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—Lo siento, todos los que están detrás de mí, pero he encontrado a la persona que buscaba. Gracias a todos por ser tan entusiastas ayudándome —Zhang Menglong sintió un alivio al recibir el mensaje sobre el Frappuccino de Starbucks con doble cantidad de azúcar.
—¡Ah! Todo es tu culpa. Te pedí que vinieras de compras conmigo, pero tenías que jugar videojuegos. Si hubiéramos salido unos minutos antes, ¡podríamos haber conseguido ese dinero!
—¡Aaah! ¡Nunca pasaré tanto tiempo maquillándome de nuevo! Cien mil yuanes, ¡y solo estaba a cuatro personas de estar al frente!
—¡Jajajaja! Soy el último, mi suerte es demasiado buena.
—Me pregunto quién será ese pez gordo bien conectado que encontró a la persona, un millón doscientos mil yuanes, hombre. ¡Podrías trabajar diez años y aún así no ahorrar tanto!
—Guapo, ¿estás buscando a alguien más?
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