—Nadie podía refutar las palabras de Emily. Grace, Sophia y Logan sabían desde el comienzo que el vestido pertenecía a Emily.
—Logan sintió que su autoridad estaba siendo socavada. Señaló la nariz de Emily y regañó —¿Cómo te atreves a contradecirme? ¿No tienes maneras ni respeto?
—Grace rápidamente palmeó el pecho de Logan, pretendiendo consolarlo —Querido, no te enojes tanto. Emily es tu hija. ¿Cómo puedes ser tan duro con tu propia hija?
Aunque Logan estaba enfadado, no podía permitirse el lujo de tensar demasiado su relación con Emily ahora.
—Emily estaba saliendo con Vicente y había ganado el favor de Meggie. Emily ya no era una chica que se pudiera intimidar fácilmente; Logan tenía que considerar las consecuencias de su ira.
—Logan señaló hacia el desván arriba —Ve al desván y quédate allí. Piensa bien en lo que hiciste mal hoy. ¡No bajes a comer hasta que lo descubras!
—Querido, es tan fácil pedir comida a domicilio ahora —dijo Grace.