Emily solía realizar las tareas del hogar con frecuencia, así que era rápida en estas tareas.
—Muy bien —Emily se secó el sudor de la frente—. Es hora. Apúrate y sube al escenario. Si llegas tarde, el jefe estará furioso.
Pensando en el temperamento explosivo de Jackson, las modelos se apresuraron al salón de exposiciones para hacer sus preparativos finales.
Luego de que todas se fueron, Emily limpió la mopa y lavó el suelo otra vez, esperando en silencio a que se secara.
A las diez en punto, el auto show comenzó oficialmente.
El presentador introdujo apasionadamente los modelos de coches destacados del día, su voz retumbante.
Emily se apoyó a un lado y escuchó en silencio, maravillándose del profesionalismo del presentador.
Perdida en sus pensamientos, de repente escuchó el sonido de pasos de zapatos de cuero en la puerta.
¿Quién vendría detrás del escenario a esta hora? ¿Jackson?
Emily frunció el ceño, reuniendo toda su energía para enfrentarse a Jackson no sería fácil.