Debido a la tensa relación entre nuestras familias, nuestras interacciones se habían limitado a lo estrictamente necesario para pasar por cortesías educadas. Aunque ella había respondido con un afirmativo 'sí', no estaba seguro de cuánto recordaba Diana realmente de él.
—Perfecto. Él realmente es un pequeño caballero encantador incluso a su edad. Además, es el único heredero de la familia Vulkan y pensamos que es la persona perfecta para que te cases —explicó papá con una sonrisa satisfecha.
Mis ojos se abrieron antes de volverse a mirar a mi hermana para ver su reacción ante la noticia que papá acababa de darnos. He oído hablar de matrimonios arreglados antes y algunos de nuestros amigos ya tenían sus propios prometidos de los cuales sus padres les habían hablado; sin embargo, nunca pensé que llegaría el día en que mi hermana también tendría uno.
—¿Tengo que casarme con él? —preguntó Diana.
