en la voz del hombre, Melkior tosió levemente escondiendo la risa, su amigo lo miró con enfado

"Por supuesto, entendemos su posición y de los Hesperus, Sebastian", dijo el representante de la tribu de los lobos serenamente, sin importarle la locura del humano. "Por eso aún estamos aquí, mientras los Hesperus están en ese consejo, los cambiaformas no se volverán contra los humanos. En relación con la elemental, es una niña y ha hecho mucho por nuestras fundaciones. Mi voto es dejar que viva como quiera. Si ella se vuelve contra nosotros, lucharemos, pero no creo que lo hará."

"De hecho" dijo Samyra una de las representantes de los elfos con un medio sonrisa, sus ojos brillaban en cuanto miraba algo lejos "La niña ya dijo que no quiere hacer nada además vivir una nueva vida, e para confortarnos hizo un voto en la lengua antigua, no es una elemental de sangre pura y si unió su esencia con la esencia de los elfos, si tornando una medio elfa y medio elemental"

"¡Cómo pudieron hacer algo así sin consultar el consejo!", siseó Bedron poniéndose de pie nuevamente con furia. "¿Quieren volverse contra nosotros?"

"Es bueno que la niña sí ha unido con ustedes", dijo el líder de los leones con una sonrisa que no ocultaba sus presas. "No me quedaría feliz si fuera con los humanos, sin ofensas Sebastian y Anya, pero vosotros no me dan mucha confianza"

"Entiendo completamente" dijo Anya con una sonrisa espeluznante dulce hacia Bedron "A mí tampoco me gustan algunos de nosotros"

Sebastian solo murmuro su asentimiento haciendo con que Bedron si quedara más furioso, la última humana que si quedara dormida suspiro "eso se quedará peligroso"

"¿Ya más alguien que sí hace contra la medio elfa?", preguntó Melkior viendo que la mujer se tensaba y Sebastian fruncía al ceño. "Hagamos una votación para que no quede dudas, pero debo informarlos: si quieren hacer daño a la niña, yo la he hecho mi hija, entonces, como padre, lucharé por ella."

"Felicidades" Sebastian cabeceó hacia él. "Espero que deje de sí importar con mi mujer y mis hijos ahora que tiene una hija"

Melkior tosió para ocultar la sorpresa por el celo que emanaba de su amigo, el olor a vinagre hizo su nariz picar.

No era que él lo importunara demasiado, era su hermana después de todo, él tenía derecho de importunar, pero su amigo era muy posesivo… "Lo siento, hermana… ¡Pero fue su elección, fighting!", los otros se movieran incómodos, pero aun así concordaron. Parecía que el hijo mayor de los Hesperus estaba demasiado hablante hoy.

"Los cambiaformas apoyan su existencia" Dijeran los cambiaformas

"Los enanos la apoyan también", dijo Wenderl ignorando al enano durmiendo

"Yo la apoyo" Dijo Anya

Bedron y el hombre a su lado fruncieron el ceño, la votación no estaba del lado de ellos, si todos los humanos lograban unanimidad en su voto, podrían lograr una consideración, sus ojos se volvieran a mujer dormida, pero se desviaron rápidamente.

"A mi ver hay diez votos a favor y dos contras", dijo Melkior calmamente. "Entonces eso, si quedara como un presupuesto, todo lo elemental que nacer después de hoy, desde que únanse a una de las razas o tribus, podrán quedarse en Eukarya, si no lo quieren, deberán echarse lejos."

"Me parece bueno", dije Wenderl cabeceando y los otros acordarán, "Entonces podemos encerar por hoy"

"Estoy saliendo entonces" Dijo Sebastian y sin ningún sonido sumió

"Tks" dijo Melkior chasquido la lengua "Tonto superprotector"

"¿No eres igual?" Samyra echo una sonrisa a su esposo "Desde que Sara apareció, te pareces un bobo que nunca vio un crío"

"Es diferente" dijo ansioso, su mujer había hecho una barrera para que nadie los oirá "Sara es…"

Samyra sonrió nuevamente y ambos se alejaron en un paso con los otros elfos cerca. Los enanos y los cambiaformas fueron luego después, dos de ellos cargando el enano adormecido, mientras Wenderl huya de Anya, y solo cuando Bedron y Alexandro dejaran la sala con medo de quedarse solo con la mujer dormida que esa acordó, dando un bostezo y miró la dirección donde los dos fueron con enojo y precaución

"¿Debo huir?", se preguntó con el ceño fruncido. "Va a haber sangre… ¿Debo avisarlos? Pero si avisarlos… ellos no lograrán… voy a huir… tengo miedo…"

Levantándose deprisa, ella estacó cuando un movimiento del viento la paralizó, y un joven de ojos grisáceos surgió delante de ella. Su sonrisa era escalofriante y la mujer tragó en seco.

"Simon Hesperus" musito sintiendo su alma dejar su cuerpo.

Acabó…